Los municipios comenzaron a sentir los efectos pre y post coronavirus. Los problemas preexistentes en las finanzas provinciales se agravaron con las consecuencias que generan sobre el funcionamiento de la economía las medidas de contención de la pandemia del coronavirus. En ese contexto, los recursos de la masa coparticipable, integrada por regalías y fondos impositivos federales y provinciales, muestran una tendencia a la baja desde el inicio del año, con una caída entre enero y marzo del 8% y entre febrero y marzo del 7,7%. 

De acuerdo a información disponible en el ministerio de Economía de la provincia, en los últimos tres meses, los 29 municipios que reciben fondos de la ley de coparticipación (2148) perdieron más de 78 millones de pesos en los envíos netos de la provincia.

La cifra girada en marzo, con los descuentos efectuados por anticipos, fue por un monto de 894.334.834 pesos, pero la correspondiente a febrero había sido de 968.783.371 pesos y la de enero de 972.406.346 pesos. Como se mencionó anteriormente, los ingresos cayeron entre una punta y otra el 8%,  mientras que  la inflación del trimestre fue de 7,6%.

De las tres fuentes de alimentación de la coparticipación municipal, los recursos federales son los que más se desplomaron entre febrero y marzo  (17,2%), al pasar de 239.697.017 pesos  a 198.264.934, pero lo hicieron más aún (29,4%) si se compara enero (281.154.492 millones) con marzo. 

La parte que corresponde a impuestos provinciales disminuyó 9,2% entre febrero y marzo, al pasar de 586.229.460 pesos a 532.039.229, pero entre enero (586.229.460 pesos) y marzo la pérdida fue del 14%. 

Por último, la masa de coparticipación que corresponde a regalías es la menos herida de las tres, al menos en este tramo del año. Se redujo apenas 0,6% entre febrero y marzo, al pasar de 470.021.769 pesos a 467.031.500, pero creció 2% si se compara marzo con respecto a enero, cuando había para repartir 457.793.874 pesos.

Hay una distribución adicional a los municipios del impuesto Inmobiliario que refleja aún más la caída. Es el reparto que se hace de acuerdo a lo estipulado por la ley 2.495, un parche a la ley de coparticipación, que reparte un adicional de ese tributo. En este caso, la pérdida entre enero y marzo fue del 75,8%, al pasar de un fondo a distribuir de 45.159.956 pesos en enero a otro de 10.917.944 en marzo, y una caída menor, pero igualmente significativa, del 38,9%, entre febrero (17.888.942 pesos) y el mes pasado.

Hay otra distribución adicional, la que corresponde al canon extraordinario petrolero (ley 2.615) que tuvo variación positiva. Entre enero y marzo creció un 2%, al pasar de 26.333.550 pesos a 27.335.550, y entre febrero (25.694.221 pesos) y marzo el aumento fue mayor, del 6,38%

Como informó el pasado 17, la recaudación de recursos propios y los envíos de coparticipación federal de impuestos representaron ingresos inferiores para Neuquén en 865 millones de pesos en marzo con respecto al mes anterior. Unos 590 millones de pesos de esa disminución corresponden a los recursos que recaudan la provincia y 275 millones a los envíos regulares de Nación, según datos de Rentas y del ministerio de Economía de Nación. 

Las reducciones que se observan en los ingresos provinciales se trasladan en proporción a los municipios a través del mecanismo de coparticipación de impuestos, una ley que hace tiempo está desactualizada y que el gobernador Omar Gutiérrez prometió revisar cuando pronunció el discurso del 1 de marzo, en ocasión a abrir un nuevo período de sesiones ordinarias. 

Del conjunto de recursos que ingresan a la provincia por regalías, impuestos propios y nacionales, el 15% se distribuye entre los municipios de primera, segunda y tercera categoría, según un coeficiente para cada uno que surge de aplicar parámetros que guardan relación a la población, al costo salarial por habitante y a los esfuerzos de recaudación de cada municipio.