El presidente de la Asociación de Empresarios Nacionales (ENAC), Leo Bilanski, criticó la medida impulsada por los bancos y otros poderosos sectores del capital local y extranjero para que, aun cuando cambie al gobierno, continúen en sus cargos los principales funcionarios del Banco Central, la Anses, la AFIP y la Unidad de Información Financiera (UIF), entre otros organismos claves para controlar al poder económico. 

El dirigente sostuvo que con esa pretensión “está de manifiesto que la CEOcracia se defiende a sí misma”. La referencia es por el poder que han adquirido durante el gobierno de Mauricio Macri los CEO (en inglés, Chief Excecutive Officer, traducible como “director ejecutivo”, es decir integrantes de los directorios de grandes firmas que además conducen la administración de la misma).

“Hace cuatro años que vivimos una dictadura financiera con tasas de acceso al financiamiento que son prohibitivas para cualquier empresa pyme en la Argentina, y no tenemos otra opción producto de la ley que nos obliga a financiarnos en los bancos”, indicó Bilanski en declaraciones a .

Y agregó que “cada vez que tenemos que cambiar un cheque tenemos que pagar tasas del 70% o el 80%, en detrimento de nuestro patrimonio y de la rentabilidad de nuestras fábricas, y en favor de los 4 o 5 bancos, las 5 o 6 financieras y la bolsa de comercio”.

Para el empresario nacional, “han puesto funcionarios afines a ellos en el Banco Central, en la UIF y en distintos espacios para garantizar que las normas, los controles y las leyes siempre beneficien a los grandes y siempre perjudiquen a los consumidores y a las pymes”.

“Interferencia del capital extranjero”

Los directivos de la Asociación de Bancos Argentinos (ABA, que contrario a su nombre nuclea a bancos extranjeros), entre otros, lanzaron un reclamo el próximo gobierno durante las deliberaciones de la semana pasada en Mar del Plata durante el 55º Coloquio de IDEA (Instituto del Desarrollo Empresarial Argentino, organización de grandes capitalistas que trata de influir sobre el poder político y sobre la opinión pública).

El planteo es que se mantengan en sus cargos los presidentes y demás funcionarios a cargo de organismos como la UIF (Unidad de Información Financiera, que debe vigilar los grandes movimientos de dinero y detectar aquellos sospechados de tener origen delictivo), el BCRA (Banco Central de la República Argentina) o la AFIP (Administración Federal de Ingresos Públicos). Argumentaron que su propósito es “reforzar la institucionalidad y las políticas públicas” en el país.

La Mesa Nacional de Unidad Pyme (MNUP) manifestó ayer en un comunicado su “oposición a que el sector financiero, en particular el sector de capital extranjero, continúe interfiriendo en el diseño de la política económica argentina”.

“Se terminan cuatro años de daño a la industria, a la producción y consecuentemente a la sociedad argentina en su totalidad”, indicaron las entidades, y advirtieron “que, sin pudor, quienes son corresponsables de esta destrucción y del deterioro nacional pretenden seguir recibiendo ganancias extraordinarias bajo el amparo del Estado”.

Bilanski, uno de los integrantes de la MNUP, aclaró a este portal de noticias que su pedido a los bancos es que “se ocupen de lo que tienen que hacer, que es bajar la tasa de interés”. Es decir, “se tienen que ocupar de poner el dinero de los argentinos al servicio de la producción y no de la especulación; esta historieta de las Leliqs y de la especulación financiera prestándole plata al Estado se termina el domingo”, afirmó refiriéndose a la elección presidencial.

Agregó que “queremos ponerle un límite a los bancos, primero que se ocupen de volver a la normalidad el acceso al dinero que no es de ellos sino de todos los argentinos, y segundo que si van a hacer política que se afilien a un partido, porque si no estamos en un problema”.

Sobre la reunión que mantuvieron hace 10 días las entidades pyme con el equipo técnico-económico del Frente de Todos, el presidente de ENAC indicó que trabajaron “en lo que va a ser la representación pyme en el pacto social y en la representación de nuestra agenda, que nada tiene que ver con la de la Unión Industrial o la del coloquio IDEA o de los bancos”.

“Como en cualquier economía”

En el comunicado de la Mesa Nacional de Unidad Pyme, se resalta que “así como lo hacen en sus casas matrices, los bancos que operan en Argentina deben otorgar créditos a la inversión productiva con el 95% de su capital prestable, y con tasas reguladas estatalmente y cercanas al 3% anual”, para que de esta manera “el sistema financiero funcione tal como lo hace en cualquier economía capitalista del mundo”.

“Las Pymes representamos el 70% del trabajo registrado y el 45% del PBI, tenemos el potencial para ser parte central de la reconstrucción de nuestro país”, expresaron, para luego añadir que “Argentina debe encarar una etapa de desarrollo productivo y el sistema financiero local, ya sea de capitales nacionales o extranjeros, puede y debe cumplir un rol adecuado a una sociedad que crece en equilibrio y que genera oportunidades para que todos crezcan”. 

La MNUP está integrada, además de la ENAC, por la Agrupación José Ber Gelbard; la Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios (Apyme); la Asociación de Comercios Activos; la Central de Entidades Empresarias Nacionales (CEEN); la Confederación General Empresaria de la República Argentina (CGRA); el Consejo Productivo Nacional (CPN); el Frente Productivo; la Fundación Pro Tejer (de industriales textiles); Industriales Pymes Argentinos (IPA), la Mesa Empresaria Justicialista (MEJ), Pymes Sur; y la Red Inclusiva para la Expansión Laboral (RIEL).

Integrantes de la Mesa Nacional de Unidad Pyme (MNUP).

El día después

El titular de la Asociación de Empresarios Nacionales analizó luego lo que pueda ocurrir tras las elecciones del domingo. Señaló al respecto que en la encuesta que esa entidad realiza entre empresarios pequeños y medianos de 22 provincias, “hay un consenso generalizado que fue el propio gobierno el que indujo la devaluación del 12 de agosto”, que derivó en un nuevo golpe a la economía y un agravamiento de la inflación.

“Lo hizo sin medir consecuencias y no se ve por qué no lo puede hacer de nuevo el 28 de octubre (al día siguiente de la votación) lastimando al aparato productivo y a la sociedad”, advirtió el empresario. Agregó que “hay mucha preocupación por Macri, por un presidente que cada vez que se mueve destruye todo”, definió.

Explicó asimismo que “los precios aumentaron dramáticamente, y a partir de la semana que viene están previstos aumentos importantes del 16% en alimentos, algo que es inadmisible”.

Sostuvo que “son corporaciones que buscan a través de la permisividad de funcionarios como (el ministro de Producción y Trabajo) Dante Sica, apropiarse de dinero que no le corresponde. Te ofrecen la misma leche que este mes, con los mismos costos pero te la quieren cobrar un 16% más caro. Es un abuso de posición dominante que lastima el bolsillo de los trabajadores y en definitiva a las pymes”, concluyó Bilanski.