Al analizar las medidas para las pequeñas y medianas empresas contempladas en la ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva sancionada esta semana, el presidente de la Asociación de Empresarios Nacionales (ENAC), Leo Bilanski, sostuvo que “la moratoria con quita de intereses y multas, y un plazo razonable para pagar las deudas fiscales”, viene a “ordenar la situación” porque “el 60% de las pymes tiene algún tipo de problema impositivo”.

“La recesión y los aumentos brutales de los costos arrojaron a las pymes a esa situación que es un verdadero flagelo”, por lo tanto “la moratoria es algo que estábamos pidiendo y es necesario”, indicó el empresario pyme en declaraciones a . Agregó que la flexibilización de condiciones para el pago de deudas “viene a sacarle presión del organismo recaudador de impuestos a los hombres y mujeres que trabajan y que producen, y que quieren estar en blanco y pagar los impuestos”.

La ley incluye una moratoria para las micro, pequeñas y medianas empresas, que contempla la suspensión de las acciones penales, la exención de multas y condonación de intereses y capital, así como también una tasa de interés fija del 3% mensual durante los primeros 12 meses, mientras que luego se aplicará la tasa variable equivalente a Badlar que usan los bancos privados.

Bilanski aclaró que además de esto, las medidas “inyectan recursos a los sectores más vulnerables y esos recursos terminan en el mercado interno, por lo tanto también es un aporte a la reactivación de la economía”. Definió que “es un primer paso en la dirección correcta y es una medida que va a ser parte de un conjunto de iniciativas”.

“En los 180 días que siguen, Alberto Fernández tiene que resolver el tema de la deuda externa y en virtud de eso ver los recursos de los que dispone para seguir fortaleciendo la dinámica de consumo de Argentina”, explicó el presidente de ENAC, para luego destacar que “no es que de un día para otro esto cambia, sino que va a llevar un tiempo salir del laberinto en el que nos metió Mauricio Macri”.

Doble indemnización y aumentos por decreto

También opinó sobre dos medidas incluidas en la ley que tuvieron críticas por parte de algunas entidades que agrupan a empresas pequeñas y medianas, y que son la doble indemnización por despidos y los incrementos de sueldo o pago de bonos por decreto.

Para Bilanski, “la doble indemnización afecta a una parte muy chiquita de las empresas, porque una pyme que echa a un trabajador está más cerca de cerrar que de pagar la doble indemnización”.

Aclaró que “no es algo estratégico o central para nuestra supervivencia, y creo que busca darle tranquilidad al mercado laboral e incentivar a que consuman en diciembre”. Remarcó que si fuera la “única medida” que propuso el presidente “diría que es perjudicial porque hay recesión y encima después no se puede achicar la nómina de trabajadores, pero no es así”, sino que “vamos en sentido opuesto”, afirmó el dirigente.

En cuanto al aumento de salarios, consideró que hay que incrementarlos por decreto “pero también tiene que haber por decreto créditos bancarios a tasa de un dígito por seis meses, en función del doble de capital de la nómina de salarios que paga una pyme para poder pagar aguinaldo, vacaciones, reponer el capital de trabajo y pagar alguna deuda”.

“Una cosa sin la otra es muy difícil de implementar porque lo que se necesita es capital, y el capital en pesos está escondido en los bancos”, señaló. Apuntó además que “también los bancos van a tener que poner el cuerpo, no solo las pymes o los trabajadores”.

Consejo contra el Hambre

La ENAC fue invitada a participar de la primera reunión del Consejo contra el Hambre que convocó el presidente Fernández junto con el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, y la coordinadora del plan, Victoria Tolosa Paz, quienes presentaron las avances del mismo.

Bilanski describió que comenzaron con “la entrega de tarjetas de débito del Banco Nación dedicadas a la compra de alimentos en Concordia, donde entregaron 7.000 tarjetas para familias que incluyen a 10.000 chicos que están en situación de vulnerabilidad”.

“La idea es que cada uno pueda aportar lo mejor que pueda, y por eso se proponía en este encuentro la ayuda de todas las organizaciones de los trabajadores, de las pymes, y también de la sociedad civil con personas como Marcelo Tinelli y Narda Lepes, para que la iniciativa no sea del gobierno sino de todos los argentinos”, explicó el dirigente. 

Informó asimismo que a través de la ENAC propusieron, a propuesta de la asociación de panaderos, que “se mantenga el pan sin aumento por seis meses”. 

Blanqueo laboral

El representante de las pymes también planteó la necesidad de que haya un programa de incentivo al blanqueo laboral para que se formalicen los trabajadores que están en la economía informal, con un escalonamiento en el pago de las cargas patronales organizado de acuerdo al tamaño de las empresas. Por ejemplo, que el primer año los costos salariales adicionales al neto los subsidie el Estado, y después vaya cubriendo en porcentajes hasta que se haga cargo definitivamente la empresa.

“Esto generaría la integración al mercado laboral de entre 250 y 300 mil puestos de trabajo, y al Estado no le reportaría pérdidas sino beneficios porque es más económico pagar una parte del salario, o sea la referida a las cargas patronales y la seguridad social, que pagar un plan completo”, explicó Bilanski. “El salario se vuelca al consumo y eso tiene componentes muy altos de impuestos también”, completó.