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Entrevistas
05/06/2016

Agustín Rossi

“Macri privatizó la política”

“Macri privatizó la política”  | VA CON FIRMA. Un plus sobre la información.

El ex ministro de Defensa del gobierno de Cristina Kirchner convoca a darle visibilidad “a los verdaderos problemas de los argentinos” y califica como “grave” la decisión de darle autonomía a las Fuerzas Armadas.

 Agustín Rossi tiene en su haber una militancia consecuente en el kirchnerismo, que lo llevó a ser Ministro de Defensa entre mayo de 2013 y diciembre de 2015 y a presidir el bloque del Frente para la Victoria en la Cámara de Diputados. Sin eludir definiciones tajantes, advierte que “los derechos que se pierden después es muy difícil recuperarlos” y urge a “encontrar la mayor cantidad de consensos antagónicos al proyecto que nos plantea Mauricio Macri”.

- En estos días hubo declaraciones de funcionarios y referentes del Gobierno que desnudan una suerte de “macrismo explícito”, ¿cree que esto sincera el proyecto de Cambiemos?

- Las declaraciones de González Fraga desnudan el pensamiento de la derecha política y económica argentina, una muestra explícita de lo que piensan y de cuál es el modelo de país que quieren. González Fraga se enojó porque los argentinos de clase media pretendan comprar un celular, un plasma, una moto o viajar al extranjero. Recuerdo que el ex senador Ernesto Sanz se había enojado con la Asignación Universal por Hijo, dijo que era dinero que se iba por la canaleta de la droga y del juego, cuando en realidad la recibían los sectores más postergados de nuestro país. Si seguimos en esta línea, quizás algún día te levantes y te digan que fue un error tener la universidad pública gratuita y que tus hijos no puedan acceder a estudios universitarios. Esto muestra claramente la idea de un país basado en la desigualdad, que anula la movilidad social ascendente y genera niveles de desigualdad muy importantes. Los privilegios están para muy pocos, para los sectores pudientes. Ellos sí pueden comprarse todo. Que un trabajador, un empleado medio, como dijo González Fraga, pueda adquirir esos bienes o determinados servicios, como ocurrió durante el kirchnerismo, es un pecado mortal para este modelo económico, que no aguanta que el pueblo viva bien. Estamos ante un Gobierno donde los CEOs de las empresa tienen una gran participación. Macri hizo la primera privatización y no nos dimos cuenta: Macri privatizó la política.

- Esto debería reanimar el debate de ideas...

- Hay un debate cultural muy fuerte. Quieren hacer creer a la mayoría que lo que vivimos durante los 12 años de gestión de Néstor y Cristina estuvo mal, que eso no correspondía, que fue un recreo que le dio la vida a los argentinos. Según los que hoy nos gobiernan la vida está hecha para el sacrificio, para el esfuerzo de las mayorías y para que ellos disfruten, los sectores de la clase alta y sus personeros económicos. La idea es que todo lo que gasta el pueblo no lo debe gastar porque debe convertirse en rentabilidad para ellos.

- ¿Está claro para la sociedad que hay dos modelos en disputa?

- El Presidente festejó el 25 de mayo solo, con sus amigos, con una Plaza de Mayo vallada, con una denuncia apresurada de la ministra de Seguridad sobre la existencia de bombas molotov, que después resultó que eran quema coches. Si hay una fotografía que demuestra con contundencia los dos modelos de país, el de nuestro gobierno y el del actual, es esa fotografía del 25 de mayo. Por eso necesitamos que los argentinos defiendan sus derechos. Hay que entender que si los derechos se pierden después es muy difícil recuperarlos. Por eso es fundamental encontrar la mayor cantidad de consensos antagónicos al proyecto que nos plantea Mauricio Macri.

- El jueves pasado las dos CTA y otros sectores sindicales y políticos marcharon contra el veto de la ley anti despidos y las políticas en curso, ¿cree que el gobierno nacional tomará nota de esto?

