El legislador nacional Sergio Wisky (Cambiemos) realizó un análisis de la situación económica y social por la que atraviesa el país, dijo que tiene expectativas favorables y explicó los motivos por lo que se llegó a estas circunstancias. También fue consultado por los tiempos electorales y su visión del 2019 en provincia y nación.

Acerca del escenario nacional y el futuro inmediato manifestó que “en principio veo un horizonte de expectativas bueno. Creo que ya estamos pasando este valle complicado, de complejidades propias en un mundo complejo, donde toda la economía mundial se mueve para distintos lugares y generando inestabilidades internacionales”. 

Agregó que “esas circunstancias en un País como el nuestro con tantas debilidades impacta de una manera diferente a otros lugares. De a poco se fue encapsulando esta crisis o movida cambiaria que tuvimos hace un mes atrás y con estas medidas que está tomando el gobierno, con el stand by del FMI, con las distintas medidas del equipo económico, creo que si bien van a ser un par de meses duros, pero con expectativas favorables”.

Al manifestarle que había un amplio sector de la sociedad que la está pasando mal y que se hace difícil mirar con optimismo señaló que “yo entiendo las miradas diferentes y reconocemos los problemas y que afectan principalmente a la población más desprotegida. Este gobierno está enfocado en reducir la inflación, como lo hizo Chile, Perú o Colombia o como lo está haciendo Brasil para hablar regionalmente. Sabemos que no es sencillo y como ha dicho varias veces el presidente Macri, quizás tuvimos expectativas demasiado ambiciosas y estamos transitado un proceso un poco más lento de lo que nos hubiera gustado”.

Dijo luego que “debemos reconocer también que hace 70 años que Argentina vende magia que después no se cumple, este gobierno ha puesto la verdad sobre la mesa y la está intentando trabajar y hace 50 años que se gasta más de lo que se tiene que gastar y por eso tenemos la presión tributaria que hace insoportable la actividad económica en cualquier sector”.

Argumentó que “hay que cambiar las formas de hacer las cosas. Desde los 70 que venimos escuchando de la crisis de la fruticultura y nadie la ha resuelto, ni los sindicalistas ni los distintos gobiernos, lo que habla de nosotros como sociedad”.

“Llegó el tiempo de enfrentar las cosas con la verdad y plantearnos que el camino que encaramos siempre nos termina llevando a una crisis, por eso es que decimos que hay que elegir otro camino, como lo hicieron los países que mencione antes”, sentenció el diputado.

-Este modelo o diseño económico que lleva adelante el gobierno lleva un proceso largo y aún sin resultados positivos; ¿usted cree que les va a alcanzar para afrontar las presidenciales del año que viene?

-Seguro que sí. Nosotros vamos a llegar muy bien para el año que viene y creemos que Mauricio Macri va a ser reelecto.

Al ampliar sus conceptos sobre los motivos del difícil momento económico que se presentó, señaló que “fue producto del aumento del costo del dinero que nos estaba ayudando a sustentar este plan, porque hasta ahora era la deuda con los argentinos, deberle a los jubilados, no tener infraestructura, no tener conectividad aérea, todo eso era un costo interno que lo pagábamos todos. Nosotros decidimos cambiar ese modelo de gestión de endeudamiento con la sociedad y buscar un financiamiento para salir de esa situación y recomponernos.

Agregó el parlamentario que “el aumento en las tasas en norteamericana que cambió todo, con algo interno como el tema de cambiar las reglas de juego con el intento de retrotraer el cuadro tarifario, conformó un cóctel que provocó la corrida de hace un mes que por suerte ya se empezó a desinflar”.

Afirmó que “el valor del dólar empezó a ceder y ahora habrá que trabajar fuerte en la otra variable macroeconómica que es cuanto, cómo y dónde gasta el Estado, que es el gran desafío que tenemos todos los dirigentes para que ese gasto sea eficiente y que esa inversión tenga una eficiencia social que hoy no está teniendo.

En cuanto a la perspectiva electoral en el ámbito provincial, Sergio Wisky señaló que “estamos en un proceso de normalización del PRO y del ARI, el radicalismo está en su proceso de renovación de autoridades, nos pusimos como límite septiembre para estar acomodados los tres partidos, mientras tanto afianzando vínculos para fortalecer el lugar común que tenemos, que es Cambiemos".

En ese sentido remarcó que “lo que hemos instalado como trabajo es competencia colaborativa, que en esta Argentina en que los políticos siempre nos estamos sacudiendo con la maceta, es casi revolucionario. Se ha logrado caminar una ruta de construcción colectiva donde cada individuo aporta lo suyo, pero en el momento en que midamos, el que mejor mida será el que lidere el proyecto”.

Concretamente sobre el año electoral afirmó que “se va a dar una polarización entre el Cristinismo y Cambiemos. En la provincia va a suceder esto también. Creo que nosotros tenemos que trabajar después de septiembre en buscar acuerdos que superen a Cambiemos pero eso lo tenemos que trabajar una vez que Cambiemos se acomode. La mayoría tenemos esa mirada pero hay que construirlo".