Luego del anuncio del gobierno de la actualización de los derechos a las exportaciones agropecuarias y de la ya conocida resistencia por parte de la Mesa de Enlace, el Foro Agrario Nacional anunció que apoyan las “medidas redistributivas como las retenciones, sobre todo en momentos de una Emergencia Social y Alimentaria”.

Nahuel Levaggi, coordinador nacional de la Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT) e integrante del mencionado foro, sostuvo a que se posicionan “a favor de las políticas redistributivas” porque consideran que “la redistribución de la riqueza tiene que realizarse con políticas públicas, y en ese marco el impuesto al derecho a la exportación es una de ellas”.

“En ese sentido estamos a favor, y también creemos que tiene que haber segmentación en esas medidas porque no es lo mismo un productor de 50 hectáreas que uno de 5.000”, enfatizó. Por esa razón agregó que “tanto por volumen de exportación como para proteger a las economías regionales, eso tiene que estar contemplado”, indicó el representante de pequeños agricultores, un sector que se define como parte del “otro campo”.

Ayer, los integrantes de la Mesa de Enlace que reúne a las cámaras empresarias tradicionales del sector agropecuario, plantearon sus quejas en una conversación con el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Luis Basterra. 

Luego de la reunión, dicha mesa coordinadora manifestó su “contundente rechazo a las medidas oficiales”, tanto por el hecho de que no les avisaron de la actualización de los aranceles como “por considerarlos un mal impuesto, que no tiene en cuenta la realidad de los productores, desincentiva la inversión y reduce la competitividad de las exportaciones”.

“No hay un solo campo”

El Foro Agrario expresó en un comunicado que “la Mesa de Enlace no representa el territorio, ni tiene propuestas concretas para luchar contra el hambre ni la crisis alimentaria”, y afirmó que como “todo el campo no es lo mismo tampoco los son las capacidades contributivas de los productores”, por lo que reclaman que “paguen más los que más tienen”.

“No hay un solo campo”, enfatizó la entidad de pequeños agricultores, para luego explicar que “por un lado existe un campo concentrado que gana con la especulación financiera y la devaluación, que desaloja familias campesinas e indígenasy y no le preocupa la destrucción de los bosques nativos ni la contaminación con agrotóxicos”.

Señalaron que por otro lado, “estamos las y los del campo cooperativo, que generamos más de 54% del empleo rural, agrario, que producimos alimentos para el pueblo” y además “fuimos perjudicados por la devaluación y motorizamos un cambio de modelo productivo hacia la agroecología y la democratización de los canales de comercialización”.

Levaggi, en sus declaraciones a este portal de noticias, dijo que “la discusión respecto del modelo agropecuario es mucho más amplia que retenciones sí o retenciones no”, porque el tema se relaciona “con un plan integral” que tenga el eje puesto “en el acceso a la tierra y en la transformación del modelo productivo”.  

Entre las medidas que plantea su organización está el hecho de que los pequeños productores puedan producir y vivir en su propia tierra, avanzar en un modelo agroecológico “para liberarnos del modelo de muerte de los agrotóxicos”, y en tercer lugar modificar la matriz de compra y venta de los alimentos, de manera que se pueda “desconcentrar la comercialización, que haya mercados más directos entre los productores y los consumidores para que el productor gane más y el consumidor pague menos”.

El coordinador de la Unión de Trabajadores de la Tierra confirmó que presentarán las conclusiones del Foro Agrario a distintos ministros de la Nación, y les van a plantear su agenda de trabajo basada en el “modelo de soberanía alimentaria, poniendo el eje de una vida digna del campo, en una ruralidad con productores, con campesinos, y con democratizar la matriz productiva y la matriz de comercialización”.

El referente social afirmó que la situación de los pequeños productores “es de emergencia” porque “viene de cuatro años de macrismo, donde se han devastado las políticas públicas y se han acelerado condiciones macroeconómicas muy difíciles para el sector productor”, por lo cual esperan “con ansias medidas positivas por parte de este gobierno”, concluyó Levaggi.