Faltando 20 días para asumir la presidencia de la Nación, Alberto Fernández tuvo una conversación telefónica con la directora general del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva. El futuro mandatario le dijo a su interlocutora que cuando esté en el gobierno le propondrán “un plan económico sostenible y un acuerdo de pago que podamos cumplir, pero sin más ajuste”.

El ganador de la elección presidencial, que integró la fórmula con Cristina Kirchner como candidata a vicepresidenta, dio otro paso más que forma parte de las primeras etapas para las negociaciones que necesariamente deberá enfrentar su gestión, destinadas a afrontar la deuda externa que dejará el gobierno de Mauricio Macri y que es la más grande que tiene cualquier país del mundo con el FMI.

La comunicación duró 10 minutos y estuvieron presentes los economistas Cecilia Todesca y Matías Kulfas, futuros integrantes del gabinete nacional, aunque todavía no se hizo público en qué cargo estará cada uno. También participó Juan Pablo Biondi, jefe de Prensa de Fernández.

Según dijeron sus voceros, el presidente electo le dijo a la mandamás del Fondo Monetario que “hemos elaborado un plan sustentable que nos va a permitir crecer y cumplir con las obligaciones que la Argentina tiene con ustedes y con el resto de los acreedores. Estamos asumiendo un compromiso que podamos cumplir”.

Georgieva había realizado declaraciones a la influyente agencia de noticias económicas y financieras Bloomberg, y allí advirtió sobre la “viabilidad fiscal” del futuro plan económico.

En la conversación Fernández le dijo “entiendo la relevancia de la viabilidad fiscal, no me tiene que convencer de eso. Pero es mi deber anticiparle que en la situación en la que se encuentra la economía argentina es difícil propiciar un mayor ajuste. No podemos hacer más ajustes fiscales porque la situación es de una complejidad enorme, el nivel de ajustes en la era de Macri ha sido tremendo”.

Contra el hambre y la pobreza

Según comunicaron desde el equipo de futuro jefe del Estado, Georgieva le expresó: “Me han conmovido sus prioridades: la reducción de la pobreza y la lucha contra el hambre en un entorno económico que permita crecer y generar empleo, para mejorar la vida del pueblo argentino. Veo que usted enfatiza el crecimiento, la generación de empleos y mejorar las vidas del pueblo argentino”. 

La jerarca financiera internacional aseguró que “es una misión que compartimos, quisiéramos ver a la Argentina dejando atrás los ciclos de auge y recesión para lograr una trayectoria sostenible de crecimiento con desarrollo social”. Agregó incluso que “también nos interesa la propuesta que usted ha hecho en torno a un Pacto Social para disminuir la inflación”.

El presidente electo le reiteró que la Argentina está “en un momento particularmente difícil” e insistió en que “estamos en condiciones de proponer un plan para resolver el problema de la Argentina y poder pagar la deuda con el FMI y el resto de los acreedores”.

Además, Fernández valoró el llamado de la titular de la institución internacional y “celebró las coincidencias” en torno a la prioridad respecto a la “disminución de la pobreza y la eliminación del hambre”. Su interlocutora afirmó: “Queremos trabajar con usted atacando el problema de la inflación y promoviendo el crecimiento”, y se mostró “muy ansiosa de conocer más detalles de su plan (de gobierno), porque cuando un país es dueño de su plan, esos planes son efectivos”.

Antes de despedirse, la mejor expresó: “Contamos con su liderazgo y el de su equipo, pongamos manos a la orden para ir avanzando. Estoy segura de que trabajaremos juntos”. Fuentes del Frente de Todos estimaron que “seguramente volverán a hablar pronto". 

Tanto Fernández como Georgieva enfrentan la obligación de renegociar un pacto del que ninguno formó parte al momento de su firma. Quiénes acordaron el préstamo y sus condiciones fueron el presidente saliente Mauricio Macri y la ex titular del Fondo, Christine Lagarde, quien dejó el cargo para dirigir el Banco Central Europeo.