Leandro García es presidente de Nuevo Encuentro en Río Negro, partido que integra el frente electoral que lleva como candidato a gobernador a Martín Soria (del Frente para la Victoria) y como vice a Magdalena Odarda. Consideró que el actual gobernador "es el candidato que mejor representa el modelo de Macri" y se mostró confiado de salir primeros en la elección del 7 de abril.

En diálogo con , el candidato a diputado por el FpV expresó que el actual gobernador, Alberto Weretilneck, "quiere vulnerar la Constitución" proponiendo una nueva candidatura y que "sería un mamarracho que la Corte Suprema avale esto".

Además, opinó que el escenario electoral de Río Negro es "parecido" al que hubo en Neuquén de cara al 10 de marzo pasado, pero resaltó  que "en Río Negro las chances de que Weretilneck gane son mucho menores que las del Movimiento Popular Neuquino".

-¿Cuáles son los principales proyectos que piensa impulsar como legislador?

-Las ideas que tenemos tienen que ver con fortalecer al Estado en un rol de planificador estratégico en materia de desarrollo. Uno de los grandes problemas que tiene la provincia es que tiene un potencial muy importante en términos de recursos pero está muy descuidado. Tenemos un esquema de distribución de recursos muy injusto. Queremos impulsar un Estado que realmente piense cómo poner todo el potencial de Río Negro para generar recursos, empleo y para hacer un Estado eficiente que pueda prestar servicios y garantizarle a aquellos vecinos y vecinas que no le han llegado el gas y el agua potable, que tengan acceso a los servicios. Para hacer eso y no caer en el endeudamiento, como está haciendo la actual gestión, hay que crear un esquema de crecimiento y de diversificar la matriz productiva. Se requieren transformaciones estructurales. Lo único que tenemos es un Plan Castello que está diseñado a pedido de Macri, con un endeudamiento que le sirvió a Macri para contener el dólar con una política exterior pésima, que endeudó a la Provincia en dólares y hoy tenemos una deuda del triple de hace dos años y que no se ve en obras que transformen esa matriz productiva y que hagan proyectar que dentro de un par de años un mejor acceso a los servicios, un esquema productivo que garantice mejores recursos para la población,  o más trabajo, que es otra de las materias pendientes en la provincia. Queremos generar los mecanismos para que el Estado provincial esté en todas las localidades de la Provincia y llegue a cada rincón para estar al lado de la gente atendiendo esas demandas que muchas veces se interpretan desde Viedma pero que no tienen que ver con los problemas reales de las localidades.

-En ese esquema, ¿qué lugar le dan a la producción hidrocarburífera, teniendo en cuenta que el área de Vaca Muerta también llega hasta Río Negro, y es el proyecto que el gobierno vende como "la niña bonita" de su gestión?

-Hay que historizar un poco eso porque el gobierno que la vende como la niña bonita es el gobierno que cuando eran diputados y senadores se opusieron a la reestatización de YPF. Además hay que pensar que una cosa es el fracking o los métodos no convencionales de explotación de hidrocarburos en un esquema donde eso está al servicio de un proyecto de autoabastecimiento energético para industrializar el país y para evitar que la importación de petróleo y de gas impacte en el precio del dólar, y el precio del dólar impacte en el poder adquisitivo de los trabajadores. Una cosa es ese esquema y otra el esquema que estamos viviendo ahora donde se explota de manera no convencional sin cuidado por el medio ambiente, sin ningún tipo de control, y al servicio de un modelo donde las únicas que se han enriquecidos son las empresas que generan, distribuyen y transportan al energía.  En Río Negro en particular, esto es una opinión personal pero lo dijo también Martín Soria el otro día, hay que proteger la producción. Si se obtienen recursos petrolíferos y gasíferos hay que hacerlo teniendo en cuenta el cuidado de la comunidad. Estamos a favor de discutir el tema del petróleo y del fracking pero en el marco de otro proyecto político. No sirve de nada que los vecinos hagan el esfuerzo de bancarse una torre de hidrofractura a diez cuadras de la casa cuando eso se lo llevan las empresas trasnacionales y no queda un peso para el país, no se traduce ni en empleo ni en beneficios para la comunidad.

