La periodista Mariana Moyano editó recientemente “Trolls S A, la industria del odio en internet”. Opina que hoy los grandes poderes comunicacionales no están más en los medios sino en las empresas como Google, Facebook y Youtube. Sostiene que la lógica de los trolls es la agresión y obturar cualquier discusión. Sobre la pérdida de efecto de los trolls en las PASO dijo que la gente no votó con ira y entonces no tiene espacio el odio en las redes.

Mariana Moyano es periodista y trabajo en Pagina 12 y en la TV y la radio pública. Su participación en el emblemático programa 6, 7, 8 le cerró la posibilidad de trabajar en medios, desde el 2015 bajo control del gobierno de Maurico Macri. Dedicada plenamente a la docencia, comenzó a escribir paralelamente “Trolls S A”. 

“Inicialmente la idea era investigar el funcionamiento de las cuevas de trolls del Pro, pero luego me di cuenta que había algo más para investigar. ¿Por qué en este mundo es posible ese nivel de agresión?, ¿por qué es constitutivo del trolls ese nivel de odio, ira  y agresión?”, explicó.

En diálogo con el programa Viento Sur que se emite por 18 radios de Río Negro y Neuquén, la especialista sostuvo que las redes están hechas para obturar cualquier tipo de discusión. "El del troll es un mecanismo, el del linchamiento", afirmó.

"El objetivo es conocer cómo funcionan las redes para ser menos vulnerable y así participar del debate y esquivar el mecanismo de la agresión y la no escucha. Mi hipótesis es que troll somos todos, porque una persona puede tener una cuenta diseñada para trollear paga. Ese sería el clásico. Pero después hay millones de seres humanos que agreden, hostigan y no permiten la discusión", asegura.

Moyano explica que la red es un lugar propicio para la agresión entonces nos exige pensar un poco más lo que se escribe escapando de la lógica de la inmediatez surgida de la agresión. 

Si bien el troleo en las redes toma parte de la agresión y el reduccionismo de los temas de los grandes medios, hoy no necesariamente es exclusivamente así. “Hoy los grandes poderes comunicacionales no están más en los medios sino en las empresas como Google, Facebook y Youtube que son las más poderosos hoy y Clarín termina siendo un chichipío. Sumado a que uno no anda con el diario al lado todo el día pero si un dispositivo con todas las redes sociales pegado a vos”, afirma.

La periodista analiza el por qué parece no haber sido suficiente esta vez el trabajo de los trolls, de acuerdo a los resultados de las PASO. "Después de la PASO surgió la idea de que 'al final le ganamos con un libro y un Clío' y no es tan así. Hay que pensar todo junto, las redes, la calle y la política".

"El 11 de agosto la sociedad demostró que no es por la vía de la ira sino de las elecciones. Decidió que es por el lado institucional y cuando la gente dijo no es por el lado de la ira, no tienen lugar los trolls”, opina.

“Además, cuando les estalla la política económica, por más que tengan la mejor comunicación política no sirve. La micro segmentación no sirve si la leche cuesta 100 pesos".

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