El primer mandatario de Río Negro, Alberto Weretilneck, se mostró partidario de que una eventual reforma la Constitución provincial establezca que el gobernador y el vice deben durar cinco años en sus cargos, sin tener posibilidad de reelección.

Aclaró que cualquier modificación del texto constitucional debe hacerse “con el consenso por lo menos de la mayoría de las fuerzas políticas”, y que “las reformas se hacen en años no electorales” y con el referido consenso, porque “si no, por imposición, no es una reforma de la Constitución”.

Entrevistado por el diario “Río Negro” sobre la posibilidad de una modificación de la carta magna provincial, Weretilneck dijo que el tema “se está hablando en el gobierno, en distintas áreas según su incumbencia, pero no es una decisión que se haya tomado”, y aseguró además que “no tenemos una fecha autoimpuesta” para iniciar el proceso de reforma.

En caso de que los procedimientos se pusieran en marcha, la declaración de la necesidad de reformar la Constitución debe ser aprobada por la Legislatura provincial con el voto de dos tercios de sus miembros, y después convocarse la elección de la convención constituyente.

El actual mandatario de Río Negro consideró que “lo primero es ver es si hay consenso político en el resto de las fuerzas. Tomamos en primer lugar todas las palabras y definiciones que dio el senador Pichetto cuando planteó que hay aspectos de la Constitución que deberían ser reformados”.

Mencionó temas como “la reforma del Código Procesal Penal, por lo que significa el rol del Ministerio Público”, y también cambios en el Consejo de la Magistratura, y “al margen de lo judicial”, dijo, “analizar la reelección del gobernador por un lado, las reelecciones de los legisladores provinciales, y la discusión de las reelecciones indefinidas de los intendentes”.

Acerca de los mandatos del gobernador y vice, Weretilneck puntualizó: “A mí el modelo que más me gusta es el uruguayo. Cinco años y sin reelección”.

Reiteró de todos modos que “la discusión tiene que ser en un año no electoral, para no generar tensiones innecesarias, y fundamentalmente para que ningún sector de la oposición piense que estamos buscando algún tipo de ventaja política”.