Conmovidos homenajes en España y el refuerzo de las medidas de vigilancia en los principales países occidentales fueron dos de los hechos del “día después” al ataque terrorista en Barcelona, perpetrado el jueves con una furgoneta que atropelló a quienes caminaban en el paseo de las Ramblas. El último informe oficial indica que murieron 14 personas, entre ellos dos argentinas, y que además hay un centenar de heridos.

Las compatriotas fallecidas son Silvina Alejandra Pereyra, quien vivía en Barcelona desde hace diez años, y Carmen Lopardo, una ciudadana italiana de 80 años pero que desde hace más de sesenta residía en nuestro país. También se informó que al menos dos argentinos están entre los heridos, pero ya se encuentran fuera de peligro.

El atentado fue reivindicado por la organización extremista denominada Estado Islámico, también conocida como ISIS (por sus siglas en inglés). Medios periodísticos españoles informaron que a pocas horas del ataque, cinco presuntos terroristas fueron abatidos en Cambrils, una localidad de Cataluña, cuando trataban de replicar la matanza de Barcelona.

Tan solo 24 horas después del ataque, las Ramblas comenzaron a recuperar la normalidad. Al mediodía del viernes, miles de personas se reunieron en la plaza principal de Barcelona para realizar un minuto de silencio como forma de tributo a las víctimas del atentado. 

Entre los asistentes estuvieron el rey de España, Felipe VI; el presidente del gobierno, Mariano Rajoy; el presidente de la comunidad autónoma de Cataluña, Carles Puigdemont; y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau.

Los últimos avances de la investigación señalan que la célula terrorista aparentemente estaba preparando un ataque mucho más grande en Barcelona.

La Policía catalana informó que la banda había estado recogiendo latas de gas butano en una casa en el pequeño pueblo de Alcanar, a 120 kilómetros al sur de Barcelona. Sin embargo, algo salió mal y el edificio explotó el miércoles por la noche, matando a dos personas e hiriendo a 16, pero sin llegar a consumar un ataque que hubiera sido mucho más mortífero.

"La explosión en Alcanar significó que ya no tenían el material necesario para planear ataques a gran escala en Barcelona", dijo un alto jefe de la fuerza de seguridad. Probablemente estaban tratando de llevar a cabo un tipo diferente de atentado, indicó la fuente oficial.

Los detenidos hasta el momento son cuatro hombres, tres ciudadanos marroquíes y uno español, cuyas edades son 21, 27, 28 y 34 años, respectivamente. Además, continúa la búsqueda de Younes Abouyaaqoub, de 22 años, presunto conductor de la camioneta que logró escapar. Las autoridades sospechan que podría haber huido en una Renault Kangoo cruzando la frontera hacia Francia.

Gobierno argentino

“La Argentina reafirma una vez más su enérgica condena al terrorismo en todas sus manifestaciones y reitera la necesidad trabajar por la paz, la seguridad y el respeto a los derechos humanos", expresó una declaración formal emitida ayer por el ministerio de Relaciones Exteriores de nuestro país.

Además, el comunicado de la cancillería informó que representantes oficiales habían manifestado de forma personal sus condolencias a las familias de las dos mujeres argentinas fallecidas en el atentando en las Ramblas de Barcelona.