El presidente Alberto Fernández dijo ayer que "Argentina resolvió una deuda imposible en la mayor crisis económica que se recuerde y en el medio de una pandemia" y destacó que "ahora está despejado el horizonte".

Fernández afirmó que "esta fue una deuda cuantiosa que abrumó a todos" y le pidió a los empresarios que "se comprometan a poner al país de pie", ya que tienen un "mejor escenario" para proyectar sus negocios.

Al hablar durante la presentación de una nueva etapa del plan de viviendas Procrear (ver nota aparte), el presidente dijo que el acuerdo de la deuda "para Argentina significan 37.700 millones de dólares menos" a pagar "en los próximos 10 años", y si se considera "lo que Argentina se había comprometido a pagar en 5 años, ese alivio es 42.500 millones de dólares".

Guzmán

El ministro de Economía, Martín Guzmán, aseguró que el acuerdo de reestructuración de la deuda alcanzado por la Argentina y tres grupos de acreedores otorga una plataforma de previsibilidad y orden financiero "para poder despegar" cuando la pandemia haya finalizado, al tiempo que solicitó "tener cautela" a pesar de la buena noticia.

"Persistimos en el contexto de negociaciones que fueron duras porque todas las partes defendían los intereses a ultranza", indicó y añadió: "Nosotros defendíamos los intereses de los argentinos".

Guzmán ofreció ayer a última hora de la tarde una conferencia de prensa para brindar más detalles del acuerdo con los acreedores y recordó que "el proceso de reestructuración sigue abierto" hasta el 24 de agosto, fecha en la que se espera "una partipacion muy alta" de los acreedores menores.