Federico Prior, referente de la Federación de Inquilinos Nacional en Neuquén, planteó que la expropiación de viviendas que se votó en Alemania “es una medida importante que garantiza que el Estado se involucre en el precio del alquiler” y en el “acceso a la vivienda”, aunque aseguró que “estamos muy lejos de algo así”, en la medida de que “no logramos ni siquiera controlar y que se cumpla” la Ley de Alquileres aprobada en julio del año pasado.

“Estamos muy lejos de algo así, tenemos una nueva Ley de Alquileres que reformó el Código Civil y Comercial de la Nación, que está vigente desde julio del 2020 y que fija reglas para el contrato de alquiler que hacía casi 40 años que no estaba reglamentado en la Argentina”, indicó a Prior.

Y agregó que “fue un comienzo con varios puntos a favor, pero no se controla, no se aplica, las inmobiliarias y propietarios siguen haciendo lo que quieren”.

Para el referente de inquilinos “si no logramos ni siquiera controlar y que se cumpla una ley es muy difícil ir a una medida de fondo como se planteó en Alemania porque el precio del alquiler lo siguen manejando las inmobiliarias”.

El domingo 26 de septiembre, en un referéndum no vinculante, los ciudadanos de Berlín votaron por un 56% la expropiación de 240 mil viviendas para que el Estado regule el mercado inmobiliario, en medio de una crisis derivada de la especulación y concentración del mercado donde más del 80% de la población tiene que alquilar.

Prior sostuvo que “es una medida importante que garantiza que el Estado se involucre en el precio del alquiler por un lado, porque el mismo Estado pone las viviendas en alquiler, y por otro lado garantiza el acceso a la vivienda”.

El especialista sostuvo que “en Neuquén se ven edificios vacíos, hay propietarios con gran concentración de viviendas, con más de 50 viviendas” lo que genera que “el mercado especule con los precios” y aclaró que “esas viviendas que están ociosas, al no haber alguna sanción o multa para garantizar que se alquilen, y al haber menos oferta, elevan los precios y van especulando con esos movimientos”.

En este sentido, indicó que “los planes de vivienda que el Estado promueve, como el Procrear, son medidas positivas pero no definen la cuestión de lo urgente de los inquilinos del acceso a la vivienda” y el hecho de que no haya “una intervención real del Estado en la matriz, el mercado inmobiliario es el que fija el precio del alquiler”.

En Argentina, luego de la Ley de Alquileres, la regulación indica que hay un ajuste anual que se realiza en base a un índice del Banco Central que promedia inflación y salarios, y los contratos pasaron de 2 a 3 años de duración.

“Antes en el contrato te hacían el aumento semestral y a ojo del mercado inmobiliario, querían estar por encima de la inflación”, explicó Prior y agregó que “es positivo en el sentido de que es un dato objetivo, no lo fija la inmobiliaria si no a partir del índice, lo que pasa es que al estar tan alta la inflación el índice da un número elevado, pero interviene el Estado”.

Uno de los problemas más importantes, de acuerdo al referente de Inquilinos, es que “el precio del alquiler no está regulado, cuando inicias un contrato no hay un tope, no hay un criterio y cuando vas a renovar tampoco; pasamos de aumentos de un 60%, 70% o 100% de aumento cuando van a renovar, ahí hacen lo que quieren”.

El avance de Juntos por el Cambio

Desde principio de año, referentes de Juntos por el Cambio insisten con la necesidad de derogar la Ley de Alquileres y la última en plantear esta idea fue María Eugenia Vidal, candidata a diputada nacional por la ciudad de Buenos Aires, quien afirmó que se “lo están pidiendo el mercado inmobiliario, propietarios e inquilinos para poder contratar mejor entre ellos”.

Prior indicó que este planteo “nos parece vergonzoso porque ellos fueron parte de avanzar con esa ley y ahora proponen modificaciones que no se saben cuáles son, porque no las dicen”.

“La Ley de Alquileres se debatió durante mucho tiempo e incluso dos puntos de la ley con los que nosotros no estábamos de acuerdo fueron una propuesta de Cambiemos y de esa manera se negoció en el Congreso y tuvo media sanción en Diputados”, aclaró.

Y agregó que “ellos dicen que la ley perjudicó a los inquilinos, en realidad bajó la rentabilidad para las inmobiliarias; el índice” de ajuste anual ahora “da alto por la situación macroeconómica que tenemos, pero ellos ven que hay un poco más de intervención del Estado y no lo quieren, quieren seguir con las reglas del mercado inmobiliario”.