Columnistas
08/07/2017

Análisis rionegrino

Megaminería: recursos y crecimiento, o negocios y daño ambiental

Megaminería: recursos y crecimiento, o negocios y daño ambiental | VA CON FIRMA. Un plus sobre la información.

El gobierno provincial ha confirmado las intenciones de poner en marcha nuevamente el denominado “proyecto Calcatreu”, que significa habilitar la explotación de una mina de oro y plata ubicada en cercanías de Ingeniero Jacobacci, en la región sur de Río Negro.

Hernán D´Andrea

[email protected]

A fines del año pasado pudieron observarse los primeros indicios de que se volvería sobre el tema, a partir de una presentación del potencial minero en la embajada de Canadá en Buenos Aires que realizó el secretario de Minería provincial, Juan Pablo Espínola.

“Es nuestra intención propiciar este tipo de encuentros para atraer las inversiones que Río Negro necesita para el desarrollo de todo su potencial minero”, contó Espínola en aquella oportunidad.

Como se sabe, Canadá junto a Australia son las mayores potencias mundiales en la materia y se presume que en una extensa zona de la región sur rionegrina, desde Jacobacci a Pilcaniyeu, existe una de las reservas mineras más importantes del país.

Tanto el intendente de Jacobacci, Carlos Toro, como el propio gobernador Alberto Weretilneck, si bien dijeron que se trataba por ahora de reuniones de análisis con posibles interesados, confirmaron la intención de reactivar el proyecto en la búsqueda de atraer inversiones, generar empleo y revertir la situación para las poblaciones de una de las regiones más castigadas de la provincia.

Historia

Calcatreu es un yacimiento de oro y plata ubicado en la meseta patagónica, a unos 60 kilómetros en línea recta de Ingeniero Jacobacci.

La propuesta de explotación por lixiviación con cianuro fue realizada a la provincia en 1998 por la empresa Aquiline Resources Incorporated, propietaria de los derechos que luego vendió en su totalidad a la canadiense Pan American Silver Corporation, durante la gestión de Pablo Verani al frente de la gobernación de la provincia.

Las actividades comenzaron y fueron sufriendo demoras como consecuencia del rechazo de numerosas organizaciones sociales e incluso por representantes de comunidades originarias, quienes manifestaron que se afectaban derechos ancestrales de propiedad de la tierra.

Ya en 2004 la empresa presentó los estudios de impacto ambiental para lograr el permiso de explotación.

En medio de ese proceso, en julio de 2005 el gobernador Miguel Saiz, sucesor de Verani, envió un proyecto de ley para prohibir el uso de mercurio y cianuro en las actividades mineras. La Legislatura sancionó el 21 de julio de ese año la ley 3981 que cumplió con ese objetivo.

La explotación de Calcatreu quedó paralizada, mientras los empresarios analizaban la posibilidad de realizar la extracción a través de otros métodos que no fueran a cielo abierto y con utilización de cianuro.

Años después, el 29 de diciembre de diciembre de 2011, pocos días después de asumir la gobernación Carlos Soria, esa ley quedó derogada y reemplazada por la 4378, la cual volvió a permitir ese tipo de explotaciones y abrió la posibilidad de que se reanudaran las labores.

En la nota de elevación de la propuesta a la Legislatura, Soria hacía referencia a la situación en que se encontraba la provincia tras la erupción del volcán Puyehue, por lo que el gobierno “requiere avanzar en alternativas que coadyuven a superar la actual crisis con sentido de desarrollo".

Muchos rionegrinos recuerdan aquel día como el “jueves negro”, ya que en esa misma sesión y también a propuesta del nuevo gobernador, se aprobaba la denominada ley de disponibilidad.

Presente

Desde aquel momento hasta la actualidad, algunas organizaciones sociales siguieron reclamando por volver a la ley anterior que prohibía este tipo de actividades.

Plantean que laexplotación minera de estas características es de alto impacto ambiental en tanto requiere de la utilización de grandes espacios, explosiones, movimientos de suelo, gran cantidad de agua y uso de sustancias químicas para el proceso de lixiviación y separación de metales de la roca, así como disposición de escoria y piletas de drenaje.

No hubo demasiado movimiento hasta la aparición de aquella información que daba cuenta de la presentación del potencial minero rionegrino ante empresarios canadienses en 2016.

Poco después, el 17 de febrero de 2017, cuando el gobernador acompañó a Mauricio Macri a España, se planteó ante inversores la necesidad de desarrollar la minería inexplotada aún en la Patagonia, e incluso el presidente blanqueó que “hemos puesto el foco en aprovechar la riqueza acuífera argentina, que está subexplotada”.

