La ONG Ciudadanos Libres por la Calidad Institucional denunció hoy en la Oficina Anticorrupción (OA) a la Presidencia de la Nación por la difusión de un spot de propaganda oficial durante la televisación de los partidos de fútbol de Primera División del fin de semana.
Entre otras cosas, se ve a dos supuestos trabajadores con los cascos del Consorcio Nuevo Sarmiento (CNS), una Unión Transitoria de Empresas (UTE) liderada por la brasileña Odebrecht (50%), la argentina Iecsa, la italiana Ghella, y la española Comsa.
CNS es la empresa que está detrás del proyecto de soterramiento del tren de pasajeros del Ferrocarril Sarmiento, en la ciudad de Buenos Aires y el Conurbano bonaerense.
Odebrecht es la principal empresa de construcción e ingeniería de Brasil, que reconoció haber obtenido contratos por 12.000 millones de dólares en Brasil y otros 11 países, pagando coimas por más de 1.000 millones de dólares.
En sus declaraciones judiciales en Brasil y Estados Unidos, Odebrecht informó de pagos por coimas por 35 millones de dólares en la Argentina.
Durante una videoconferencia con dos fiscales argentinos, el encargado de hacer esos pagos, el financista Leonardo Meirelles, mencionó como receptor de las transferencias bancarias a Gustavo Arribas, jefe de la Agencia Federal de Inteligencia, y amigo íntimo del presidente Mauricio Macri.
Hasta el 2007 el dueño de Iecsa era Franco Macri, padre de Mauricio, pero al momento de la constitución del consorcio CNS su propietario era Angelo Calcaterra, primo del presidente.
La primera gran obra pública del gobierno nacional de Macri le fue otorgada a Iecsa, la que históricamente fuera la mayor empresa de la familia; del mismo modo que la primera gran obra pública de Macri como jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, el entubamiento del arroyo Maldonado, también le fue adjudicada a Iecsa.
En el año 2007 Calcaterra ingresó como socio y accionista de la empresa italiana Ghella, luego de haber adquirido dos empresas líderes en sus sectores, Iecsa y Creaurban, conformándose así el Grupo ODS (Obras, Desarrollos y Servicios).

Semanas atrás Calcaterra le habría vendido Iecsa en alrededor de 60 millones de dólares a Marcelo Mindlin, uno de los empresarios favoritos del presidente Macri.
Dueño de la filial argentina de Petrobras (también investigada en Brasil por supuestos hechos de corrupción), y de Pampa, el grupo que produce el 10% de la electricidad y el 8% del gas del total del país, Mindlin es además propietario de Edenor, de Transener, la mayor transportadora eléctrica del país, y de TGS, una de las dos más grandes distribuidoras de gas.
Mindlin es uno de los empresarios que más se beneficiaron con los tarifazos dispuestos por el presidente Macri durante 2016 y 2017. A través de allegados, Mindlin dejó trascender a algunos medios de comunicación que fue el propio presidente Macri quien le pidió que comprara la empresa familiar. Una mano lava la otra y las dos lavan la cara.

En los primeros seis meses de 2016, a través de una reasignación de recursos, el presidente Macri decidió otorgarle por decreto a la empresa Iecsa, cuando todavía era propiedad de su primo Calcaterra, 45 mil millones de pesos para las obras del soterramiento del Sarmiento.

El presupuesto estimado de la obra es de 3 mil millones de dólares (48 mil millones de pesos), con fecha de finalización aproximada en 2022.

En esa misma época, la empresa Iecsa recibió otro crédito de 2.500 millones de pesos para la construcción de un gasoducto en Córdoba, mientras que el Banco de la Provincia de Buenos Aires, de María Eugenia Vidal, le otorgó un préstamo por 25 millones de pesos en septiembre de 2016.

Pero los millones otorgados por el presidente Macri parecen más destinados a ayudar a la empresa del grupo familiar que a la realización de las obras. Según el propio balance de la compañía, Calcaterra se comprometió a “aportar el dinero faltante para cubrir el saldo de capital negativo de 1.212 millones de pesos, principalmente por saldos a pagar entre empresas del mismo grupo”.

Los ingresos del grupo por obras en el primer semestre de 2016 totalizaron 615 millones de pesos, en tanto obtuvo 311 millones por concesiones y 193 millones por ingresos financieros, superando los 1.100 millones en el primer semestre del año anterior.

Calcaterra recibió de una sola vez, por decreto de su primo, el presidente Macri, cinco veces el total del dinero contratado con la empresa Austral Construcciones, de Lázaro Báez, durante los doce años de gobierno kirchnerista, para obras públicas, tanto de la Nación, como de la provincia de Santa Cruz.

Durante su campaña electoral el presidente Macri se había comprometido a mantener el Fútbol Para Todos (FPT), "pero sin política", en referencia a la publicidad de su gestión que hacía durante el programa el gobierno kirchnerista.

Ahora el gobierno nacional dispuso que a partir de junio cesará el Fútbol Para Todos y los argentinos tendrán que pagar entre 15 y 20 dólares (entre 240 y 320 pesos) para poder ver los partidos por televisión.

"Lo estamos haciendo juntos", decía el presidente Macri en el final del spot publicitario. Sin aclarar a quiénes se refería.