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Jorge Rachid, sanitarista, docente, sobre todo peronista, salió a desmentir el mito que pretende igualar a Javier Milei con los líderes ultraderechistas del mundo, al señalar la condición de perfecto colonizado del presidente argentino. “Es falso confundir a Milei con las derechas del mundo. Milei no es de derecha ni de izquierda. Es el empleado del mes”, sentenció.
En charla con , Rachid abordó con profundidad los procesos políticos del mundo y en especial de Latinoamérica, que se reflejan en la aparición de gobiernos ultraneoliberales como el de Javier Milei en Argentina, o la persecución judicial y encarcelamiento de líderes populares como Lula o Cristina Fernández.
Rachid es médico, docente en la Universidad Nacional de Lomas de Zamora y en la de Madres de Plaza de Mayo; presidente del Instituto Artiguista; miembro del Instituto Nacional de Revisionismo Histórico Manuel Dorrego y cofundador de la Cátedra Libre de la UBA sobre Filosofía del Arte, Historia y Cultura, en la facultad de Filosofía y Letras.
Escribió libros como “El peronismo pendiente”; “El genocidio social neoliberal”; “La revolución Nacional, una revolución inconclusa”; “Accidentes y enfermedades profesionales”; “La otra historia II”; “Malvinización y desmemorización” y “Pensamiento nacional”, entre otros.
-¿Cuánto de jurídico y cuánto de político tiene el fallo que condena a Cristina Fernández?
-Todos los seres humanos tenemos una sola certeza que es la finitud, es decir algún día nos vamos a morir. Los peronistas tenemos dos certezas: que nos vamos a morir y que vamos a ser perseguidos. Son dos certezas que anidan en la historia misma no sólo del peronismo, sino en general de los movimientos populares en América Latina. Por eso este fallo no viene más que a confirmar aquello que es un viejo dicho paisano que dice: “lo que no te mata te fortalece”. Creo que el embate del enemigo cuya palabra desaparecida en el diccionario supuestamente democrático cuando operan fuerzas enemigas de la patria, no tenemos más que ver a la titular de la Cuarta Flota Laura Richardson amenazándonos o la presencia de la OTAN ampliando la zona de exclusión en el mar Austral Argentino o las 40 bases que harán en la Antártida, la eliminación de los mapas de la Argentina bicontinental Antártica e insular. O sea todo eso no es una cuestión que salga de un repollo ni de la voluntad de tres jueces que son corruptos, que son indudablemente cumplidores estrictos de mandato como lo es hoy la política nacional. Es decir la colonización dela República Argentina y de América es un proceso en marcha desde hace un tiempo. Se ensayó con Macri fuertemente, pero se viene ensayando desde hace casi 80 años.
-¿Este fallo demuestra que una de las grandes deudas que tuvo el gobierno de Alberto Fernández fue la reforma judicial que estaba en la agenda y no se concretó?
-Se lo voy a poner en otro espacio, porque no me gusta culpabilizar sino analizar la política. La democracia que hoy festejamos no es una consecuencia de las luchas del pueblo argentino, que las hubo, pero no coronaron la democracia. Es una decisión del enemigo que decide terminar con la doctrina de la seguridad nacional, las dictaduras militares e incluso disuelve la Cuarta Flota a través del Consenso de Washington que habilita para América Latina los países a tener democracias limitadas al mercado, es decir el mercado como ordenador social. Cuando el mercado se fija como ordenador social como condición excluyente de la democracia no solo es limitada sino que cualquier política de ampliación de derechos y justicia social sale por la ventana. Este proceso iniciado hace 42 años se profundiza con el pacto de Menem y Alfonsín de la Constitución Nacional de 1994 que fragmenta el país en especial en sus políticas nacionales en salud, educación, seguridad social, previsionales y en recursos naturales, creando un mapa de fragmentación que lleva a que haya provincias ricas como Neuquén y provincias muy pobres en función de lo que manejan como recursos otorgados a la discrecionalidad de los gobernadores con parámetros que supuestamente iban a proteger los intereses nacionales, porque los recursos siguen siendo nacionales, pero en esta puja de dispersión el poder real hace que haya constituciones provinciales como la de Jujuy que permite la comercialización del litio y el endeudamiento del país sin ningún tipo de participación a nivel nacional. Entonces uno se da cuenta que esta democracia es muy difícil de modificar porque ha sido cooptada por el poder real y esa cooptación incluye a la Corte Suprema de Justicia a través del lawfare, como hemos visto en América Latina, con la persecución y encarcelamiento de Lula, la persecución del vice de Correa, la destituciones de Celaya, Lugo, los atentados personales sobre Eco Morales y Cristina Fernández, la prisión de empresarios argentinos como los dueños de C5N pero además de aquellos que le hicieron mal a los intereses de los Estados Unidos como Amado Boudou o Julio De Vido, uno de los mejores ministros de Planificación que tuvo la República Argentina en toda su historia. Todo esto, si no se analiza desde el punto de vista de la política internacional como nos enseñó Perón, que es la verdadera política y el resto es cabotaje pueblerino, ni siquiera podemos llegar a entender cómo puede gobernar un paciente dislocado de la realidad como el que hoy gobierna la Argentina.
