El abogado Marcelo Parrilli sostuvo, sobre el apartamiento del juez federal de Lomas de Zamora  Federico Villena de la investigación por el entramado del espionaje ilegal durante el gobierno de Mauricio Macri, que el magistrado “tenía un problema grave para intervenir en la causa”, y consideró que con esta decisión la causa “va a entrar en un largo minué procesal “que va a beneficiar a los imputados.

“Lamentablemente todo esto en lo que redunda es en un perjuicio para la investigación porque ahora van a venir los planteos de nulidad de los llamados a indagatoria, de los secuestros, de los allanamientos; en definitiva, se les ha hecho un beneficio a las personas imputadas de haber cometido presuntos delitos que son muy graves”, manifestó Parrilli a .

El abogado remarcó que “el nuevo juez deberá empezar de nuevo” con la investigación y explicó que “los actos procesales más importantes seguramente van a ser anulados”.

A pesar de que señaló que “no siempre una nulidad ocasiona que la prueba se pierda” ya que “se puede reconstruir”, a partir de ahora, la investigación “va a entrar en un largo minué procesal que, por supuesto, va a beneficiar a los imputados”.

“Probablemente los que están detenidos sean excarcelados y los que no están detenidos sean eximidos de prisión, de manera que desde afuera la tentación de prolongar el proceso y de seguir dilatándolo es todavía mayor”, indicó.

En la jornada de ayer, el juez Roberto Agustín Lemos Arias, de la Cámara Federal de La Plata, aceptó las recusaciones planteadas por los abogados defensores de ex agentes de la Agencia Federal de Inteligencia detenidos y decidió apartar de la causa que investiga espionaje ilegal durante el gobierno de Mauricio Macri al juez federal de Lomas de Zamora, Federico Villena.

Consideró en su fallo, que Villena carece de la “imparcialidad necesaria” para continuar en la investigación y el expediente pasó al juez Pablo Auge, del Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional 2 de Lomas de Zamora.

Parrilli sostuvo que “Villena tenía un problema grave para intervenir como juez en esta investigación porque muchos de los delitos que estaba investigando habían sido cometidos en causas que tramitaban en su juzgado, y específicamente el caso del Instituto Patria, donde Villena terminó dándole cobertura legal a las personas que fueron oportunamente denunciadas”.

“Cuando se hace la denuncia por la presencia de efectivos de inteligencia en las proximidades del Instituto Patria, el juez de Martínez de Giorgi consulta al juzgado de Villena y el secretario termina informándole que esas personas estaban haciendo tareas de inteligencia por un presunto atentado; una cosa disparatada pero que les dio cobertura legal en torno a su presencia en ese lugar”, relató el abogado.

Precisó que lo que “llama la atención es que ninguna de las víctimas que se presentaron en el proceso, fundamentalmente los dirigentes del kirchnerismo, no lo hayan recusado a Villena porque es evidente que no podía ser el juez de esta causa”.

Por estos motivos indicó que “lo más probable es que Villena a partir de la incompetencia termine siendo también imputado en la causa”.

Un sello propio

Marcelo Parrilli, quien fue diputado de la Ciudad de Buenos Aires durante el “primer gran episodio que tuvo Macri, que fue el de las escuchas” cuando era jefe de gobierno en la que estuvo involucrado el espía Ciro James, definió que “en el macrismo el espionaje ha sido casi un sello propio” y planteó que “por encima de todos los que están imputados en la causa está Macri”.

Para el abogado, hay que investigar lo ocurrido durante “el período presidencial” de Cambiemos cuando “asistimos a lo que se llamó la mesa chica judicial, que tiene personajes distintos de estos que están vinculados a las causas de las escuchas, pero que evidentemente se valían de los mismos mecanismos para presionar jueces”. Y nombró a Mauricio Macri, quien “presidía la mesa judicial”, al ex ministro de Justicia Germán Garavano, y al actual fiscal general de la ciudad de Buenos Aires, Juan Bautista Mahiques “que fue el encargado de hacer toda la ingeniería macrista dentro del Poder Judicial de la Nación, específicamente de la justicia federal”.