-¿Cómo transitaron en Nuevo Encuentro el proceso de unidad para acordar un frente electoral más amplio, con el FpV?

-En 2016 el objetivo de Nuevo Encuentro a nivel nacional y en la provincia fue defender ese legado de políticas que habían representado los gobiernos de Néstor (Kirchner) y Cristina (Fernández). Vivimos una campaña feroz de ataque y estigmatización al kirchnerismo como proyecto político, a Cristina como referente política, y ese año nos dedicamos básicamente a acompañar en la calle a aquellos sectores que se veían perjudicados por la política de Macri. En 2017 el objetivo cambió porque la idea era armar un frente electoral más amplio, que trascendía un poco las fronteras de nuestra propia identidad política, y que tenía que ver con ponerle un límite a las políticas de Macri. Con ese criterio nos incorporamos al FpV, con el Frente Grande y Kolina. En 2018 trabajamos en el marco del FPV la misma idea y en 2019 nos tocó integrar la lista. A mí me toca personalmente integrar la lista de diputados y también a un compañero de Río Colorado, Mariano Quiroga, que está tercero en el circuito de Valle Medio. Estamos muy contentos de estar los dos en la lista, orgullosos de nuestra identidad política pero en el marco de un frente que integra otros sectores que pone por delante ganarle a Macri y a Weretilneck, que nosotros entendemos que han aplicado el mismo modelo en la provincia. Siempre está en tensión la identidad. Si uno se queda solamente con los que piensan como uno es más difícil tener potencia electoral entonces siempre tratamos de vincular las dos cosas. Me parece que se armo una muy buena fórmula entre Martín y (Magdalena) Odarda, que Odarda había ido en 2017 por otro lado pero entendió lo mismo que nosotros y se sumó, como también el socialismo, que había ido aparte en el 2017.

-¿Son optimistas en cuanto a los resultados del 7 de abril?

-Somos optimista de que va  a ser una buena elección y que vamos a poder desde Río Negro empezar a recuperar un poquito el país. No pudo ser el otro día en Neuquén con la victoria del Movimiento Popular Neuquino (MPN) pero bueno, es muy importante lo de Río Negro como una señal para el resto del país y también para recuperar municipios que han sido devastados a partir de las políticas de Alberto Weretilneck, que en realidad nosotros lo entendemos como una continuidad de los 28 años de radicalismo, de las peores políticas clientelares, de usar las necesidades de la gente para hacer política sin transformaciones estructurales, sin planes de desarrollo, y que dejan una provincia sumamente endeudada.

-¿Weretilneck es el candidato de Macri?

-No directamente. Creo que es quien por una cuestión ideológica o de falta de condiciones propias terminó siendo el mejor alumno. Fue uno de los gobernadores que aplaudió cada una de las políticas a pesar de que eso no se traduce ni para las finanzas públicas rionegrinas ni para los rionegrinos. Siempre digo que cuando el dólar se fue de 17 a 40 lo único que dijo fue que eso iba a beneficiar el turismo en Río Negro, cuando sabíamos que eso se traducía en una destrucción del poder adquisitivo de trabajadores, de jubilados, y que perjudicaba al conjunto de  la población. Como esas hay muchas: una carta sugiriendo que se apruebe al acuerdo con los fondos buitre, reemplazar recursos que antes venían de Nación  por deuda externa. Creemos que hay una serie de cuestiones que, por incapacidad, sumisión o falta de convicciones terminó aprobando y no se tradujeron en bienestar para los rionegrinos. Si bien no es el candidato de Macri, porque Macri también tiene su fuerza propia también en Río Negro, creemos que obviamente es el candidato que mejor representa el modelo de Macri y que tiene más chances electorales de ganar. Sabemos que Macri tiene una alta imagen negativa en Río Negro, asique es como el plan b.

