- Me viene justo, ¿me puede explicar cómo es que el presidente se metió en el escándalo del Correo?

- Muy simple: no hay ningún escándalo.

- ¿El bochorno le gusta más?

- No adjetive, es de mal periodismo.

- Pero la fiscal dice que el gobierno benefició a la familia del presidente con una quita del 98,2% de la deuda que tenía con el Estado…

- A papá Franco no le perdonamos un mango, lo dijimos el primer día.

- Según la fiscal esa quita significa más de 4.000 millones de pesos y proyectada a 2033 más de 70.000...

- Usted mismo lo está reconociendo.

- ¿Qué cosa?

- Que no le perdonamos un mango.

- Al contrario, lo que le digo es que…

- Uh viejo, cuánta alharaca por decir la verdad.

- ¿Qué verdad?

- Que no le perdonamos un mango ¿De qué estamos hablando, de la abuelita zurda de Gómez Centurión?

- Pero usted insiste en que…

- El que insiste con el relato K es usted. Serán 4.200 millones de mangos, serán 70.100 millones de mangos, pero un mango no es seguro.

- No me parece gracioso.

- Porque no lo es.

- Sigue sin contestarme.

- Nosotros a los argentinos siempre le decimos la verdad.

- ¿Y entonces?

- No es lo mismo un caramelo que 4.200 millones de caramelos, no es igual un sushi que 70.000 millones de…

- Está bien, está bien, no aclare que oscurece.

- Sabe qué pasa, a los argentinos ya no se les puede mentir más…

- Por eso mismo.

- Mírelo de este modo: estamos construyendo una nueva Argentina.

- ¿Y eso que tiene que ver?

- Si vamos a perdonar, perdonamos a lo grande.

- Aún si fuera así no es ético que el perdón sea del presidente a su propio padre.

- ¿A no? ¿Y a quien va a ser? ¿Al Pato Donald?

- Esto no es una cuestión familiar.

- ¿Cómo que no? Jamás pensé que el periodismo K podía ser tan cruel.

- No soy K ni cruel, soy un periodista que quiere saber…

- Ahh, un periodista que pregunta… ¿Y el dolor que provoca todo esto? ¿Eso no le interesa?

- No entiendo a qué se refiere.

- Nooo… usted primero tira la piedra y ahora no entiende.

- No tiro ninguna piedra, usted es el que está dramatizando algo que…

- ¿Dramatizando? ¿A usted le parece que yo estoy dramatizando con todo lo que tuvo que pasar el Mauricio niño para llegar a ser el Mauricio líder que es hoy?

- Sigo sin entender a dónde quiere llegar.

- Usted no entiende cuando no le conviene ¿Acaso no se acuerda cuando papá Franco le puso un 5 a la gestión de su hijo?

- Si pero…

- Pero nada mi viejo. O se olvidó cuando papá Franco decía que su hijo, el hoy presidente de todos los argentinos, era un pelo…

- Insisto en que eso…

- Insista menos y piense en el dolor…el dolor… de esa pobre criatu… criaturita…

- ¿Qué le pasa?

- Nada, me quebré…

- Pero…

- Uste… sabe…sabe lo que significa… que su propio padre lo haga presidente de Boca para… para sacárselo de encima…

- …

- ¿Tiene una carilina?

- Si, como no…

- Gracias.

- …

- ¿Me da otra?

- Claro.

-…

- No se ponga así…

- Y cómo me voy a poner con lo que sufrió aquel ser indefenso que daba sus primeros pasos cuando…

- Pero esto es otra cosa.

- ¿Otra cosa? ¿Usted cree que es fácil escuchar al padre decir, mientras uno da los primeros pasitos como presidente, que si no sabés conducir una empresa no podés conducir un país? ¿Le parece que se puede vivir en paz con eso?

- Yo no sé de qué manera todo lo que usted me cuenta…

- ¿Me da otra?

 - ¿Otra qué?

- Carilina…

- Si, como no…

- Gracias, la próxima se la devuelvo. El martes entra una partida desde China…

- No hace falta…

- Entonces tome…

- ¿Qué hace?

- Se la devuelvo.

- Pero está sucia…

- A usted nada le viene bien viejo, si devolvemos el Correo se enoja si no lo hacemos nos denuncia…

- Yo no denuncio nada, solo le pregunté…

- Bueno, si me preguntó no me interrumpa que pierdo el hilo. Le decía, ¿a usted no le gusta que su hijo, cuando se equivoca, le ponga una mano en el hombro y le diga: perdón papá?

- Sí, claro.

- ¿No le gusta que ese niño, al que recibió del vientre de su madre, al que le cambió los pañales todos sucios, al que le limpió los mocos, le diga te perdono papá, te perdono 4.000, 70.000, 100.000 millones de pesos?

- Bueno, yo no tengo…

- ¿Y entonces cómo puede rasgarse las vestiduras populistas ante un acto de amor in-con-me-su-ra-ble, porque de eso se trata, de un acto de amor, un acto de amor del niño Mauricio a papá Franco?

- Veo que el tema lo sensibiliza, pero déjeme decirle que esto no tiene nada que ver con la relación…

- ¿Nada que ver? ¿Cómo puede el odio volver tan insensible a una persona?

- No quiero polemizar con usted si esto lo afecta tanto pero acá no hay odio, acá hay información y dinero público.

- Entonces si no quiere polemizar, si es un argentino “buena gente”, si quiere informar correctamente, vuelva a su escritorio y escriba, escriba esta verdadera historia amor…

- Pero…

- Pero nada. No siempre su profesión le va a dar esta posibilidad, la posibilidad de escribir algo que puede sacarle un lagrimón al CEO más frío, más insensible, más calculador que tenemos en el gobierno.

- Usted dice que…

- Yo no digo nada. Vaya y escriba, por favor, que yo me voy a hacer un té de tilo a ver si se me pasa.