- En una mezcla de cinismo y sadismo Macri anunció el veto a la ley antidespidos con un acto frente a los trabajadores de Cresta Roja, quienes sin dudas pasaron un momento de incomodidad. Esa ley se aprobó con el consenso de la totalidad de las fuerzas políticas opositoras, lo que significa un dato político de relevancia. La oposición, por primera vez desde la asunción de Macri, logró unificarse en una votación y también por primera vez el macrismo perdió en la Cámara de Senadores y en Diputados. Ha sido este el momento de mayor soledad del presidente Macri desde que llegó al gobierno. Lamentamos profundamente el veto a esta ley. El presidente y su gobierno no leyeron ni se sintieron interpelados por la enorme movilización de las centrales sindicales del 29 de abril, en la que los trabajadores, muchos de ellos seguramente votantes de Macri, le solicitaron que proteja el empleo, que pare los despidos, que defienda el poder adquisitivo del salario. Tampoco advirtió el mensaje de los partidos políticos de oposición, incluso aquellos que en el caso de los fondos buitre lo acompañaron con su voto para configurar ese hecho ignominioso.

Macri está solo. No lee ni interpreta lo que la realidad política le reclama.

- Así las cosas, podemos suponer que los reclamos seguirán en aumento.

Macri está solo. No lee ni interpreta lo que la realidad política le reclama. Queda claro que para Macri la generación de empleo no es un objetivo ni la desocupación un problema. Sus objetivos y problemas están en otro lado, por eso la agenda de preocupaciones de los argentinos no coincide con la del Gobierno ni con la de los grandes medios de comunicación. En los hogares se habla del aumento de precios, de los tarifazos, del desempleo. Es nuestra responsabilidad como dirigentes hacer visibles los verdaderos problemas de los argentinos. 

- ¿Cuál es su opinión sobre la decisión de darle autonomía a las Fuerzas Armadas?

- Va en sentido contrario a lo que hemos planteado durante nuestro gobierno, que tenía que ver con una estructura de las Fuerzas Armadas fuertemente subordinadas al poder político. La decisión del presidente Macri es un grave retroceso en el control civil. Para nosotros la conducción de la política de defensa en un país democrático debe ser civil, donde los funcionarios del ministerio de Defensa ejerzan por delegación del Presidente de la Nación la totalidad de los aspectos que hacen a las decisiones estratégicas en el área y que cada fuerza se encargue del adiestramiento y la formación de cada uno de sus efectivos, y el Estado Mayor Conjunto de las obligaciones cotidianas de cada una de ellas.

- Se han escuchado numerosas quejas por esta concesión a las Fuerzas Armadas, sobre todo de los organismos de derechos humanos…

- El debate tras la recuperación de la democracia en los países de la región sobre cómo debe ser la relación entre el poder político y las Fuerzas Armadas estaba saldado ejerciéndose una fuerte conducción civil de la política de defensa. Todos los militares en nuestro gobierno pasaban por un doble control. Lo que sucede ahora tiene que ver con un gobierno propenso a no confiar en la política y sí en las corporaciones. Además, con la decisión de profundizar la relación con el Comando Sur, la representación del Pentágono en América Latina. Y eso en base a dos políticas: la doctrina de las nuevas amenazas, esto es combatir el terrorismo y el narcotráfico convirtiendo a las Fuerzas Armadas en fuerzas de seguridad bis; y prepararlas para actuar en situaciones de emergencia, transformándolas en una brigada de respuesta rápida. Ambas concepciones se alejan de su misión principal, que es la defensa del país.

- ¿Qué opina de las denuncias contra Cristina Fernández de Kirchner?

- Tenemos que tener tranquilidad de conciencia y espíritu ante las denuncias contra Cristina, es una campaña de descalificación. No es la primera vez que sucede en Argentina ni en América latina. Las causas contra la ex presidenta tienen tres objetivos: sacarla de la cancha, esconder los fracasos económicos del Gobierno y tapar los Panamá Papers, un enorme escándalo de corrupción que involucra al Presidente y a sus familiares y funcionarios.

29/07/2016

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