El bloque de diputados del Movimiento Popular Neuquino anotó ayer una frustración legislativa, al no poder emitir despacho para que sea tratado en el recinto el “Acuerdo Nación-Provincia”, que restituye en cuotas los fondos retenidos por la Anses y representa un aumento del 15% de los montos coparticipables.

El proyecto debía pasar con éxito las comisiones de Asuntos Constitucionales y Hacienda y Presupuesto. En el turno matinal, la primera le permitió al oficialismo reunir los 8 votos necesarios para emitir despacho. Desde allí y con suma rapidez, fue puesto en el orden del día de la comisión siguiente, que sesionó por la tarde. Pero en esta última no logró reunir el mínimo y por tal razón no ingresará a la sesión de esta semana.

En lo que se refiere estrictamente a los números, la diferencia debe buscarse en el interior del bloque de la UCR, que con el voto positivo del diputado Alejandro Vidal permitió al oficialismo sortear la comisión A de la mañana; y con la ausencia del diputado Oscar Smoljan se lo impidió por la tarde en la comisión B.

Más complicada es la explicación política, ya que en rigor se pusieron en evaluación dos proyectos; uno del oficialismo, que aceptaba sin condicionamientos el acuerdo, y otro impulsado por el diputado Guillermo Carnaghi del FPV y los bloques de NCN, Pro y Une-FPN, que pretendía incorporar la obligación de coparticipar los nuevos ingresos a los municipios, en los mismos términos en los que fue aprobado por unanimidad en la Legislatura de Río Negro hace pocos días atrás.

La iniciativa chocó con la intransigencia del MPN, que llegó a las comisiones sin aceptar cambios ni sugerencias.

El representante del Pro, Damián Canuto, expuso que su bloque pretendía “participar de una alternativa responsable” y describió con detalle que “se consideran expresamente coparticipables los adelantos financieros”.

Raúl Godoy, del bloque del FIT-PTS, fue el primero en negarse a votar cualquiera de las dos versiones y consideró que no era parte “de ese consenso, esta es una coparticipación de miseria, en la que quedan migajas de los recursos”.

En una polémica intervención, el diputado oficialista Claudio Domínguez aseguró que “es un pacto entre el FPV y el Pro, porque (Horacio) Quiroga está celosa (SIC) de la relación que tiene Omar Gutiérrez con (Mauricio) Macri”.

Indicó que “Quiroga es más kirchnerista que nunca, quiere poner palos en la rueda y no dejar gobernar. Cambiar la coparticipación a través de una ley es de muy mal gusto. Tiene un odio terrible porque cada vez que se levanta a la mañana y cree que va a ir a Rioja y Roca (la sede de la Gobernación), en realidad va a la avenida Argentina y Roca (la ubicación de la municipalidad de Neuquén).

Su participación le valió la reprobación generalizada de sus pares, incluido su compañero de bancada Luis Sapag, quien se excusó diciendo que “el MPN es un partido grande y heterogéneo donde hay diversidad de opiniones y yo no coincido con mi compañero”.

Carnaghi rechazó los cargos y aseguró que su proyecto “ha sido hablado con varios bloques en busca de un consenso mayor”.

Le pidió “voluntad” al oficialismo y “respeto” a sus diputados. Explicó que “el acuerdo consiste en poner una posición consensuada para mejorar los recursos de los municipios, que se puede incluir si hay voluntad en el bloque de la mayoría”.

También desde el Pro, la diputada Carolina Rambeaud expuso que “la provincia de Río Negro acaba de votar por unanimidad el acuerdo en los mismos términos en los que nosotros proponemos aquí. Me parece una estupidez lo que acaba de decir el diputado” Claudio Domínguez, a quien le recordó que vive en “una provincia deficitaria, que es la contracara de la situación de la municipalidad de Neuquén”.

La fuerte discusión de la mañana dejó heridas para el turno tarde y la falta de flexibilidad del oficialismo lo privó de tratar el acuerdo en el recinto.

Según algunos trascendidos, el propio vicegobernador estaría evaluando la idea de convocar a una sesión extraordinaria la semana próxima, a fin de tratar sólo esta cuestión y darle aprobación antes que termine el mes de junio.

Pero si las posiciones vistas hasta hoy no cambian, incluida la del MPN, será difícil que logre su objetivo.