-Una lectura tal vez superficial de este fallo es que hay un Poder Judicial que está al servicio del poder real. ¿Así hay que leerlo?
-Tomemos el caso del juez (Tomás) Moro de Brasil que encarceló a (Luis Inacio) Lula (Da Silva) y que después fue removido y que posteriormente la Corte Supremas de Brasil tuvo que pedir perdón y anular todos sus fallos. Acá, sobre la persecución al peronismo, la podemos poner en Juan Perón, que fue al exilio 18 años y después tuvieron que restituirle los honores y grados militares; acá se ha llamado traidor a la Patria a San Martín por los intereses ingleses a través de (Bernardino) Rivadavia; se ha llamado traidor a (José Gervasio de) Artigas perdiendo la provincia oriental porque Carlos María de Alvear y Posadas se entregaron al imperio británico intentando que seamos parte de la corona. Podríamos seguir con esto, pero cualquier argentino que defienda la patria es muy probable que sea considerado traidor a la patria por aquellos sectores ligados al poder real. La CSJN ha sido criminal en sus fallos –por amparar el lawfare y, durante la pandemia, por autorizar la apertura de las escuelas ocasionando en menos de tres meses 36 mil muertos cuando habíamos tenido 52 mil en todo un año-. Todo esto hay que decirlo porque si no pareciera que vivimos en un mundo ideal, democrático, donde el enemigo plantea la política binaria sobre las emociones del bien y del mal, el amor y del odio, y esto impide el análisis político profundo de un mundo que ya cambió, giró hacia el Oriente, que es multipolar y que esto que es bueno para el mundo es muy malo para América Latina. Como siempre digo, tengo una buena y una mala noticia: la buena es que ganó Tramp y se aleja la posibilidad de la guerra termonuclear, y la mala es que ganó Trump porque va a ser una muy malo para América Latina.
-¿En qué momento del peronismo llega esta sentencia?
-En un momento revitalizado ante la carencia de ocupación de espacios. Hay peronistas gobernando, hay otros en diferentes ámbitos. Me da la impresión que Cristina ha tomado en cuenta que es una líder, que no totalizaba últimamente al conjunto de las fuerzas nacionales y populares que es mucho más que el peronismo, porque lo que hoy está en juego no es peronismo-antiperonismo ó kirchnerismo-antikirchnerismo. Lo que me parece es que estamos ante una disyuntiva nuevamente de patria o colonia. Los planes estratégicos del Comando Sur y la OTAN sobre América Latina y la posición geoestratégica de la Argentina, explica que la primera decisión de Miley fue darle la espalda a los Brics, la Organización de Cooperación de Shangai, el Nuevo Banco de Desarrollo, al Banco Asiático de Infraestructura e Inversión, a la Ruta de la Seda terrestre y marítima, y esto nos aleja del mundo como se está viendo en las votaciones de Naciones Unidas donde la Argentina vota sola en contra de los derechos de los pueblos originarios. Los mapuches van a ser declarados enemigos de la patria en cualquier momento y, por supuesto, los peronistas saldremos a defender este sincretismo de subjetividades que incluye a los pueblos originarios, los criollos e inmigrantes, los negros y los mulatos. Pero esto sucede en el mundo y la mentira, la ocultación o la tergiversación de la información hace profundamente ignorante, por falta de información, al conjunto de los argentinos.
