Cuando las sesiones se convocan a la noche suelen esconder algo vergonzante, difícil de mostrar a la luz del día. Anoche en la Legislatura, en plena cuarentena y con diputados que ingresaron al recinto previa medición de la temperatura corporal, se escuchó un intenso debate acerca del modelo de gestión del MPN y se aprobó por mayoría, con 24 votos, la ley de emergencia sanitaria que incluye transferencia de facultades al Poder Ejecuivo para tomar un endeudamiento extraordinario que será, como mínimo, de 140 millones de dólares, algo más de 9.000 millones de pesos al cambio actual.

El dato político de la jornada fue el voto dividido, en el tratamiento en particular, del bloque del Frente de Todos. Mariano Mansilla y Teresa Rioseco  respaldaron la iniciativa del gobierno y se sumaron a los 9 votos del MPN, a los seis de Cambiemos y a los seis de los bloques satélites del oficialismo. Los diputados del sobischismo, que están con el sello de la Democracia Cristiana, anunciaron que no iban a votar y se retiraron antes de iniciar el tratamiento en particular, e igual camino siguieron los dos representantes de la izquierda.

La sesión para el tratamiento en general del proyecto del Ejecutivo comenzó a las 20:30 y finalizó antes de la medianoche. Este tramo fue intenso en contenido, ubicó a la mayoría de los bloques y diputados en el lugar en el que se iban a parar frente a la deuda y proyectó el resultado final que llegó a la madrugada.

La primera votación en general de la ley de emergencia fue con el respaldo de 33 de los 35 diputados, pero en el tratamiento en particular se cayeron los respaldos por los tres artículos referidos al nuevo endeudamiento que generó una lluvia de criticas por la forma en que se manejó el oficialismo y la cantidad de dinero que contempla la norma. Se opusieron todos los diputados del Frente de Todos a excepción de los mencionados Rioseco y Mansilla, además de los tres del bloque de la Democracia Cristiana y los dos de la izquierda.

Desde el bloque del Frente de Todos se argumentó que no hubo posibilidad de debatir alterativas al proyecto original y que el gobierno nacional está recibiendo una ayuda crediticia del Banco Mundial por una cifra del orden de los 300 millones de dólares, mientras que Neuquén pretende, en este escenario, un monto que será no inferior a los 140 millones de dólares. Además destacaron que esta provincia es la única del país que saldrá a buscar créditos en vez de, primero, reorganizar partidas presupuestarias para enfrentar la crisis derivada del coronavirus.

El de anoche fue un debate intenso sobre la debilidad que tiene el sistema publico de salud, la transferencia de recursos al sector privado en los ultimos años y los métodos de coptación por parte del oficialismo de voluntades de intendentes y diputados de la oposición para conseguir respaldos, una clara alusión a los votos de Mansilla y Rioseco. Tambien se habló mucho acerca de la ausencia de imaginación para enfrentar la emergencia de otro modo y de una estrategia calificada por la oposición de "chantaje", porque el gobierno introdujo como caballo de Troya en la ley de emergencia facultades para endeudarse nunca obtenida antes.

También hubo advertencias sobre la falta de auxilio en la provincia hacia sectores vulnerables ya que la emergencia no contempla medidas como la distribución de alimentos, pagos a cuentapropistas, entre otros mecanismos de ayuda, como las medidas que tomó el gobierno nacional. Dijeron que es sólo para controlar el aislamiento obligatorio y para pedir dinero.

La nueva norma le otorga al Ejecutivo la posibilidad de emitir bonos o títulos por una cifra de hasta 140 millones de dólares, pero también a emitir Letras del tesoro por un monto no especificado y por un tiempo tampoco establecido, por lo que resulta difícil cuantificar de cuánto será la nueva deuda que pretende tomar la gestión de Gutiérrez. 

La propuesta original era por 100 millones pero subió 40 millones de dólares porque habrá fondos para los intendentes y comisiones de fomento, según los argumentos del oficialismo. Con esa llave, el gobierno consiguió destrabar la aprobación y sumó nuevos respaldos.

Los argumentadores a favor del proyecto del MPN, la diputada Laura du Plessis y Maximiliano Caparroz, pusieron el acento en el esfuerzo que hará la provincia para enfrentar esta crisis y en la pérdida de recursos que sufrirá producto de la caída en la principal actividad de la provincia, la industria petrolera. (ver nota aparte)

El gobernador Gutiérrez ya tenía, por el presupuesto aprobado para este año, la posibilidad de emitir deuda por 11 mil millones de pesos o equivalente en dólares, y otros 6.000 millones en Letras, pero en este último caso a rescatar dentro del ejercicio, es decir antes de finalizar el año. El nuevo monto establecido por esta ley para emitir bonos en dólares es  superior a los 9.000 milllones de pesos, con lo cual ya dispone de un paquete de 25 mil millones de pesos, sin contar las nuevas Letras que fueron aprobadas sin monto ni fecha de rescate.

En el contexto actual, será difícil para el gobierno colocar deuda, al menos en dólares, no sólo por la nueva crisis sino porque ya desde antes el gobierno nacional había criticado a los gobernadores que se habían endeudado en moneda extranjera durante el macrismo.