La trama de espionaje y extorsiones que investiga el juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla, alcanza a la empresa de servicios petroleros OPS, que tiene su sede en la ciudad de Neuquén y desarrolló actividades en diferentes lugares de la Patagonia hasta el comienzo del gobierno de Mauricio Macri.

El presidente de la compañía, Mario Cifuentes, declaró como denunciante ante al magistrado y, según versiones periodísticas, allí acusó a los diputados Leandro López (Neuquén) y Sergio Wisky (Río Negro), ambos del Pro, de pretender “arrebatarle la empresa”.

En 2016, ambos legisladores realizaron denuncias contra los propietarios de la firma mencionada por supuesto “lavado de activos provenientes de ilícitos”. En esa ocasión, dijeron que contaban con “indicios suficientes para sospechar que la empresa OPS y sus dueños formaban parte o cometieron” esos delitos.

Esta semana, Cifuentes prestó declaración ante el juez Ramos Padilla, en la tarde y noche del martes y durante más de ocho horas, en la causa que involucra al falso abogado y presunto agente secreto norteamericano Marcelo D’Alessio, y también al fiscal Carlos Stornelli y el periodista Daniel Santoro, del diario Clarín, entre otras personas que están siendo investigadas.

Uno de los que difundió información referida a la mención de López y Wisky por parte del titular de la firma OPS, fue el periodista Iván Schargrodsky. Según publicó este último en su cuenta de Twitter, el empresario “declaró en el juzgado de Dolores” que ambos diputados macristas “fueron parte de una maniobra para arrebatarle la empresa”.

https://twitter.com/ischargro/status/1111053270364102656

(Tuit de Schargrodsky):El empresario Mario Cifuentes declaró en el juzgado de Dolores que los diputados @lopezleandrog y @sergiowisky fueron parte de una maniobra para arrebatarle la empresa.

“Coaccionado para vender su empresa”

Diferentes medios y profesionales de la información dieron a conocer en las últimas horas detalles del testimonio que prestó el empresario ante el juez Ramos Padilla.

Juan Alonso, periodista de investigación, informó en su cuenta de Twitter que Cifuentes “declaró en detalle cómo fue coaccionado para que se desprendiese de su empresa de servicios petroleros llamada OPS, que tenía una deuda con el Fisco de unos 800 millones de pesos. La empresa empleó a 1400 trabajadores y quebró por la presión que recibió a partir de 2016”, tras el recambio presidencial en el país.

En ese contexto, detalló que “apenas asumió Macri, su empresa que trabajaba con YPF ya no recibió más pagos de la petrolera estatal y tuvo una deuda imposible de sostener. Al mismo tiempo, luego de una denuncia de dos diputados, dos diarios comenzaron a acosarlo”, precisó el periodista.

“Esos diarios eran, según declaró el propio Cifuentes, el diario de Río Negro, con una nota de 2016”, y además “Clarín con la firma de su periodista, que ya no quiere preguntar, Daniel Santoro”, indicó Alonso de forma irónica. Agregó que ambos medios decían que Cifuentes “era ‘el nuevo Lázaro Báez’”, y que “mientras eso sucedía, D'Alessio lo extorsionaba”.

En una serie de tuits, el profesional del periodismo de investigación reconstruye otras partes de la declaración judicial. Señala que “entre febrero de 2018 y abril del mismo año, Cifuentes mantuvo una serie de reuniones en lugares públicos como El Malba, el Hotel Emperador, y otros lugares, con D'Alessio y personas que calificó como X1, X2, X3, y X4. Todos presuntamente vinculados a D'Alessio en el mecanismo”.

Puntualiza después que el empresario “contó que conoció la casa del presunto agente de la DEA, Marcelo Sebastián D'Alessio en Canning”. Cabe destacar que en esta localidad del Gran Buenos se encuentra una lujosa vivienda de D’Alessio, de altísimo valor económico, que fue allanada por el juez Ramos Padilla en los primeros días de la investigación, y donde se secuestraron teléfonos, computadoras, documentación en papel y otros materiales probatorios que revelaron la trama delictiva.

“Con pistolas en la cintura”

El periodista Juan Alonso indicó que en la vivienda de D'Alessio, tanto él “como la persona que (Cifuentes) definió como X4, estaban armados con pistolas en la cintura. En la casa estaba la familia de D'Alessio, quien le mostró su escopeta”, habría revelado el empresario neuquino en su testimonio en sede judicial.

Posteriormente, el profesional de prensa publicó que “la declaración de Cifuentes se asemeja a los casos de la familia Graiver y los hermanos Iacarino, desapoderados de sus bienes materiales en la dictadura cívico-militar. Lo más grave es que esta situación se dio presuntamente en democracia bajo el gobierno de Mauricio Macri y Cía”, apuntó.

También expresó que “en el relato” del presidente de la empresa OPS “quedó muy en evidencia el supuesto rol del periodista de Clarín, Daniel Santoro, en la organización paraestatal de espionaje y extorsión integrada por Marcelo Sebastián D'Alessio y los comisarios de la Bonaerense, Ricardo Bogoliuk y Aníbal Degastaldi”.

“Siempre según Cifuentes”, continúa el investigador periodístico, “D'Alessio lo presionaba con notas en Clarín que realizó Daniel Santoro y otros, y con comentarios maliciosos del mismo periodista en el programa de ‘Animales’ por el Canal América. Cifuentes dijo que D'Alessio le sugerió ‘esta noche mirá el programa’".

”Cifuentes identificó en un acta reservada los nombres reales de las personas X1, X2, X3, Y X4. Esas personas estarían vinculadas a D'Alessio y la organización paraestatal dedicada a la extorsión y el espionaje nacional y regional”, concluye la serie de tuits de Juan Alonso, antes de anunciar que  publicaría más detalles del tema en el portal Nuestras Voces.