En la primera reunión de su mandato con los gobernadores de todas las provincias, el presidente Alberto Fernández acordó ayer en Casa Rosada la suspensión del consenso fiscal firmado con la anterior gestión que establecía para el año que viene una baja del impuesto a los ingresos brutos; lo que repercutirá en un aumento de la recaudación prevista para el 2020.

El acuerdo establece también la suspensión por un año de los juicios que le hicieron la mayoría de las provincias al Estado Nacional por la baja de los impuestos a las Ganancias y el IVA a la canasta básica de alimentos, y la creación de una comisión integrada por un representante de cada provincia y de Nación para proponer formas extrajudiciales de compensar esta baja de la coparticipación.

De acuerdo a lo informado por el gobierno nacional el fin del acuerdo es fortalecer “las autonomías provinciales a través de la modificación de los compromisos asumidos entre el Estado nacional y las jurisdicciones”.

La información oficial indica que esta medida representará aproximadamente un alivio fiscal de 60 mil millones de pesos para las 23 provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

“Con la suspensión de la cláusula se otorga libertad a las provincias para que, en caso de considerarlo necesario, utilicen las alícuotas máximas que se establecían para impuestos provinciales al año 2019”, indica el texto firmado y aclara que “las provincias se ven dotadas de un instrumento para gravar alícuotas de acuerdo a sus necesidades y criterios”.

De la audiencia, de la que participaron todos los gobernadores, menos el de Tierra del Fuego porque ayer fue su acto de asunción, también formaron parte el ministro del Interior, Eduardo De Pedro, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa.

En una conferencia de prensa posterior, el gobernador de San Juan, Sergio Uñac, remarcó que “el consenso fiscal establecía una baja para 2020 de las alícuotas que las provincias cobramos respecto de los impuestos provinciales”, y explicó que “ahora quedamos con los números de 2019”.

“Paralizar la baja de impuestos lo que hace es mantener los ingresos de las provincias, pero no es un cheque en blanco para poder subir impuestos”, dejó en claro Uñac sobre la posibilidad de que esta adenda sea un primer paso para que aumenten los tributos en todas las jurisdicciones.

El mandatario sanjuanino definió que esta decisión se toma en el marco de la necesidad de “colaborar porque lo más importante es restablecer la economía, y que podamos adoptar medidas concretas que repercutan directamente en favorecer el consumo y el poder adquisitivo del salario”.

El gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, indicó que “parar el cronograma de rebaja nos va a permitir mayor recaudación a las provincias” y definió que les “da un alivio a las provincias durante un año”.