En el último día de su visita a Israel, Alberto Fernández tuvo su reunión oficial con el primer ministro de ese país, Benjamín Netanyahu. Según información oficial, ambos acordaron en su compromiso de “saber la verdad” sobre el ataque terrorista contra la AMIA, y además coincidieron en promover un mayor acercamiento entre los dos países para “aprovechar las oportunidades” recíprocas.

Pero tanto en el encuentro como en comunicaciones a través de las redes sociales, el presidente argentino hizo públicas posiciones y argumentos que muy probablemente no son los que querría escuchar el gobernante del país de Medio Oriente. Por ejemplo, las apelaciones de Fernández a “la paz y el pleno respeto a los derechos humanos”, y su “sueño” de ver a Israel “en paz con sus vecinos, especialmente con el pueblo palestino”, y a favor de “la existencia de los dos Estados” (israelí y palestino).

El posicionamiento del mandatario de nuestro país en temas de máxima sensibilidad para Israel fue muy distinto del mantenido por Mauricio Macri. Este último fue un fiel seguidor de las estrategias internacionales israelíes -y de Estados Unidos-. 

En particular, aunque siempre la información sobre el tema fue mínima, Macri y Netanyahu acordaron grandes negocios por los cuales Argentina compró armamento y tecnología bélica, entre otros costosos gastos. Así ocurrió por ejemplo durante la visita del primer ministro israelí a nuestro país en septiembre de 2017, como informó en forma exclusiva en su momento el periodista Horacio Verbitsky.

Ayer, antes de emprender el regreso a Buenos Aires, Fernández hizo públicas consideraciones de gran importancia a través de su cuenta oficial de Twitter. En uno de los mensajes hizo alusión al reconocimiento de Argentina, y de Naciones Unidas, a la existencia de un Estado palestino.

Dejo esta hermosa tierra con un sueño: verla en paz con sus vecinos y especialmente con el pueblo palestino. Nuestro país reconoce, por convicción y por respeto a las decisiones de Naciones Unidas, la existencia de los dos Estados y siempre propició la convivencia pacífica.

— Alberto Fernández (@alferdez) January 23, 2020

Otro de los tuits del titular del gobierno nacional hizo referencias a la tragedia de la última dictadura argentina y reivindicó el Estado de Derecho, la paz y los derechos humanos.

Soy presidente de un país que ha vivido su propia tragedia de persecución, tortura, desapariciones y muertes. Después de tanto sufrimiento, los argentinos valoramos más que nada la vigencia del Estado de Derecho. Confiamos en la paz y en el pleno respeto de los derechos humanos.

— Alberto Fernández (@alferdez) January 23, 2020

Luego de su reunión oficial de ayer, el presidente de Argentina y el primer ministro de Israel hicieron una breve declaración ante la prensa, acompañados por sus respectivas parejas, Fabiola Yáñez y Sara Netanyahu. 

En la ocasión, el anfitrión dijo: “Sé que es la primera visita, la primera de muchas. No tenemos dudas que podemos fortalecer la amistad y aprovechar las oportunidades que se nos abren en materia de ciencia, tecnología y otros ámbitos”. 

También manifestó que existen avances para lograr vuelos más directos entre Argentina e Israel, y agradeció la actitud argentina de haber servido de refugio a muchos judíos que debieron huir del Holocausto.

Netanyahu “felicitó” a Fernández por mantener a Hezbollah en la lista de organizaciones terroristas. Esa medida, adoptada el año pasado por Macri, es importante para Israel y Estados Unidos porque la mencionada organización -que tiene su base en Líbano y es al mismo tiempo un partido político y una milicia armada- tiene apoyo de Irán.

Además, el jefe del gobierno israelí elogió al jefe de Estado argentino por su “lucha en pos de la verdad en el esclarecimiento” del ataque terrorista contra la mutual israelita AMIA, perpetrado en Buenos Aires en 1994 y donde fueron asesinadas 85 personas.

Fernández, por su parte, expresó: “Nuestro compromiso por saber la verdad sobre lo que pasó en la AMIA es absoluto. Fue nuestro compromiso y es nuestro compromiso. Necesitamos saber qué fue lo que pasó, por la memoria de todos los que murieron ahí y en la Embajada de Israel. Ese compromiso es inalterable”, reafirmó el presidente de la Nación.

Otras reuniones

Antes de verse con Netanyahu, Fernández estuvo en la residencia oficial con el presidente de Israel, Reuven Rivlin. En ese país rige sistema de gobierno parlamentarista, donde conviven un primer ministro y un presidente. El argentino concurrió a la residencia oficial del anfitrión, quien además mantuvo encuentros similares con otros visitantes de estos días.

Igual que en la charla con Netanyahu, con Rivlin también acompañó a Fernández toda la comitiva. La conversación duró unos 40 minutos y, según contaron voceros de la delegación argentina, no se habló de la causa que investiga la muerte del fiscal Alberto Nisman.

El jueves fue la jornada central de las conmemoraciones realizadas en el marco del Foro Internacional de Recordación del Holocausto y contra el Antisemitismo, donde participaron unos 40 gobernantes de todo el mundo, entre ellos el argentino.

Ese día por la noche, Fernández destacó por Twitter la “importancia” de la comunidad judía en Argentina, volvió a recodar a las víctimas del Holocausto, “esa tragedia que sufrió el pueblo judío pero dolió a todos” y mencionó “la propia tragedia de los argentinos, con una dictadura que se llevó a 30 mil personas, con torturas, exilios y persecuciones”.

Tras participar del foro internacional, el primer mandatario y parte de su comitiva estuvieron ayer en su hotel con el principal líder de la oposición israelí, Benny Gantz.

El miércoles, a Europa

Para hoy está prevista la llegada del presidente argentino a Buenos Aires. El viaje a Israel, como informó , también sirvió para programar su viaje a Europa la semana que viene. Allí hará un fuerte despliegue diplomático para intentar apoyos políticos de diferentes gobiernos con vistas a la obligada renegociación de la deuda externa heredada de la gestión de Macri.

El próximo miércoles partirá hacia Italia y el viernes 31 será recibido en el Vaticano por el papa Francisco. Posteriormente se reunirá con Roma con el presidente italiano Sergio Matarella y con el primer ministro Giuseppe Conte. En días posteriores se encontrará en Madrid con el titular del gobierno de España, Pedro Sánchez, y luego en París con el presidente de Francia, Emanuel Macron.