Roberto “Tito” Bacman, analista y consultor político, sostuvo que el triunfo electoral de Gustavo Valdés en Corrientes “no tiene ninguna influencia nacional y no es una derrota del presidente”, además de aclarar que fue un “triunfo radical” en un momento en que “el radicalismo quiere recuperar protagonismo” dentro de Juntos por el Cambio.

“Es una elección particular, Corrientes lee lo que ocurre en Corrientes, la realidad de Corrientes gobernada por el radicalismo como heredero del Pacto Autonomista Federal que ya gobernó por muchos años sin que el peronismo pueda acercarse”, explicó Bacman a .

Y aseguró que “lo que ocurrió en Misiones, en Salta y ahora en Corrientes muestra que este es un año donde no hay cambios estructurales con respecto al 2019, con lo cual, tienden a ganar los oficialismos, salvo algunas dudas que hay en ciertas provincias como Santa Fe o Entre Ríos”.

El segundo punto que “favorece a los oficialismos” y que resaltó el director del Centro de Estudios de Opinión Pública (CEOP) es que hubo un “índice alto de no concurrencia al comicio”, porque votó el 65% del padrón en Misiones, el 65% en Corrientes y el 72% en Salta; números que están “debajo del promedio” de los de “una elección PASO de medio término, que puede andar cerca del 82%”.

Para Bacman, este falta de participación “probablemente tenga que ver con el cansancio de la gente con la política, pero puede estar influyendo también el tema de la pandemia, la preocupación de la gente de ir a votar”.

El domingo pasado el gobernador de Corrientes, de la alianza gobernante Eco + Vamos Corrientes, Gustavo Valdés, consiguió su reelección con el 76,7% de los votos en las elecciones que también eligieron legisladores provinciales e intendentes y concejales en 57 municipios.

Sobre el intento de algunos medios y periodistas de adjudicarle la derrota a Alberto Fernández, el analista indicó que “no es una derrota del presidente, que no se la carguen” y sostuvo que “los que fueron a festejar fueron los radicales, no los del Pro, fue un triunfo radical, en un momento donde el radicalismo está golpeando fuerte la puerta de la coalición juntos por el Cambio para ser más protagonista de esa coalición”,

Y en ese sentido, indicó que “incluso quizás hasta peleando el candidato a presidente en 2023, con Cornejo, Morales, y ahora Manes que está haciendo una campaña bastante buena en la provincia de Buenos Aires”.

Los números de las PASO y los libertarios

Bacman se refirió a las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias del 12 de septiembre, donde lo que se pone en juego “la situación nacional”, y aclaró que no estamos “pasando los mejores momentos de la Argentina, con la economía que está rebotando pero todavía falta, un país que sufre por su fragilidad económica las consecuencias de la pandemia, la gente que está pasando momentos difíciles y espera que baje la inflación y espera poder llegar tranquilos a fin de mes y el tema de la inseguridad, que está empezando a preocupar bastante”.

En cuanto a los números, aseguró que “en provincia de Buenos Aires sigue ganando el Frente de Todos”, con un porcentaje que va a estar arriba de los 40 puntos, aunque consideró que “el tema es la diferencia, cuánto va a proyectar”, porque “no es lo mismo ganar por 41% que por 43%”; en un marco donde hay “muchos indecisos todavía”.

Para la ciudad de Buenos Aires, indicó que triunfa “cómodo Juntos por el Cambio, que proyecta no menos de un 50%” aunque “la sorpresa es que de esos 43% que tiene en la base, sin proyectar indecisos, está teniendo 30% María Eugenia Vidal y 14 puntos los está obteniendo Ricardo López Murphy; que muestra que hay un Juntos por el Cambio crítico a la conducción férrea de todos estos años por parte del Pro”.

Bacman resaltó también “un fenómeno tanto en Capital como en provincia de Buenos Aires que se llama el voto libertario; están obteniendo alrededor de 7 a 9 puntos, están como generando nuevas expectativas, están muy bien con los jóvenes y en la clase baja”.

El sociólogo le adjudicó este volumen de votos al hecho de que “hay un crecimiento en el mundo entero de estas opciones de derecha” y caracterizó a la opción como “de extrema derecha liberal económica”.

“No es un liberalismo populista, es un liberalismo económico, dice cosas duras”, explicó y mencionó que Javier Milei que “declaró hace poco que si fuese elegido presidente su primera medida sería incendiar el Banco Central”.

El consultor aclaró que “tiene más que ver con esa derecha durísima liberal norteamericana que se llama el Tea Party, que es el sector de los republicanos más de derecha liberal que creen que el Estado no debe participar para nada en nada y eso es lo que hoy la gente empieza a ver como aspectos positivos” y agregó que “es una forma distinta de pensar, de hablar, de presentarse; son economistas que vienen de ser mediáticos, tienen otra forma de contactarse con la gente, no pertenecen a la estructura política, no vienen de partidos políticos tradicionales y esto hace que los jóvenes lo miren con interés”.

“Se están mostrando como una nueva opción, que es este nuevo liberalismo que quiere que el Estado no tenga participación alguna y que sea el libre mercado el que maneje la economía, que en países como el nuestro es muy peligroso”, concluyó.