-¿Qué rol han cumplido los medios en este proceso judicial?
-Hay mucho escrito en el mundo. Se está discutiendo la democracia justamente por eso. El primer capítulo del libro “La Revolución de los Colores” habla de actuar sobre las emociones a través de las redes y los medios hegemónicos. El atraso de las emociones impide el despliegue del pensamiento crítico. ¿Cuál es la idea del colonizador? Borrar la identidad y la memoria de los pueblos. ¿Es casual que una de las decisiones más “brillantes” de Macri haya sido cambiar los billetes de la historia por imágenes de pajaritos y ballenas? No fue casual o porque le guste la naturaleza. Cumplió órdenes, como hoy las cumple Milei, que los llevan, después de darle la espalda a los BRICS, a insultar a Lula (Da Silva), a (Luis) Petro y a (José Manuel) López Obrador con la necesidad estratégica de que no vuelva a reconstruirse el Unasur que es lo que más daño le hizo a los intereses de los EE.UU. Ahí fue cuando volvieron a poner a flote la Cuarta Flota de la general Richardson, que nos viene a amenazar con que no va a permitir las inversiones rusas y chinas. O sea, le han dado la espalda a 6.500 millones de personas, aquellos que se dicen cultores del libre comercio. Es realmente una contradicción y estamos encerrados en el mundo occidental y cristiano, esa visión tan occidental como Japón y tan cristiano como Israel, que son 1.500 millones de personas atados a una ofensiva sobre Eurasia, que ha generado tres guerras, que posiblemente Donald Trump las pare porque están drenando las economía de Europa occidental que está tomada de rehén y de los mismos EE.UU. que ha puesto ingentes esfuerzos en su producción de armas para darle a Ucrania, pero lo ha sacado de otras áreas de la seguridad social y del trabajo genuino. Por lo tanto Trump se va a plantear levantando aranceles, medidas proteccionistas porque es falso confundir a Milei con las derechas del mundo. Milei no es de derecha ni de izquierda. Es el empleado del mes. Las derechas del mundo son racistas, xenófobas, homofóbicas, todo lo que tiene que tener una derecha antisocial, pero tienen en el fondo un sentimiento patriótico. Ni (Marine) Lepen en Francia ni (Giorgia) Meloni en Italia dejan de reconocer las identidades de sus países. Acá tenemos un desgobierno que está dispuesto a dividir el país en las cuatro zonas económicas como figura en la ley de Bases. No nos olvidemos la famosa frase de (Alfredo) Cornejo hace seis años cuando dijo: “no necesita Mendoza de la Argentina para seguir creciendo”. Esto está sacado de aquello que hoy se discute en el mundo y que a la Argentina no llega como información.
-Con Cristina proscripta, ¿qué panorama se abre al Partido Justicialista de cara a las elecciones de medio término?
-Esa pregunta me remite a responderla con una parábola que decía “se murió Perón, se murió el peronismo”. El peronismo es una construcción de pensamiento americano, mestizo, moreno, criollo, inmigrante, profundo, que nos diferencia por aquello que dice el Papa Francisco, que tiene que ver con nuestras raíces de gestación de los modelos sociales solidarios biocéntricos, que tengan como eje de construcción del modelo a los seres humanos y la naturaleza. Esa construcción del pensamiento no es solamente un partido o una figura. Cristina es, quizás, una de las principales estadistas de Latinoamérica y una de las 20 del mundo por su visión y su capacidad. Pero eso no significa que sea totalizador de las expectativas del movimiento nacional y popular que es mucho más amplio que el peronismo. Y si no, hay que fijarse en los 161 votos que pedían derogar el veto, pero todo el mundo se ocupó de los 84 que lo impidieron. De esos 161, 99 eran nuestros, o sea que hay fuerzas nacionales que siguen teniendo a la patria como destino común de los argentinos y no la entrega de soberanía como está sucediendo en la privatización de todos los instrumentos que construyen soberanía desde Arsat, YPF, CONEA, INTI, CONICET, el Instituto Malbrán. O sea que estamos ante un proceso de disolución colonizadora donde hay que cambiar el eje de la lucha, porque las luchas sectoriales están muy bien para la defensa de las identidades circundantes y de las circunstancias locales, como pueden ser las economías regionales, pero es mucho más importante que la Matria Grande latinoamericana y la Argentina sigan viviendo. El enemigo tiene ese planteo de fragmentación por dos razones: debilitar la Argentina para evitar la reconstrucción del Unasur y facilitar el saqueo fragmentando la argentina en las cuatro zonas económicas. Por eso Milei le quiere permitir a las fuerzas armadas de los Estados Unidos controlar el río Paraná, por eso Axel Kicilof se compromete a hacer el canal Magdalena para evitar que siga yéndose la producción argentina sin control al puerto de Montevideo, y por eso Milei quiere entregarle el puerto de Ushuaia a la Cuarta Flota junto con la OTAN. Esta es la claudicación nacional de la cual muchos de nosotros, tenemos como eje permanente de lucha.