Luego, Río Negro y el resto de las provincias, a excepción de La Rioja, Chubut, La Pampa y San Luis, firmaron el Pacto Federal Minero.

Ahora se supo que la empresa Pan American avanzó en tratativas con una firma de capitales argentinos que analiza la reactivación del proyecto Calcatreu.

Consultado sobre el particular el intendente de Jacobacci, Carlos Toro, confirmó la existencia de conversaciones pero se mostró cauteloso, y pidió que la instalación del tema no genere “discusiones y enfrentamientos”. Dijo que “debemos ser muy responsables al momento de emitir alguna opinión, conocer del tema, estudiar y debatir, es decir generar una discusión con la mayor responsabilidad posible”.

Luego argumentó que “la ciudad atraviesa una situación compleja, y si bien tenemos una necesidad de trabajo muy importante que podría cubrirse con la actividad minera, no nos vamos a expedir hasta tanto el tema sea debatido en profundidad”.

El jefe comunal dije además que, si se decidiera a reiniciar esa actividad, “deberá existir un acuerdo comunitario y se deben tener las garantías de que la explotación se realizará con una tecnología que genere el menor impacto posible sobre el medio ambiente”.

Finalmente aclaró que “es cierto que todo de alguna u otra manera contamina. Si lo vemos ahora, para la construcción de la nueva traza de la ruta 23 se han volado cerros y con ellos se afectó a la forestación autóctona, y a la fauna, pero bien sabemos que son acciones necesarias”, consideró Toro.

Una postura similar parece tener el gobernador Weretilneck, quien dijo que “este tipo de acciones empresariales en minería, gas, petróleo o la actividad nuclear, son fuertes inversiones de muy largo plazo que tienen un alto impacto en la generación de empleo y en la actividad económica en general”.

Confirmó que “hemos tomado contacto con algunos de los interesados en reencauzar el proyecto, y lo que más nos satisface es que el grupo empresarial que está analizando la posibilidad de comprar el yacimiento es un grupo argentino con lo cual cambia un poquito la óptica del proyecto”.

Luego aclaró que “el gobierno prioriza dos aspectos en este tipo de situaciones. Por un lado el tema de la protección y el cuidado del medio ambiente, tema que para la provincia es innegociable, pero nosotros creemos que se puede hacer minería respetando el medio ambiente, y para esto se necesitan legislaciones claras y un Estado absolutamente presente y estricto en lo que es el cumplimiento de las leyes”.

Se mostró convencido en que “para Jacobacci y para toda la región sur, tener la posibilidad de la explotación de un proyecto minero de estas características es sumamente importante, sobre todo con los problemas de empleo y de ocupación que tenemos”.

Aclaró que “llegado el momento conversaremos y si es necesario consultaremos a los pobladores o a las comunidades que estén alrededor del proyecto Calcatreu, o sea los beneficiados y perjudicados por este tipo de actividades. No es lógico generar algún tipo de mecanismo para que opinen personas que estén a 300 o 500 kilómetros que no saben de la realidad local, no sufren los problemas de empleo, los problemas del campo, etcétera”.

En definitiva, todo indica que en poco tiempo más se retomará al proyecto de explotación de oro y plata en aquella zona, y se habilita nuevamente en los hechos el desarrollo de la megaminería en territorio provincial.

Seguramente el tema se instalará en medio de la campaña electoral y comenzarán a escucharse las voces a favor y en contra del proyecto.

Se producirán las discusiones mediáticas habituales que, en la mayoría de los casos, tienen preponderancia de opositores, no porque haya más, sino porque son los que profundizan la difusión, y algunos políticos que aprovecharán el momento para dar su mensaje y que insistirán en que, a pesar de lo que dice el gobernador, “es imposible controlar” a las empresas mineras, no sólo en nuestro país sino en todo el mundo.

Pero llegado el momento, si el oferente está dispuesto a realizar la inversión, el gobierno tiene todos los elementos necesarios como para otorgar el permiso. Como máximo, hará una consulta entre los habitantes de Jacobacci y alrededores para conocer su opinión que, sin dudas, será mayoritaria a favor del proyecto.

Vale la pena recordar que cuando Saiz impuso la prohibición, hubo varias voces de habitantes de la región en desacuerdo con la medida, incluso de funcionarios y legisladores de su propio partido, y que cuando Carlos Soria prometió en la campaña del 2011 derogar aquella ley y reactivar el proyecto, se impuso en las elecciones desarrolladas en Jacobacci, que en ese momento era un fuerte reducto del radicalismo.

29/07/2016

Sitios Sugeridos


Va con firma
| 2016 | Todos los derechos reservados

Director: Héctor Mauriño  |  

Neuquén, Argentina |Propiedad Intelectual: En trámite

[email protected]