El gobierno nacional anunció ayer que el decreto por el que dispone un incremento salarial para los trabajadores privados tendrá un piso de 4.000 pesos que se pagará en dos partes, 3.000 en enero y 1.000 en febrero; y será remunerativo y a cuenta de futuros incrementos paritarios.

El decreto dispone “un incremento salarial mínimo y uniforme para todos los trabajadores en relación de dependencia del sector privado”, que “deberá ser absorbido por las futuras negociaciones paritarias” y “no deberá ser tenido en cuenta para el cálculo de ningún adicional salarial previsto en el convenio colectivo o en el contrato individual de trabajo”.

Como el pago es remunerativo, los trabajadores recibirán en bolsillo 3.320 pesos en total, por el descuento de las contribuciones.

El ministro de Trabajo, Claudio Moroni, explicó en una conferencia de prensa en Casa Rosada que el objetivo es “impulsar la recuperación de los salarios de los sectores más vulnerables, subir los salarios que habían quedado bajos por consecuencias de la inflación o de que los sectores estaban muy deprimidos”.

Es una “asignación fija remunerativa”, una “cifra fija para todas las escalas y todas las categorías” que “no tiene incidencia en los adicionales” porque la finalidad “es darles un piso a la negociación para que las negociaciones colectivas trabajen de un modo más tranquilo”.

En números, el ministro señaló que “1.300.000 trabajadores logran recuperar lo perdido de poder adquisitivo en 2019”, lo que representa un “20% de los trabajadores, y en las categorías más bajas de los convenios termina siendo un incremento real de entre el 7% y el 20%”.

Confirmó que en total, la suma que se va a incorporar es de alrededor de 20 mil millones de pesos.

El texto de la norma que se publicó hoy en el Boletín Oficial aclara que “quedan excluidos de la aplicación del presente decreto los trabajadores y las trabajadoras del Sector Público Nacional, del Régimen de Trabajo Agrario y, del Régimen Especial de Contrato de Trabajo para el Personal de Casas Particulares”, aunque aclararon que evaluarán la posibilidad de “instrumentar medidas tendientes a contemplar la situación de dichos trabajadores”.

Moroni sostuvo que “el sector público va a tener un aumento similar a este” y confirmó que “los primeros días de la semana que viene estará resuelto”.

En cuanto a las micro, pequeñas y medianas empresas, el decreto dispone que si cuentan con el certificado Mpyme vigente, “quedarán eximidas del pago de las contribuciones patronales con destino al Sistema Integrado Previsional Argentino, con relación al incremento salarial resultante del artículo 1, por el término de 3 meses o el menor plazo en que tal incremento sea absorbido por las futuras negociaciones paritarias”.

Las pymes que no tengan este certificado vigente podrán quedar eximidas del pago de los aportes si lo obtienen dentro de los 60 días corridos desde la publicación del decreto.

Provincias y municipios

Consultado sobre la posibilidad que se instruya una medida similar para las provincias y municipios, el ministro aclaró que “la Nación respeta la autonomía de las provincias”.

“Creemos que cada provincia tiene que resolver sus cuestiones autonómamente, y que la fijación de políticas nacionales tiene que ser en casos muy puntuales y pensando en características regionales”.