Con una fuerte presencia en las redes sociales, el líder del Partido de los Trabajadores (PT) de Brasil, Luis Inacio Lula Da Silva, se mantiene en el centro de la campaña presidencial hacia los comicios del 7 de octubre, donde según los sondeos tiene el 30 % de intención de voto. Aun estando preso, acaba de lanzar un spot publicitario para iniciar su actividad pre-electoral.

El lanzamiento del video fue a través de la cuenta de Youtube del partido liderado por el ex presidente y bajo el slogan “Brasil feliz de nuevo”, comenzó a ser difundido en redes sociales.

La comunicación digital es virtualmente su única forma de presencia en la opinión pública, teniendo en cuenta que la cadena Globo y las demás empresas mediáticas ocultan toda información suya, excepto la persecución judicial.

En el video se aborda la crisis económica y política que afronta Brasil y reflexiona en su comienzo: “Mi querido Brasil, mirá lo que te hicieron y la tristeza tendrá fin”.

Asimismo, el spot apunta a la población que está defraudada con la promesa de crecimiento y empleo del gobierno del presidente Michel Temer, quien llegó al poder con la destitución de Dilma Rousseff, del PT, en 2016.

Coincidiendo con el cumplimiento de los 100 días de prisión, el campamento "Lula Libre", instalado en las afueras de la cárcel de Curitiba, realizó una vigilia especial para reivindicar su inocencia.

Además del spot, el PT  inició todo un mes de actividades políticas y culturales que empezaron ayer con el lema "¡100 días de Resistencia, venga a sumarse!". En la ocasión, como lo han venido haciendo desde el 7 de abril, gritaron al unísono el "¡Buenas noches, Lula!" con el que despiden cada día a su líder.

Durante la tarde de hoy se llevará a cabo una manifestación mayor como tributo al fallecido líder mundial de la lucha contra el racismo y ex presidente de Sudáfrica Nelson Mandela, quien cumpliría 100 años.

El PT ha cerrado filas en torno a la candidatura de Lula, que será oficializada el 17 de agosto, cuando vence el plazo legal. Dicha postulación continúa en suspenso hasta que la justicia electoral se expida sobre su situación. Esto es, que le permitan, o no, ser candidato.

Argumentos legales por la candidatura

Como primer punto, la Constitución Federal de Brasil establece la filiación partidista como condición de elegibilidad y, por consiguiente, veda las candidaturas sueltas. El Partido de los Trabajadores es titular del derecho constitucional a la participación en los comicios presidenciales, por ser un partido político que está legalmente constituido y en pleno funcionamiento.

En ese sentido, el PT puede seleccionar a sus autoridades y registrar, si así lo determina, al ex presidente Lula como candidato. Ese acontecimiento sucederá el viernes 17 del mes próximo.

Además, esa fuerza política es un sujeto de participación electoral, y como partido, posee la regla básica del Derecho Electoral, en respeto al principio de igualdad de condiciones en la disputa. Es decir, el partido debe tener los mismos derechos de los demás competidores, para que efectivamente pueda participar en los actos de pre-campaña de las elecciones presidenciales.

En el último mes se les aseguró a los demás partidos participación en los debates en radio, TV e internet. Sin embargo, en incumplimiento de los principios constitucionales antes mencionados, estos derechos están siendo negados al PT en nombre de su pre-candidato.

Al Partido de los Trabajadores se le ha negado participación, difusión y demás herramientas incorporadas en la ley electoral. Los acontecimientos del 8 de julio, fecha en la que el ex presidente obtuvo su libertad pero inmediatamente le fue negada por otros tribunales y por la Policía del régimen de facto, se revela una coyuntura de ofensas reiteradas a principios constitucionales.

A medida que pasan los días, la prisión de Lula recibe manifestaciones de rechazo por parte de juristas de renombre dentro y fuera del país, así como de entidades y personalidades políticas internacionales, que consideran al líder brasileño como un prisionero político y denuncian, con pruebas, las tantas ilegalidades derivadas de un proceso penal que muchos definen como “farsa judicial”.

Para su condición de candidato, Lula tiene a su favor la cláusula pétrea de la presunción de inocencia, aún a ser evaluada en el STF (Superior Tribunal Federal). Pero precisamente porque la condena al ex presidente no ha agotado todas las instancias judiciales y se presume inocente, sus abogados defensores exigen un trato equitativo al de las demás fuerzas y candidatos políticos.