Un nuevo artefacto espacial creado en Argentina está listo para ser lanzado y hoy inicia su traslado a Estados Unidos para su posterior puesta en órbita el 30 de marzo. Se trata del satélite “Saocom 1B”, en cuyo desarrollo participaron de forma conjunta las empresas Invap S.E. (Investigaciones Aplicadas Sociedad del Estado) y Ceatsa (Centro de Ensayos de Alta Tecnología Sociedad Anónima). 

El recorrido empezará en cercanías de Bariloche, donde se encuentran las instalaciones de las mencionadas compañías. Acerca de la a función que ejecutará en el futuro desde el espacio, la información oficial destaca que “será clave para la producción agrícola, ya que permitirá medir la humedad de los suelos y alertará sobre potenciales inundaciones, entre otros servicios”.

El trabajo de ensamblado del “Saocom 1B” comenzó en 2015 y forma parte del Plan Espacial Nacional que lleva adelante el Estado argentino a través de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae). Este satélite, junto con el Saocom 1A, conforman la Misión Saocom.

Ambos “fueron desarrollados y fabricados en el país por la Conae junto con la empresa Invap, contratista principal del proyecto; la firma pública VENG (Vehículo Especial Nueva Generación); la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y el Laboratorio GEMA (Grupo de Ensayos Mecánicos Aplicados) de la Universidad Nacional de La Plata; entre otros 80 empresas de tecnología e instituciones del sistema científico-tecnológico del país. Además, contó con la colaboración de la Agencia Espacial Italiana (ASI)”, según se informó.

El traslado comienza hoy con la salida desde las instalaciones de Invap/Ceatsa, en un convoy de camiones que transportará unas 42 toneladas de equipamiento hacia el aeropuerto de Bariloche. Allí se cargará en el avión Antonov AN 124, que despegará de suelo argentino mañana a la madrugada. El destino del vuelo en Estados Unidos será Cabo Cañaveral, donde el satélite será trasladado al predio de la empresa SpaceX para los preparativos del lanzamiento el último día del mes próximo.

“Compleja tecnología” para observar la Tierra

La investigadora principal de la Misión Saocom 1B, Laura Frulla, dijo que el desarrollo de todo el proyecto fue “un desafío muy importante para Argentina, porque no teníamos conocimientos previos sobre la tecnología para la construcción y puesta en órbita de satélites de este tipo”. Agregó que “dominar la tecnología de observación con radar es un gran avance que nos da independencia y soberanía tecnológica”.

Un parte de prensa oficial destacó por su parte que la Misión “lleva el espacio una compleja tecnología” para observar fenómenos de la Tierra, “que representa una importante mejora en las capacidades de observación respecto de los sensores ópticos usuales. Se trata de un instrumento activo que consiste en un Radar de Apertura Sintética (SAR, por sus siglas en inglés de Synthetic Aperture Radar), el cual trabaja en la porción de las microondas en banda L del espectro electromagnético”.  

La información consigna que los satélites Saocom “fueron especialmente diseñados para detectar la humedad del suelo y obtener información de la superficie terrestre en cualquier condición meteorológica u hora del día”.

“Esto es posible porque las microondas del radar son capaces de atravesar las nubes y ‘ver’ aunque esté nublado, tanto de día como de noche”, indica la descripción difundida, para luego añadir que “estas características hacen que los Saocom sean especialmente útiles para prevenir, monitorear, mitigar y evaluar catástrofes naturales o antrópicas” (esto último se refiere a las acciones humanas de cualquier tipo).

Asimismo, se informó que por la vigencia de un convenio de colaboración entre el INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria) y la Conae (Comisión Nacional de Actividades Espaciales), “la información brindada por la Misión Saocom sobre humedad del suelo ayudará a que los productores sepan cuál es el mejor momento para la siempre, fertilización y riego, en cultivos como la soja, maíz, trigo y girasol”.

A partir de los datos observados mediante los satélites, también “se dará soporte en relación con el uso de productos químicos para el control de enfermedades en cultivos, particularmente para la fusariosis en el trigo”.

Finalmente, el parte de prensa señala que “un aporte no menor para el sector agropecuario la constituye el pronóstico de inundaciones, actividad en la que también contribuye la Mision Saocom desarrollada en el marco de la cooperación entre el Instituto Nacional del Agua (INA) y la ya mencionada Conae”.