Faltando muy poco para que, este viernes, venza el plazo para la aceptación o no de la propuesta para pagar la deuda en dólares emitida bajo legislación extranjera, tres importantes grupos de acreedores rechazaron ayer la propuesta. Al mismo tiempo, el gobierno de Alberto Fernández recibió el apoyo de gobernadores, sindicalistas y empresarios, así como del primer ministro de Italia, Giuseppe Conte.

La jornada comenzó con la publicación de una columna del ministro de Economía, Martín Guzmán, en el diario británico Financial Times, el más influyente en el mundo de las finanzas a nivel internacional. El integrante del gabinete argentino aclaró allí que el pedido a los tenedores de bonos, implícito en la oferta oficial, era “ganar menos” pero nunca “perder” dinero.

Explicó que un ajuste para pagar más "no solo sería desastroso en términos económicos, sino también inaceptable política y moralmente y, en última instancia, insostenible". Además, “no está claro de qué manera la pandemia afectará las proyecciones a mediano y largo plazo, pero hemos asumido que el crecimiento estará en línea con la trayectoria histórica y hemos utilizado estimaciones realistas del crecimiento de las exportaciones", explicó Guzmán en su artículo.

Horas después, se conoció el rechazo de tres grupos de acreedores que representan alrededor del 50% de los comprendidos en el tipo de endeudamiento al que se refiere propuesta oficial. Se trata del Grupo Ad Hoc de Tenedores de Bonos, el Comité de Acreedores de Argentina, y el Grupo Ad Hoc de Tenedores de Bonos de Cambio de Argentina.

Esos sectores de los negocios financieros mundiales dijeron que “rechazaban” la oferta de nuestro país “entre otras razones porque los términos (allí expuestos) requieren que los tenedores de bonos argentinos sufran pérdidas desproporcionadas que no son justificadas ni necesarias”. 

Pero “sin embargo, cada uno de los tres grupos de tenedores de bonos está preparados para discutir constructivamente con Argentina cuando su gobierno esté listo para hacerlo, con el objetivo común de encontrar una solución viable a los desafíos financieros actuales de la República”, manifestaron los acreedores.

El “golpe por golpe” continuó más tarde con un comunicado del ministerio de Economía de nuestro país, que se declaró "decepcionado" por la posición de los tres grupos financistas, y agregó que "mucho puede cambiar en el transcurso de una semana", de cara al plazo que vence este viernes para que los tenedores manifiesten si ingresan al canje de bonos.

La cartera conducida por Guzmán expresó que “tenemos la esperanza de que nuestros acreedores reconozcan que, especialmente a raíz de la crisis de la covid-19, Argentina no puede pagar más. Hemos publicado nuestro análisis de sostenibilidad de la deuda y se encuentra alineado con el del Fondo Monetario Internacional".

Pero la declaración ministerial fue más allá y directamente solicitó una contraoferta: “Si los tenedores de bonos tienen un enfoque diferente que se adecue a esas limitaciones, deberían presentar una propuesta específica”.

“El gobierno argentino permanece dispuesto a escuchar y tratar de encontrar un denominador común. Pero cualquier propuesta debe pasar primero la prueba del sentido común”, expresó el ministerio de Economía.

Gobernadores, sindicalistas, empresarios

Los respaldos que consiguió la administración de Alberto Fernández ante la dura pulseada con los acreedores provino por un lado de los mandatarios de todas las provincias -excepto San Luis-, y por otro de los más importantes dirigentes sindicales y del sector empresario.

En una solicitada firmada por los gobernadores y el jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires, con excepción del sanluiseño Alberto Rodríguez Saá, se destaca la necesidad de "hacer el mayor esfuerzo posible y dar todo el apoyo para que Argentina pueda redefinir sus compromisos de forma sostenible de modo, de poder cumplir con sus obligaciones y evitar la cesación de pagos o default”.

La declaración afirma que “en un contexto mundial adverso y de alta incertidumbre por el impacto de la covid-19, Argentina procura ante la comunidad internacional un plan de pagos sustentable y creíble, hecho con seriedad, en base a la capacidad de pagos del país, tanto en el corto como en el mediano y largo plazo, desterrando cualquier tipo de especulaciones”.

A su vez, el presidente recibió en la residencia de Olivos a representantes sectoriales del capital y el trabajo. Del lado empresario participaron los titulares de la Unión Industrial, Miguel Acevedo; de la Sociedad Rural, Daniel Pelegrina; de la Asociación de Bancos Argentinos, Javier Bolzico; de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, Adelmo Gabbi; de la Cámara de Comercio, Jorge Di Fiori; y de la Cámara de la Construcción, Iván Szczech.

Por la CGT estuvieron presentes Héctor Daer, del gremio de la Sanidad y uno de los co-secretarios generales de la central sindical; el otro co-secretario, Carlos Acuña, del personal de estaciones de servicio; y Gerardo Martínez, de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (Uocra).

También participaron Andrés Rodríguez, de UPCN; Víctor Santa María, del sindicato de trabajadores de edificios; José Luis Lingeri, del gremio de Obras Sanitarias; Armando Cavalieri, de Empleados de Comercio; y Antonio Caló, de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM).

Al agradecerles el apoyo, Fernández dijo que “esta mesa demuestra la vocación de estar juntos”, y explicó que “estamos buscando una solución para siempre, que dure, y que no nos postergue más, que no nos haga retroceder”. Convocó a “tomar las enseñanzas que este tiempo nos ha dado, sobre todo la de tirar para el mismo lado”.

Martín Guzmán, en tanto, subrayó la importancia “de que estemos juntos en este momento delicado” y señaló que el apoyo de empresarios y trabajadores “vale hoy y va a valer en la historia”. Enfatizó que “buscamos una resolución ordenada a una crisis de deuda insostenible”, dijo el titular de Economía.

Desde el sector empresario coincidieron en expresar que “estamos en el mismo barco, somos la misma Argentina, y necesitamos un escenario de previsibilidad, necesitamos el acuerdo para crecer”. Afirmaron también que “tenemos un gobierno que habla de industria y de trabajo, y vamos a acompañar ciegamente al gobierno nacional”.

En la misma sintonía, los referentes de la CGT dijeron que acompañan “la premisa de no someter a la sociedad para sostener la deuda”. 

Primer ministro de Italia

También ayer, el presidente del Consejo de Ministros de Italia, Giuseppe Conte, le expresó a Alberto Fernández el respaldo de su gobierno al proceso que nuestro país lleva adelante para la renegociar la deuda.

En un diálogo por videoconferencia que se extendió por media hora, según se informó en la Casa Rosada, el primer ministro italiano felicitó al jefe del Estado argentino por su temprano abordaje de la cuarentena para controlar el cononavirus, y puso a disposición las experiencias y conocimientos en esta etapa en la que Italia comienza a flexibilizar el aislamiento social.

El gobernante europeo le dijo al argentino que “Italia confía, espera y apoya a la Argentina en su reestructuración de la deuda”, aseguró Conte.

Ambos mandatarios coincidieron en que los dos países, ante la pandemia por la covid-19, podrán “conjugar el cuidado de la salud con la recuperación económica y social”.