Entrevistas
01/12/2019

Alicia Montoya

“En Bolivia están violados los derechos humanos, laborales, económicos”

“En Bolivia están violados los derechos humanos, laborales, económicos”  | VA CON FIRMA. Un plus sobre la información.

La coordinadora de la cooperativa El Álamo, que participó de la delegación que viajó junto a Juan Grabois y otros referentes argentinos al país vecino para elaborar un registro de la situación, sostuvo que hay garantías constitucionales para “los que son blancos y los que tienen plata”.

Diego Colao

[email protected]

Alicia Montoya, coordinadora de los equipos técnicos de la cooperativa de reciclaje El Álamo de Buenos Aires integró la delegación que viajó el jueves a Bolivia junto a dirigentes como Juan Grabois, Daniel Catalano de ATE y el ex juez Luis Arias para realizar un informe de la situación que están viviendo a la que calificó como de “extrema gravedad”.

“Hay personas asesinadas, detenidos que son personas con problemas que nunca podrían haber participado en ninguna actividad de sedición o terrorismo, hay violaciones, hay mutilaciones, hay cadáveres que no se entregan, hay personas desaparecidas”, describió Montoya en este diálogo con Va Con Firma y destacó que asumieron un compromiso para que las personas con quienes se reunieron “tengan restitución de derechos humanos, laborales, económicos, sanitarios que están todos violados”.

Para la referente social, solo hay garantías constitucionales “para algunos; los que son blancos y los que tienen plata” y destacó que “es muy evidente el nivel de racismo” que hay en Bolivia.

Montoya relativizó el maltrato que sufrieron por parte de las autoridades cuando llegaron al aeropuerto el jueves pasado, y la amenaza del ministro de gobierno, Arturo Murillo, cuando les dijo que “Anden con cuidado, los estamos vigilando” porque es algo “insignificante” frente al “terrible dolor y a las extremas violaciones a los derechos humanos que ocurren todos los días”.

-¿Cómo está la situación luego de las agresiones que sufrieron cuando llegaron? 

-Eso ya no representa nada en particular después de lo que hemos escuchado de las víctimas en el Alto. Cualquier provocación contra nosotros es cada vez más insignificante frente al terrible dolor y a las extremas violaciones a los derechos humanos que ocurren todos los días.

-¿Cómo fueron las reuniones y con quienes se reunieron?

-Nos reunimos con las víctimas de la represión en el Alto, estuvimos reunidos en la iglesia San Francisco de Asís y vinieron decenas de personas a traer sus papeles, a contarnos que sucedió, como los dejaron abandonados. Y es una situación de extrema gravedad.

-¿Con qué se encontraron?

-Hay personas asesinadas, detenidos que son personas con problemas que nunca podrían haber participado en ninguna actividad de sedición o terrorismo, hay violaciones, hay mutilaciones, hay cadáveres que no se entregan, hay personas desaparecidas, hay personas que todavía no son atendidas porque tienen muchísimo temor porque hay una persecución muy grande. Es muy doloroso. Todo lo que se ha escuchado es muy doloroso.

-¿Hay algún tipo de garantías constitucionales en este momento en Bolivia?

-De ninguna manera. Sí las hay para algunos. Los que son blancos y los que tienen plata. Es muy evidente esto, hay un nivel de racismo que no podemos pensar que se pueda desarrollar porque nuestra mirada es una mirada de solidaridad de que todos deberíamos estar incluidos, que no deberían existir este tipo de xenofobias; pero son tan evidentes que no se pueden pasar por alto.

Imaginen que les están cobrando gastos a los familiares de personas fallecidas y estamos hablando de personas muy pobres. Es difícil de describir el dolor, lo que pasa acá es de mucha gravedad y estamos muy conmovidos. Lo que escuchamos es muy grave y si nos quedáramos 5 días más, lo  seguiríamos escuchando. Hemos asumido un compromiso de hacer los imposible para que por lo menos las personas con las que tuvimos contacto tengan restitución de derechos humanos, laborales, económicos, sanitarios que están todos violados, absolutamente todos.

-¿Hay un cerco mediático?

-Por supuesto que lo hay, por eso hay tanto miedo, porque la gente ya se dio cuenta que la cotidianeidad de lo que pasa no está en ningún lugar. Nosotros algo sabemos de esa situación que genera un cerco mediático donde parece que vivimos todos en Disneylandia. Y cuanta confusión lleva eso a la población, a que se configure una idea, un estado de cosas que nada tiene que ver con la realidad. También es claro que es parte de las nuevas metodologías que se están usando en América Latina para dividir a la población y generar grandes grietas. Esta misión tiene eso, la grandeza de que abogados, profesionales han hecho un esfuerzo porque cada uno se ha pagado su pasaje y sus gastos, para poder venir a colaborar con nuestros hermanos agredidos.

-¿Cómo ve la posibilidad de salida a esta situación?

-En principio está bastante complicado. Está claro que el proceso electoral se ha extendido y que las fuerzas armadas y una persona se ha autoproclamado presidenta después de presionar a las autoridades electas de distintas maneras para que renuncien. Acá hay un montón de gente que te cuenta que los principales dirigentes han tenido un nivel de hostigamiento terrible, entonces es muy difícil de pensar que esto vaya a ser fácil. Confiamos en que el pueblo boliviano pueda decirle no a esta barbarie.     

29/07/2016

Sitios Sugeridos


Va con firma
| 2016 | Todos los derechos reservados

Director: Héctor Mauriño  |  

Neuquén, Argentina |Propiedad Intelectual: En trámite

[email protected]