Por un margen mucho menor del que anticipaban las encuestas y con una participación cercana al 65%, el candidato de la derecha logró retener el poder y convertirse en nuevo presidente de Paraguay, sucediendo a Horacio Cartes y manteniendo así una hegemonía histórica del Partido Colorado en el vecino país del norte.

Abdo Benítez es hijo de quien fuera el secretario privado del dictador Alfredo Stroessner que estuvo en el poder en Paraguay por 35 años hasta 1989. Un empresario católico conservador que en más de una oportunidad ha tenido manifestaciones reivindicatorias del proceso dictatorial que atravesó el pueblo de Paraguay.

Durante la campaña, Benítez ha sido duramente criticado por sus lazos con la última dictadura. Sin embargo, venció en la interna partidaria por la candidatura a la poderosa corriente del actual mandatario Horacio Cartes. En el día de ayer, triunfó también en las elecciones generales y se convirtió en el próximo presidente.

“Me he ganado credenciales democráticas en mi trayectoria política", declaró Abdo Benítez al rechazar durante la jornada de ayer las críticas que recibió por su cercanía a la familia Stroessner. En la última semana circularon las fotos cuando en 2006 asistió a los funerales del ex dictador, que se exilió en Brasilia.

Con 46 años, "Marito", como se le conoce popularmente, se formó en los Estados Unidos. Su programa propone mantener la política económica del saliente presidente Horacio Cartes, basada en las exportaciones agrícolas, fundamentalmente ligadas a la soja. Aseguró que atraerá inversiones y que continuará con el crecimiento sostenido que es de “un ritmo de 4% anual desde hace más de una década”.

Desde el búnker de Alegre, aseguraban que iban a esperar para pronunciarse y criticaron las encuestas a boca de urna por distorsionar las expectativas del electorado.

Alegre había prometido gobernar para los que menos tienen, salud pública gratuita y bajar la tarifa de la energía eléctrica para aprovechar la producción de las gigantes hidroeléctricas Itaipú y Yacyretá, que Paraguay comparte con Brasil y Argentina. En los últimos días llamó a los paraguayos a votar en favor de la democracia y no "del pasado" al que acusa a Abdo de representar.

Paraguay, gobernada predominantemente por el conservadurismo del Partido Colorado, (salvo la presidencia del destituido Fernando Lugo) tiene un porcentaje de pobreza cercano al 30% en una sociedad profundamente dividida entre ricos y pobres.

Informe: Agustín Mozzoni