-En 1996 usted escribió El Peronismo Pendiente. ¿Qué pasó en el peronismo desde entonces a la fecha? ¿Cómo se titularía un nuevo libro sobre el peronismo hoy?
-Se llamaría “El peronismo pendiente” (Risas).
-¿Cuántas cosas pendientes tiene el peronismo?
-Se lo voy a resumir en la historia del PRI de México que la viví muy de cerca como otros compañeros exiliados. En 1912 Lázaro Cárdenas gana la revolución. Le preguntan los periodistas ¿con quién va a gobernar?, les dice “con mi General”; ¿cree que está capacitado?, le preguntan, y Cárdenas tira la famosa frase que dice: “bueno, no sé si tan capacitado como para recibir un cañonazo o un millón de dólares”. El PRI gobernó 70 años consecutivos en México desde una revolución nacional y popular que echó las bases del México moderno pero que se fue debilitando con el correr de los años hasta que después de 70 años el PAN (Partido de Acción Nacional) de (Vicente) Fox y las derechas se posicionan en el poder y transcurren tres períodos de derechas en México. En ese momento López Obrador funda el Partido de la Revolución Democrática y se presenta tres veces a elecciones: dos veces pierde y una vez gana en la ciudad de México; y gobernando la ciudad de México se da cuenta que le queda corta la cincha y construye Morena, y con Morena gana la presidencia de la Nación y gobierna seis años, identificando como principal enemigo a las redes y los medios. Todos los días durante seis años, López Obrador, personalmente a las ocho de la mañana, destruía las operaciones de prensa de la agenda del enemigo y construía la propia, nacional y popular. Esto lo llevó a terminar su mandato, que no puede ser reelecto, y que gane su sucesora Claudia Sheinbaum Pardo con el 70 por ciento de aprobación. Cuando se hace la manifestación de despedida frente a un millón de mexicanos en la Plaza de México, López Obrador les dice “no me aplaudan ni idolatren; no he hecho otra cosa que cumplir con el mandato de Lázaro Cárdenas y la Revolución del PRI”.
-¿Cómo analiza el casi año de gobierno de Javier Milei?
-Es el inicio de la entrega y la devastación. Encima con un nuevo endeudamiento que es la amputación de soberanía. Usted me preguntaba ¿qué pasa hoy con el peronismo? La verdad, lo veo con debilidades doctrinarias porque, desde mi punto de vista, es “con Milei nada” o vamos hacia un proceso de claudicación nacional. Me parece que la consigna sigue siendo Patria o Colonia, o Liberación o Dependencia. Aunque parezca nostálgico o viejo, esto está pasando en el mundo. Las democracias están en crisis, el capitalismo financiero de los Fondos Buitres es brutal e inhumano y está siendo denunciado por el Papa Francisco y también está siendo denunciado por lo que hoy nadie leyó, pero que todo el mundo debería leer, que es el Acuerdo de Kazán, del BRICS más 36 países, donde remontan, en el marco de Naciones Unidas, la necesidad de apuntalar las soberanías nacionales y la justicia social con procesos comerciales no extorsivos y con herramientas financieras que permitan el desarrollo autónomo de los pueblos.
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