La Legislatura neuquina aprobó, en general, la ley que modifica el art. 114 del Código Procesal Penal. El nuevo texto le incorpora a la ley 2.784 mayores elementos para que los jueces tengan en cuenta como causales de prisión preventiva.

De ellos, el más polémico es que considera el posible riesgo de que el imputado pueda poner en peligro la vida o la integridad de la víctima, aunque también se ampliaron las razones en caso que existiera peligro de fuga o entorpecimiento del proceso.

Los 15 votos afirmativos los aportaron los bloques del MPN, el Frente Renovador, Adelante Neuquén, UP-UNA, FPN-UNE y el Pro, que votó dividido.

A su vez, los 12 negativos fueron emitidos por los diputados del Frente para la Victoria, Nuevo Encuentro-Frente Grande, Libres del Sur, PTS-FIT, Unión Cívica Radical y la diputada del Pro, Carolina Rambeaud. Desde este último bloque, en cambio, Damián Canuto había votado a favor.

La ley plantea que los jueces deberán tener en cuenta para decidir acerca del peligro de fuga, una serie de circunstancias que incluyen el arraigo del imputado y las facilidades para abandonar el país o permanecer oculto; las características del hecho y la pena esperada; la solidez de la imputación formulada respecto del imputado y la calidad de la prueba en su contra; y el comportamiento durante el procedimiento. En tanto que para decidir sobre el peligro de entorpecimiento, el magistrado tendrá en cuenta la presunción de que el imputado pueda destruir o modificar elementos de prueba; influir para que co-imputados, testigos o peritos informen falsamente o se comporten de manera desleal o reticente, o inducir a otros a adoptar ese comportamiento.

Para decidir sobre el riesgo hacia la integridad de la víctima o su familia, el juez valorará la existencia de amenazas o hechos violentos, y el incumplimiento por parte del imputado de otras medidas cautelares no privativas de la libertad que se hayan ordenado en protección de la víctima, previstas en el artículo Nº 113 del Código Procesal Penal y en las leyes de violencia familiar y de prevención de violencia contra las mujeres.

Como en una repetición de los argumentos vertidos en la última reunión de la comisión A, hubo pocas y austeras defensas del proyecto y una larga lista de oradores de la oposición que lo criticaron. Todos coincidieron, sin embargo, en que la reforma no asegura combatir con eficacia el delito, ni alterar las estadísticas actuales de otorgamiento de la medida cautelar o de fuga de los imputados.

En reiteradas ocasiones, quienes argumentaron a favor de la reforma lo hicieron amparados en “las expectativas de la sociedad”, que según ellos les pide que revisen “este aspecto del Código”. En este sentido se expresaron los diputados del MPN Mario Pilatti, Claudio Domínguez y María Laura Duplessis.

La oposición, en tanto, repartió sus reparos en la falta de profundidad de la reforma y en las posibles colisiones que los nuevos elementos de evaluación tienen con los textos constitucionales, tanto el nacional como el provincial.

Unos minutos antes de votar la ley en general, los dos diputados que integran el bloque de Nuevo Compromiso Neuquino, Juan Monteiro y Ayelén Quiroga, se retiraron del recinto.