El Centro de Economía Política Argentina (CEPA) relevó en su último informe la actuación de diversos países de la región y del mundo en materia económica y verificó que la “receta global” implica que “los Estados ponen recursos para compensar los efectos de la crisis” tanto en materia de paquetes fiscales, incluso a través de la emisión monetaria; como en regulaciones al sector financiero para facilitar créditos y la baja de las tasas de referencia.

El documento revela que países como Argentina, Brasil, México, Estados Unidos, Italia, Francia, Alemania, España, Reino Unido, China, Corea del Sur y Japón comparten como característica común que “los gobiernos improvisan el combate a la pandemia con medidas donde invariablemente el Estado es el último garante”.

Desde CEPA mencionan algunos datos para evaluar la magnitud de la crisis económica como la de calificadoras como Moody´s, que calcula una caída del 0,1% del producto bruto global, inaugurando una recesión mundial provocada por el Coronavirus. 

En América Latina las previsiones son igualmente trágicas, ya que “la CEPAL sostuvo que la crisis será mucho más grave que la recesión de 2008 y prevé una contracción de 1,3%”, mientras que “la pobreza podría subir de 185 millones de personas a 220 millones y el desempleo, trepar 10 puntos”.

Frente a esto, los paquetes fiscales que implementaron los países representan “en gran parte de los países analizados, entre 1 punto y 2 puntos del PBI”, en Argentina del 1%, en Brasil 3,5%, México 0,7%, Reino Unido 2,1%, Francia 2%, Italia 1,4%, España 0,7%, Corea del Sur 0,8%. 

Hay tres excepciones, “donde se registran enormes inyecciones fiscales que ascienden a dos dígitos del producto”, y son Estados Unidos, 2cuyo paquete podría ascender a 10% del producto en caso de aprobarse en el Congreso”,  Alemania, que inyectó un 14,5% y Japón, con casi 20% del producto”.

“Los dos dígitos en cada uno de estos casos también dicen otra cosa: la magnitud de la crisis que provoca el COVID-19 es tan grande, que aquellos que pueden hacer keynesianismo de guerra, lo hacen sin dudarlo”, remarcan los economistas en el informe.

En cuanto a las regulaciones monetario-financieras que dispusieron los países “para facilitar el crecimiento de préstamos a la economía real” en algunos casos “suponen garantías de préstamos con fondos estatales y en otros casos modificaciones regulatorias para incentivar a que el sistema bancario preste más”.

Desde CEPA consignan que en Europa predominan las garantías estatales, que ascienden al 15% del PBI en Reino Unido (330 billones de euros), 13% en Francia (300 billones de euros), 15,07% en España (200 billones de euros) y 5,8% en Alemania. 

En Argentina, se anunció un paquete de 350.000 millones de pesos que significa el 1,3% del producto y “tiene por objetivo el direccionamiento de la liquidez a pymes para la financiación de sueldos a tasa de 24%, siendo 30.000 millones de éstos parte del expandido FOGAR, que es garantía estatal a préstamos para pymes”. 

Brasil negoció un swap con la Reserva Federal de Estados Unidos por cerca de 60 mil millones de dólares, Estados Unidos, anunció una inyección crediticia elevada, de 5,2%, y China una suma similar, por 5,2% del producto.

Como tercer pata de este “intervencionismo estatal”, en el informe mencionan “la baja de tasas de referencia” que “es una característica común de prácticamente todos los casos analizados”. 

Estados Unidos redujo la tasa de la Fed a un rango entre 0 y 0,25%, lo que implica una baja de 150 puntos base; mientras que China redujo su tasa entre 50 y 100 puntos base, el Banco Central Europeo bajó 25 puntos base, y el Reino Unido, 65 puntos base. 

“En el caso argentino, se registra la drástica reducción de 200 puntos base”, indicaron en el informe, debido a que el “país que viene de reportar las tasas de referencia más altas del mundo, en torno al 80% nominal anual”, producto de las políticas del gobierno de Mauricio Macri.

En Brasil y México la baja fue de 50 puntos y Corea del Sur las redujo 50 puntos base.

Comparación en la cantidad de muertes 

El informe presenta en un cuadro la cantidad de muertes registradas cada 100.000 habitantes, comparadas entre dos fechas, el 23 de marzo y el 9 de abril.

Esto permite visualizar la cantidad de contagios existente cuando se realizaron los principales anuncios de políticas económicas tanto en Europa como en Estados Unidos, y también países como Japón; y la evolución de las muertes 17 días más tarde; para analizar la exponencialidad en que se manifiesta el crecimiento en cada país.