El selecto club privado Rincón Club de Campo S.A. enclavado a orillas del Río Neuquén en la capital neuquina, desde hace años viene ocupando de forma ilegal casi 8,0 hectáreas de terrenos pertenecientes al Área Natural Protegida Bardas Norte, además del cerramiento de una calle pública. No deja de causar asombro cuando afirmamos que esto es una “Toma VIP”, llevada a cabo por uno de los country más antiguos de la ciudad y, sobre todo, el más elegido como morada ya que allí viven y/o han vivido ricos, famosos, personalidades destacadas, gobernador, ex gobernadores, ex intendente, ex ministros, jueces, empresarios y funcionarios, etcétera. 

Como se ve, no se trata de familias vulneradas por las políticas del Estado que deciden desafiar la ley ante la desesperación por la falta de un pedazo de tierra para levantar una vivienda o la imposibilidad de pagar un alquiler. Aquí el caso es distinto, esta es una Sociedad Anónima que ocupa terrenos que pertenecen al patrimonio municipal sin ningún sustento legal. En un principio, a este club privado solo se le autorizaron 3,35 hectáreas sin opción a compra para una cancha de golf, pero, sin que medie ninguna autorización, corrieron el alambrado más allá y cercaron 4,35 hectáreas adicionales a las permitidas. Nunca renovaron el primer y único permiso al momento de su vencimiento. Por alguna razón, este pequeño grupo de personas piensa que el cumplimiento de la ley no es para ellos, y los distintos estamentos del Estado neuquino responsables y encargados de persuadir a esta gente de lo contrario, siguen indiferentes y en silencio ante tan flagrante irregularidad. ¡Es realmente indignante y de no creer! 

En estos días pasados, este club privado ha sumado un nuevo capítulo a su historial de prepotencia e incumplimientos ya que, según declaraciones del jefe comunal, se les perdonarían todos estos años de ilegalidad a cambio de un aporte de material eléctrico y vial para desarrollar el paseo costero, en terrenos también apropiados de forma ilegal sobre la costa del Río Neuquén, además de otra calle pública cercada. Una ayuda muy evidente del Ejecutivo municipal que intenta negociar impunidad e ilegalidad por insumos materiales. Como compensación por esto, la comuna les permitiría continuar con el uso por 20 años de las casi 8,0 hectáreas que ya ocupa el country para la cancha de golf, la cual, y según manifiestan algunos vecinos linderos, no tiene demasiada concurrencia de aficionados a este deporte. 

“Si es para los amigos, mejor” es la frase que acuño alguna vez un político vernáculo que ostentó el más alto cargo provincial y que, según versiones periodísticas, viviría también en este selecto club. La frase hacía referencia sobre los préstamos dinerarios que otorgaba el Estado neuquino para emprendimientos. El problema fue que paso el tiempo y “los amigos” nunca los devolvieron. Ellos también, por alguna razón, se sentían impunes y amparados por algo y/o alguien, como sucede hoy con este country privado que de forma ilegal se apropia de tierras públicas, corta calles y cerca parte de la costa de un río. Para ellos las normas son letra muerta.

Quien debería terminar con este avasallamiento institucional es el Intendente, pero, muy por el contrario, está intentando blanquear una ilegalidad proponiendo una negociación en conjunto de dos situaciones totalmente distintas, es más, lo único que las une son, el infractor (que es el mismo) y la impunidad y el desapego por el cumplimiento de las normas con que se vienen manejando. Es asombroso como se pretende sobreactuar de una forma grotesca, y transformar un hecho reñido con la legalidad en otro cuasi virtuoso, y para eso le encontraron un nombre amigable, “acuerdo histórico”. Más que un acuerdo histórico yo diría, “una vergüenza histórica para la ciudad”. 

En realidad, la cancha de golf y otras actividades de este club que dicen realizan hacia la comunidad, son solo pasos intermedios para arribar al objetivo final que es, comprar las tierras. Detrás de esa fachada utilizada se esconde un potencial negocio millonario con tierra pública de la ciudad. Los casi 80.000 m2 (8,0 hectáreas) que podría venderle el municipio a precio fiscal, inmediatamente ingresan al patrimonio de esta Sociedad Anónima y pasan a engrosar el mercado inmobiliario. ¿Cuánto les parece que es el precio de mercado de 1,0 m2 de terreno en uno de los country más caros de la ciudad, con algunas casas que valen u$s 800.000, cercado, con cámaras y personal de seguridad con estricta custodia las 24 horas? 

Esto de la compra de las tierras no es una hipótesis de análisis que estoy planteando ¡no! lo dijeron ellos mismos allá por el año el año 2013, cuando el club privado dio inicio a las actuaciones en el Expediente: CD-010-E-2013, en donde elevaban un “Pedido de Compra de Tierras”. Tiempo después, en el mismo expediente, el Órgano Ejecutivo Municipal incorporaba un Proyecto de Ordenanza en el que expresaba la intensión de venta a precio fiscal de esas tierras que ocupa el club. Resulta llamativa esta situación ya que, cuando se las cedieron en el año 1994/96, fue a través de una ocupación precaria por 10 años más un período extra. La ordenanza era muy clara y decía, “sin opción a compra” debido a que las tierras ya eran parte de un Parque Natural. Así y todo, la autoridad de aplicación daba su acuerdo para la venta. En 2019 el Ejecutivo presento un informe con un proyecto de mensura para el Parque Bardas Norte, pero, lo que llamó la atención fue que dejaban afuera las casi 8,0 hectáreas de este club privado. Otra prueba más de que la intensión sigue siendo comprar la tierra, y para eso, el country necesita aliados, en el Municipio y en el Concejo Deliberante. 

Cuando fui concejal de la ciudad, presentamos varios proyectos para que se restituyan las tierras al municipio. Y cuando tuvimos el dictamen de la Sindicatura Municipal que nos daba la razón, continuamos peticionando hasta agotar las vías administrativas del Concejo Deliberante. Al no obtener ningún tipo de respuestas, hicimos la presentación a la justicia para que determinara si este no era un caso de mal desempeño de la función pública. La causa termino archivada. Además, nunca conseguimos el acompañamiento de los dos bloques mayoritarios del deliberante. Dentro de los proyectos presentados proponíamos la restitución de tierras y la creación en estas casi 8,0 hectáreas, de un Parque Agreste Integral abierto para que disfruten “todos los vecinos de la ciudad” además de la práctica del deporte. No conseguimos los votos.

Lamentablemente la frase “los ricos no piden permiso”, es literal en Neuquén, y la toma VIP de Rincón Club de Campo S.A., es un ejemplo. Acá no hay intimación a desalojar, ni desalojo. Esto no se puede permitir, estamos hablando de un Área Natural Protegida, que cumple la función de pulmón de la ciudad, por lo que no cabría otra solución que recuperar esas tierras como patrimonio ambiental para las actuales y futuras generaciones. No se puede dejar abierta la posibilidad para que algún día se las venda. 

Preocupan las declaraciones del jefe comunal y alguno de sus funcionarios que con una actitud cuasi timorata pretenden justificar las distintas tramoyas que ha venido utilizando esta Sociedad Anónima para quedarse con estas tierras. Intentar blanquearles una ilegalidad de años apelando a frases amañadas como: “un acuerdo histórico”, o la otra, “en otros tiempos esto hubiese sido imposible”, nos da una muestra clara a lo que vinieron. Lo que nos espera hacia el futuro, si ya empezaron a echarle mano a la post verdad (mentira emotiva).