Ante la posible derrota de su aliado y colega estadounidense, Donald Trump, el presidente Jair Bolsonaro afirmó ayer que "el mundo está mirando a Brasil" y convocó a la unidad nacional para defender los recursos naturales del país, principal socio comercial de la Argentina.

El mandatario, flanqueado por el expresidente y senador Fernando Collor de Mello (1990-1992), aseguró que "nadie en el mundo tiene lo que nosotros tenemos", aunque no aclaró si se refería a la tradicional cita sobre la biodiversidad y riqueza de la selva amazónica.

"El mundo está mirándonos, nosotros tenemos lo que ellos no tienen. Y para que podamos decir que lo nuestro es nuestro es necesaria la unión de los 210 millones de brasileños", dijo Bolsonaro.

El discurso de Bolsonaro fue interpretado como un mensaje contra Biden, como lo había hecho el miércoles. "Él (Biden) dos veces interfirió hablando de la Amazonía. ¿Ustedes quieren eso para Brasil?", le había dicho a sus seguidores, a los que les confío que seguía esperanzado con la victoria de Trump.

Biden, durante los debates presidenciales, fustigó las políticas ambientales de Bolsonaro.

"Seguimos la política internacional y somos una patria bendecida. Nadie tiene lo que tenemos, pero debemos concientizar a cada uno de los ciudadanos brasileños. Vivimos en un país con 90% de cristianos. El mandato presidencial estará en las manos de Dios", dijo ayer Bolsonaro en un discurso pronunciado en Piranhas, interior de Alagoas, durante la inauguración de una obra de abastecimiento de agua.

Afirmó que su gobierno "rescató los valores de dios, patria y familia" poniendo en primer lugar los colores verde y amarillo de la bandera nacional en lugar del "color rojo" en referencia al opositor Partido de los Trabajadores.

Según la prensa brasileña, los militares que integran el primer escalón del gobierno en el Palacio del Planalto consideran que sin gana el candidato demócrata Bolsonaro deberá alejarse del grupo más ideológico y dar una señal al multilateralismo, sobre todo teniendo en cuenta que China es desde 2009 el principal socio comercial de Brasil.

En el acto, la sorpresa política fue la presencia del senador Collor de Mello, quien renunció a la presidencia en 1992 en medio de un juicio político para destituirlo por un escándalo de corrupción.

Senador por el derechista partido PROS, del estado de Alagoas, Collor se acercó a Bolsonaro y compartió el escenario.

"Collor es un hombre que también lucha por los intereses de Brasil", afirmó Bolsonaro, cuyo hijo mayor, Flávio Bolsonaro, también senador, fue denunciado penalmente por lavado de dinero y peculado por desviar durante casi una década dinero con empleados ñoquis de su oficina parlamentaria e la Asamblea Legislativa de Río de Janeiro, hasta 2018.

Fuente: agencia Télam