En Neuquén, las intervenciones que realiza el equipo interdisciplinario que trabaja en la Línea 148, que recibe denuncias de violencia de género, se multiplicaron por más de 8  desde que el gobierno nacional decretó el aislamiento social, preventivo y obligatorio para evitar la propagación del coronavirus. Si antes intervenían en un promedio de 60 situaciones semanales, ahora lo hacen en más de 500. Mientras crecieron las denuncias de violencia familiar y relacionadas al cuidado de los hijos, se redujeron las de violencia y acoso laboral.

El crecimiento de los casos de violencia desde el 21 de marzo se mide por el aumento de "situaciones" en las que desde los distintos dispositivos deben intervenir en una familia ante una denuncia de violencia. Las llamadas que reciben en la línea telefónica provincial con consultas y denuncias, dibujan una cifra aún mayor.

"Previo a la cuarentena, teníamos un promedio de sesenta situaciones semanales nuevas, por alguna situación de violencia. Luego, la primera semana de la cuarentena ya fueron 120, el doble. Ahora, hasta el viernes el mediodía, que hice el último conteo, había más de 500, desde el 21 de marzo", dijo a la responsable de la Línea 148, Soledad Crespin.

Agregó que "antes de esta medida había más denuncias de otro tipo de violencias que sufrimos las mujeres, como violencia laboral, violencia institucional, situaciones de acoso. Ahora no hay nada de eso y todo se reduce al contexto familiar, ya sean situaciones nuevas o situaciones que se reeditan".

También destacó que crecieron las denuncias sobre situaciones de violencia relacionadas a la tenencia de los hijos entre personas que están separadas. "Este contexto fue propicio para que una vez más tomaran a los hijos como botines de guerra", afirmó.

"Aumentaron un montón las situaciones de violencia en el ámbito familiar por el contexto, pero no se ha dado que sea más difícil para las mujeres comunicarse".

Por otra parte, Crespín destacó como positivo que no se han presentado dificultades para que las mujeres se puedan comunicar con la Línea, en caso de necesitarlo. "Excepto  4 o 5 situaciones en las que hemos tenido que buscar alternativas, en general no se ha dado la dificultad de las mujeres de comunicarse con la línea", afirmó y añadió que "en este contexto habilitamos las redes sociales y tampoco se ha dado que las usen tanto".

Para abordar el crecimiento exponencial de casos registrados en el último mes Crespin afirmó que  cuentan con los mismos recursos pero "diversificamos la tarea en línea, sumamos la tarea de devolver llamadas que quedan sin responder en los distintos turnos y nos ocupamos de las redes las 24 horas como la línea, a los fines de sumar canales de comunicación".

"El aislamiento golpea más a las mujeres"

La subsecretaria de las Mujeres, Patricia Maistegui, dijo a que el aumento de las llamadas a la línea se explica porque "en todo el país, por la situación de encierro las mujeres están en un mayor riego porque están con el agresor y por la imposibilidad de salir". 

Valoró el DNU que exceptúa de cumplir con el aislamiento a aquellas mujeres y personas LGBTI+ para poder realizar la denuncia o requerir asistencia en situación de violencia por motivos de género.

"Para el coronavirus se dice 'quedate adentro, no salgas de tu casa, lavate las manos'. Acá el mensaje es totalmente opuesto", remarcó, y agregó que "acá hay un pedido a la comunidad para que intervengan, para que llamen a la Línea 148".

Maistegui sostuvo que "la línea hoy está con mucha actividad" y explicó que la provincia de Neuquén decidió no adherir a la campaña "Barbijos rojos" que lanzó el gobierno nacional, para evitar que las mujeres llamen a la línea nacional 144 y lo hagan a la línea provincial, para evitar pérdida de tiempo en la intermediación.

Destacó que por el aislamiento se "aceleró" la coordinación entre las distintas áreas del Estado para garantizar asistencia a las personas víctimas de violencia. "Estamos trabajando en equipo con todas las instituciones pensando cómo hacer porque hay otros problemas también, como el económico".

Consideró que "la perspectiva de género en esta pandemia tenemos que tenerla presente todo el tiempo porque el aislamiento golpea más a las mujeres" y explicó que "aquellas que trabajan por hora, que hacen planchado o que hacen tortas fritas para vender y ese es su sustento hoy no lo pueden hacer". También apuntó que "muchas están solas con hijos, y los progenitores, desde siempre, ausentes en cuanto al sostenimiento de esas criaturas".