Los empresarios integrantes de la Cámara Argentina de Fruticultores Integrados (CAFI) expresaron su preocupación por el tipo de cambio y remarcaron que, más allá de algunas declaraciones altisonantes de algún funcionario, en clara referencia a dichos del ministro Dujovne en Bariloche la semana pasada, esta variable es clave en la actividad.
Desde la CAFI, como entidad que representa a los productores de manzanas y peras del Alto Valle, región que produce y comercializa más del 85 % de esos frutos de Argentina, señalaron que “la fruticultura es una actividad exportadora y como tal, si bien hay otras variables que influyen en la competitividad del sector, el tipo de cambio real es una variable protagónica”.
Admiten, de todas maneras, que hay que realizar cambios en materia de producción, como por ejemplo, la incorporación de tecnología. Pero explicaron que esos cambios no se llevaron a cabo con la velocidad que hubiesen deseado porque producir y comercializar no fue rentable en los últimos años.
“La falta de rentabilidad fue demostrada por todas las organizaciones del sector y organismos del Estado reiteradamente, así como también la causa: una actividad exportadora, en una economía de alta inflación, con un tipo de cambio bajo, nos lleva a costos en dólares con los que es imposible competir a nivel internacional”, remarcaron.
Otra de las variantes que los empresarios aseguran que tiene un fuertísimo impacto en los costos son los impuestos al trabajo. En ese sentido, explicaron que actualmente están pagando 10 veces más que los principales competidores. Esta situación es determinante teniendo en cuenta que la actividad frutícola cuenta con mano de obra intensiva, a diferencia de otras actividades agroexportadoras del país que tienen una muy inferior incidencia del costo laboral.
Los empresarios admitieron estar preocupados porque enfrentarán otra temporada como la que está a punto de iniciar, con costos que crecen más que la variación del tipo de cambio, es decir, se repite la causa originaria.
Finalmente aclararon que el planteo que ellos realizan respecto de la importancia del tipo de cambio no es un pedido de devaluación. Lo que sí advierten es que mientras el tipo de cambio vaya por detrás de la inflación, “volvemos al escenario por todos conocido, al que no queremos volver”. Mientras que reiteraron su “vocación” por trabajar todos juntos para encontrar las salidas necesarias que le den a la fruticultura sustentabilidad en el largo plazo.
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