El ministro de Energía y Minería de la Nación, Juan José Aranguren, anunció ayer el nuevo tarifazo al gas, que en la zona patagónica será de hasta un 36%, mientras que en el resto del país alcanzará una suba de hasta 40%. El nuevo cuadro tarifario comenzará a regir el próximo domingo. 

El aumento, que en promedio será del 32% según los números oficiales, duplica la meta salarial impuesta por el gobierno de Cambiemos. 

Según los planes de Aranguren, esta no será la última revisión tarifaria. En octubre se vendrá la próxima. Desde que el ex CEO de Shell se hizo cargo de la cartera de Energía, el precio del gas en el ingreso al sistema de transporte aumentó un 262% al pasar de 1,29 dólares el millón de BTU a los 4,68 dólares actuales. Todavía restan tres tarifazos más hasta el fin del mandato de Mauricio Macri: uno este año y dos en 2019 para llevar el gas a 6,38 dólares del millón de BTU. Es decir, que en su gestión, la alianza Cambiemos habrá incrementado casi un 400% el precio del gas en moneda estadounidense. Al cotizar en dólares, cualquier cambio de los cuadros tarifarios absorberá las devaluaciones del peso. 

Todo este esquema va acompañado de una reducción de los subsidios al consumidor. En 2016, el usuario residencial pagaba apenas el 12% del costo del gas y el resto era afrontado por el Estado. Hoy no sólo paga el gas más caro, sino que el consumidor afronta el 41 por ciento del costo. Hacia fines de 2019, se eliminarán totalmente los subsidios, a excepción de la Patagonia que dejará de percibirlos en 2021. 

A partir del domingo, en Neuquén y Río Negro los usuarios R1 a R23, que son los que menos consumen, tendrán una suba del 36% y pagarán, en promedio, 198 pesos mensuales por el gas, más el costo de transporte y distribución que se actualizará semestralmente por inflación. Los usuarios R31 y R33 tendrán un incremento del 31%, con lo cual pasarán a pagar unos 551 pesos por mes. 

Mientras que los hogares que más consumen, los R34, pagarán un 29% más: 1171 pesos en promedio. La garrafa social pasará de los 185 pesos actuales a 216 pesos.

"Los usuarios de mayor consumo ya habían visto elevada su factura, debido a que antes llegaron a los valores de recuperar los costos de producción", argumentó Aranguren. Aseguró que en los próximos cuatro años habrá un excedente en la producción de gas de 30 a 35 millones de metros cúbicos", y prometió que eso hará que "bajen los precios que paga el consumidor".

A sabiendas del fuerte impacto en los bolsillos de las familias que están teniendo los tarifazos, el gobierno estudia un mecanismo para financiar el pago del gas consumido en invierno de manera tal que se termine abonando en los meses de verano, cuando baja la demanda por las altas temperaturas.

De esta manera, se diferiría hasta un 25% de las facturas de mayo a julio para pagarlas en noviembre y diciembre. A cambio, las distribuidoras serán compensadas con una tasa de interés, cuyo número está en discusión.

Por otro lado, Aranguren anunció que la semana próxima saldrá publicada en el Boletín Oficial la resolución que establece el pago de la deuda que tiene el estado con las productoras por el Plan Gas, que asciende a 1.500 millones de dólares. Se abonará en 30 cuotas mensuales, a partir de enero de 2019.