Tanto desde la Asociación de Empresarios Nacionales para el Desarrollo (ENAC) como desde la Confederación Argentina de la Empresa (CAME) denunciaron que los bancos del país no están otorgando los créditos blandos a una tasa del 24% que el gobierno estableció a través de una resolución la semana pasada para poder pagar los sueldos de los empleados y evitar que se corte la cadena de pagos en el marco del parate económico de la cuarentena obligatoria.

Leo Bilanski, presidente de ENAC, indicó a que “hay un incumplimiento generalizado por parte de los bancos” y remarcó que “a más de 10 días del anuncio de Matías Kulfas, sólo están entregando créditos a los clientes que ellos consideran VIP”; cuando deberían ser préstamos “para asignar no de forma discrecional sino de manera compulsiva”.

El empresario nacional explicó que es algo que está ocurriendo con “bancos públicos, cooperativos, nacionales, provinciales, privados; de todo tipo” y sostuvo que recibieron más de  150 denuncias de “empresas testigo” que implican un perjuicio para “3.000 trabajadores que hoy no van a cobrar y son familias que se quedan sin sustento”.

“Es un tema de dirección de negocios, de no descapitalizarse, de no perder liquidez y de asignar discrecionalmente créditos solo a las empresas que ellos consideran que están aptas para el repago, es decir al 30% o al 40% de las carteras actuales”, describió y agregó que “no estamos hablando ni siquiera de las pymes informales; esto va a ser un verdadero genocidio pyme si siguen con esta conducta”.

El vocero de CAME, Pedro Cascales, confirmó a que la medida “se está cumpliendo solamente para aquellos que tienen créditos preaprobados y que pagan los sueldos en esos bancos”.

“No hay créditos, tampoco están los 17 mil pesos o el salario mínimo vital y móvil de hasta 25 trabajadores y el 75% de los salarios para empresas de 60 trabajadores; hoy no hay nada”, remarcó.

La CAME planteó en un comunicado que “la falta de colaboración de los bancos está matando a los bancos” y remarcó que “el contexto actual es el peor momento para pensar en la rentabilidad y menos para especular en salvarse solos u obtener ganancias de la tragedia”.

El ministro de Desarrollo productivo, Matías Kulfas, también se quejó de la situación y  dijo que “las pymes necesitan que no se corte la cadena de pagos”.

Bilanski explicó que en el día de ayer tuvieron “una videoconferencia con el ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación y no están conformes con el desempeño de los bancos” porque “no están a la altura de lo que le demanda el Estado, ni las regulaciones ni las garantías que puso el Estado para que ellos puedan prestar”.

“Es absolutamente una desgracia lo que están provocando en el aparato productivo nacional porque el empresario está hace un tercio de mes sin trabajar, con problemas en la cadena de pagos y ocupándose ahora de que los trabajadores estén en su casa y tengan un ingreso; y no pueden salir a buscar otra fuente de subsistencia”, completó.

De acuerdo al presidente de ENAC el 60% de las pymes están cerradas por la pandemia y son las que necesitan los créditos, y por esta actitud “dentro de una semana los empleados no van a cobrar y muchos no van a cobrar tampoco”.

Rechazo de cheques

En el comunicado, CAME expresó su preocupación porque “hoy la mayoría de las pymes no tiene ni liquidez ni ingresos para pagar sus obligaciones cotidianas” y solo el sector del comercio “pierde ventas por 10.500 millones  de pesos en cada día de cuarentena”.

“Mientras eso ocurre, los bancos cortan la cadena de pagos rechazando cheques, incluso de sus mejores clientes”, lo que complica “aún más la falta de ventas de la empresa y, sobre todo, ponen en riesgo la actividad de la empresa y de toda la economía cuando las ventas repunten”.

Por este motivo solicitaron que las entidades financieras “autoricen descubiertos automáticos en cuenta corriente para cubrir los cheques de sus clientes” y que las tasas de interés “por esos descubiertos no superen el 20% anual, que es la tasa de referencia que ofrece el gobierno”; además de que “los bancos garanticen rapidez para dar los créditos”.

“A la angustia por la pandemia le sumamos la incertidumbre de cientos de puestos de trabajo y del futuro de muchos argentinos”, señaló el presidente de CAME, Gerardo Díaz Beltrán y agregó que “ante la agonía de las pequeñas y medianas empresas, los bancos no muestran ningún gesto solidario para salvaguardar al sector más importante generador de empleo privado”.