-¿Piensa que, como pasó en Neuquén, se intenta mostrar a las elecciones en la provincia como un ensayo de lo que podría pasar en octubre?

-Yo tampoco creo que el MPN sea de Macri .Es un espacio que tiene una historia y una identidad propia. Obviamente que Macri se siente mucho más cómodo con el MPN que con lo que podría ser un gobierno de (Ramón) Rioseco. Creo que son similares los escenarios, creo que en Río Negro las chances de que Weretilneck gane son mucho menores que las del MPN, sobre todo teniendo en cuenta que todavía no sabemos si va a poder ser candidato o no y además teniendo en cuenta que quien va a competir por Cambiemos es del radicalismo y gran parte de los votos que tiene Weretilneck en la provincia vienen de esa extracción política y ahí tiene una pérdida del electorado. También creo que el frente que se armó en el FpV, el conjunto de sectores que lo integran,  tiene mucha potencia electoral, no sé si diría más que Rioseco y (Darío) Martínez, pero tiene un recorrido largo que viene de 2017. En cambio en Neuquén en 2017 Rioseco y Martínez fueron separados y no es tan fácil cerrar heridas en un año y medio. Creo que tenemos muchas más chances de ganar y estoy optimista en ese sentido.

-Hace dos días Weretilneck dijo que el FpV "busca proscribirlo" y que "buscan un escenario electoral judicializado", ¿es así?

-No, en realidad lo que se busca es que se respete la constitución, que es muy clara y dice que nadie puede integrar la fórmula ni de gobernador ni como vice más de dos veces seguidas. Entonces el que quiere vulnerar la constitución es él. Nosotros no queremos judicializar. Yo creo que nosotros podemos ganarle a Weretilneck en la elección de 2019. No hay  miedo a competir. Tenemos claro quién es, qué piensa la gente, lo mal que la están pasando, y que él ha acompañado cada una de las políticas de Macri que empeoraron las condiciones de vida de la mayoría. Sí creemos que vale la pena hacer el esfuerzo para que se respete la constitución. En Río Negro no podemos naturalizar que el gobernador, que hace un año decía que él no podía ser candidato, ahora no sólo sea candidato sino que encuentre en el Superior Tribunal de Justicia la complicidad para avanzar en ese desastre.

-¿Cómo cree que va a fallar la Corte Suprema de Justicia?

-Con el nivel de degradación que hay del Poder Judicial a nivel nacional, no lo tengo claro. Sí creo que es muy clara la constitución y que sería un mamarracho que la Corte Suprema avale esto. Si se  lo terminan permitiendo habla de una degradación institucional que no encuentra comparación en otros lugares del mundo. Todavía no me entra la cabeza que el STJ haya revocado un fallo del Tribunal Electoral que es el que tiene mayor competencia en el tema. Es lamentable que Weretilneck ahora se quiera esconder atrás de los argumentos de la judicialización de la elección.

-De todas maneras, cree que Soria le puede ganar.

-Yo creo que sí, obviamente. Creo que en 2017 se hizo una gran elección. El FpV de 2019, respecto del de  2017, se amplió. Ha incorporado a Odarda, al socialismo y además en estos dos años la gente vive peor consecuencia de las políticas nacionales y porque no hay ninguna política provincial que contenga ese malestar. Obviamente va a ser una elección difícil porque ellos tienen todos los medios a su favor, la plata que gastan en pauta es monstruosa, y tienen el aparato del Estado que no han tenido escrúpulos en usarlo en 2015 y que vemos en cada lugar. Uno va a los barrios y encuentra que se les dio cheques, se les dio chapas. Uno no cuestiona que le den a la gente lo que necesita, sí que se lo den  en el marco de una campaña electoral y con los recursos del conjunto de la población, y no en el marco de un proyecto de contención social. Va a ser difícil pero creemos que las condiciones están dadas para ganar, sin dudas.