Más de 1.800 personas que integran organizaciones y organismos de derechos humanos de todo el país acordaron recientemente avanzar “con una agenda de trabajo para el nuevo tiempo”, sobre la base de considerar que a partir de diciembre habrá otro gobierno en la Nación, según dijo Matilde Daroqui, referente de la militancia en el Alto Valle que participó de una reunión realizada en Buenos Aires.

Los asuntos fueron analizados en el marco del III Encuentro Federal de Derechos Humanos, organizado por Abuelas de Plaza de Mayo junto con el nieto recuperado y actual diputado nacional Horacio Pietragalla, que tuvo lugar el sábado en el Espacio de la Memoria situado en la ex ESMA. 

A diferencia de los últimos años donde las deliberaciones eran un lugar de resistencia a las políticas negacionistas del gobierno de Mauricio Macri, en esta oportunidad se trató de mirar hacia adelante y de incluir demandas vinculadas a la identidad que trascienden la búsqueda de los nietos. Los puntos centrales de la agenda serán presentados a las autoridades nacionales que asuman el 10 de diciembre.

En representación de la provincia de Neuquén, participaron del Encuentro la secretaria de Derechos Humanos, Alicia Comelli; Maura Peralta, de la Red por la Identidad (organismo que ayuda a recuperar su identidad a personas apropiadas durante la dictadura); y Matilde Daroqui, integrante del nodo Cipolletti de dicha red, e integrante de la Asamblea por los Derechos Humanos (APDH) de Neuquén.

En diálogo con , Daroqui señaló que "la particularidad de este encuentro, que se viene realizando desde hace tres años con los nodos que integran la Red de Identidad, fue que tuvo un carácter federal y se extendió a más gente, a más problemáticas, no solamente a tratar de recuperar a aquellos que están secuestrados con otra identidad, es decir, apropiados". 

"El tono y el sentido del encuentro que se hizo en la ex ESMA, donde las Abuelas trabajan toda la parte del archivo, fue ir armando la agenda de trabajo para el nuevo tiempo. Ya se considera muy fuertemente ganar el 27 de octubre otra fuerza que no es la que nos está gobernando, la cual tiene un sentido de eliminación de las cuestiones en derechos humanos", apuntó.

Señaló que "en este encuentro estuvieron presentes Sergio Maldonado, familiares de los tripulantes del ARA San Juan, familiares de la masacre de Etcheverría, de los chicos asesinados en San Miguel del Monte, personas violentadas por la Policía, la Gendarmería y la Prefectura, el tema de la trata de personas", enumeró la reconocida militante.

Luego explicó que "ampliar el espectro tiene que ver con la violencia institucional y con grupos sociales violentados como son los pueblos originarios", y añadió que "también estuvieron presentes afrodescendientes e incluso se trabajó en una comisión de salud mental".

Todos los casos "tienen que ver con una situación relacionada a la política que está llevando adelante el gobierno de Macri", por la cual quienes reclaman en las calles "están siendo perseguidos" debido a que las autoridades “están judicializando la protesta", advirtió.

"Los encuentros anteriores tenían el sentido de ir contra la desolación. De decir 'están avanzando, están ganando terreno, están liquidando los derechos, los avances en cuanto al juzgamiento de algunas causas (de delitos de lesa humanidad), están ganando en esto de que los represores puedan pedir sus medidas condicionales o estén en sus casas’. Pero el tenor de este año fue distinto. Fue decir 'esta gente hasta acá llegó, tenemos que tomar nosotros nuevamente la posta'", señaló la integrante de Red por la Identidad y de la APDH de Neuquén.

Del encuentro participaron referentes de los derechos humanos como Estela de Carlotto (Abuelas de Plaza de Mayo), Taty Almeida (Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora), el premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel; Lita Boitano (integrante de Familiares de Detenidos y Desaparecidos por Razones Políticas); y también el brasileño Luiz Eduardo Greenhalgh, fundador del PT (Partido de los Trabajadores) de su país y abogado de Lula Da Silva.

