Luego de la polémica desatada por las fechas de finalización del Gasoducto Cordillerano, varios funcionarios manifestaron su preocupación por la situación que afecta a miles de familias que deberán atravesar otro invierno sin gas. La senadora Silvina García Larraburu, del Frente para la Victoria, consideró que “se trata de una obra clave para la subsistencia de la región, donde el frío, el viento y la nieve imperan la mayor parte del año. Esta situación sumada a los aumentos indiscriminados de los servicios, perjudica directamente a los ciudadanos de la región”.

“El Gobierno Nacional demuestra un desinterés permanente por el interior profundo, no puede tomarse con tanta liviandad la suspensión de una obra tan importante y necesaria para nuestra población", señaló. 

Resaltó a su vez que ya hay un 95 por ciento de la obra ejecutada y "resta un pequeño esfuerzo para culminarla y favorecer a una gran cantidad de vecinos que esperan ansiosos desde hace mucho tiempo". 

Agregó que “son casi 8000 las conexiones pendientes en la zona andina de Río Negro, es inconcebible que el gasoducto Cordillerano no sea prioritario para el ministro de Energía, Juan José Aranguren. Hablamos de familias que deben atravesar el invierno sin siquiera contar con expectativas o esperanza de la anhelada finalización”.

Hizo hincapié en que este problema atraviesa a todos los sectores que no tienen acceso al gas natural: “Desde aquellos edificios u obras que quedan inconclusos, hasta quienes deben salir en busca de leña para subsistir y dependen de la suerte para encontrarla seca y sin humedad”.

García Larraburu presentó en abril de este año un pedido de informes donde solicitó al Poder Ejecutivo nacional que se expida sobre el estado de situación, avance, ejecución y detalles de la obra Gasoducto Cordillerano Patagónico. Además insistió que se determine el plazo estimado para su conclusión.