Las conclusiones del trabajo en distintas comisiones estarán disponibles la semana que viene. "Cuando estén, con estos puntos nos vamos a sentar con Alberto Fernández", indicó Daroqui, porque "todos estos temas son de alta preocupación y hay que buscarles la vuelta. O bien volver a esquemas anteriores de trabajo, o realizar una mirada retrospectiva, evaluativa, que nos permita algo así como barajar y dar de nuevo, y cómo lo hacemos en este presente", finalizó.

Participantes de Neuquén y del Alto Valle en el Encuentro Federal, junto al diputado Horacio Pietragalla Corti.

Nuevas búsquedas de identidad

El III Encuentro Federal de Derechos Humanos trabajó durante todo el sábado divididos en once comisiones que abordaban distintos ejes: Juicios de Lesa Humanidad, Violencia institucional: FF.AA-Fuerzas de Seguridad-Represión de la protesta social; Lawfare; Pueblos Originarios y el derecho a la Tierra; Migrantes y comunidad Afrodescendiente; Diversidades; Trabajo y DDHH; Salud mental y DDHH; y Comunicación y DDHH.

Matilde Daroqui destacó que en esta oportunidad se produjo una "ampliación de la noción de identidad", porque "hay otros casos que empezaron a surgir hace ya bastante tiempo de gente adoptada en una línea de ilegalidad. En ese camino hay muchos jueces, médicos, asistentes sociales, que tenían armado una red de 'sustitución'. Ellos se autodenominan como 'hijos sustituidos'”, reveló.

"Hay otro grupo que se llama ‘Justicia Argentina’, que trabaja con personas nacidas en Argentina que no han sido documentadas. Han encontrado gente de hasta 65 años indocumentada, gente que ha trabajado en el campo y nunca recibió asistencia de ningún tipo", detalló, y agregó que en el encuentro “se contaba el caso de un grupo aborigen ubicado al norte de Formosa, donde ninguno tenía documento. Cuando ellos reclamaban al Estado argentino tener documento, les dijeron que era preferible que se inscribieran en la República de Paraguay porque allá las leyes son más fáciles que acá", relató. 

También indicó que “después estaba el grupo de aquellos que son adoptados y quieren encontrar a su familia para saber de dónde vienen, había personas que habían sido cambiadas al momento de nacer, una mujer que buscaba a su hija porque le dijeron que había nacido muerta", dijo la participante de las deliberaciones realizadas en la ex ESMA, y remarcó que "todo esto se despertó a raíz de la búsqueda de Abuelas de Plaza de Mayo".

Dificultades para la recuperación de los nietos

"Hace bastante que no hay ningún avance con respecto a nuevos encuentros con nietos. El último fue el número 130, y está la esperanza de que haya muchos más pero por el momento hay un parate muy fuerte", señaló la militante. Denunció que "han entorpecido las causas, las líneas de investigación". 

"La metodología que utiliza el gobierno nacional es ‘secar’ los programas (de políticas públicas). ¿Cómo se secan los programas? No destinándole ni un centavo. Los programas antes tenían un grupo de gente que trabajaba. Ahora si queda una persona es mucho. Cuando vos investigás líneas de posibles personas que han sido apropiadas tenés que trabajar con mucho material en papel, analizar actas de nacimiento, analizar los lugares donde han nacido, las líneas que tienen que ver con los médicos que han asistido partos y podrían haber encubierto nacimientos. Hay todo un camino de hormiga que se va a haciendo, que muchas veces está en manos de gente que cada vez es menos. Por eso es tan difícil", detalló.

Daroqui resaltó sin embargo que durante los años de gobierno de Cambiemos "mucha gente se quedó en esos lugares custodiando, protegiendo lo avanzado, los archivos, los materiales".  Como ejemplo, contó que "Estela, una compañera de Abuelas, que estaba en el grupo de fiscales donde se analizaban todos los expedientes de militares involucrados en los centros de detención, cuando ella fue apartada y le pidieron que dejara su trabajo, todo ese material fue puesto en un container, vaya uno a saber dónde".