El diputado provincial de Unión por la Patria y ex secretario de Energía de la Nación, Darío Martínez, cuestionó el proceso de privatización de las represas y la exclusión de Río Negro y de Neuquén en la toma de decisiones. Se mostró de acuerdo con la radicación de la planta de GNL en Punta Colorada, Río Negro, y afirmó que el conflicto del sector docente de la provincia fue alimentado desde la Legislatura.

En diálogo con Va Con Firma, Martínez también se refirió a las incipientes pintadas callejeras que aparecieron en los últimos días, que hacen referencia al Partido Justicialista y que incluyen su nombre. “Hay vecinos que nos prestan los paredones y nosotros hablamos en ellos”, dijo.

-El gobierno nacional acaba de anunciar la concesión de las represas, pese a las declaraciones de los gobiernos de Neuquén y Río Negro de que sean tenidas en cuenta sus posiciones. ¿Cuál es su opinión?

-La opinión es la misma que cuando fui secretario de Energía. Lo que teníamos que hacer es armar una sociedad entre el gobierno nacional y las provincias. Para hacer eso había que modificar la ley, y por eso presentamos un proyecto de ley. Porque muchos, acá, plantean lo que hay que hacer pero no hacen lo que se debería. No he visto a ningún diputado nacional del MPN presentar un proyecto de Ley. Sí al diputado nacional Pablo Todero y a los senadores Silvia Sapag y Oscar Parrilli presentando una modificación a la ley actual para permitir la sociedad entre Nación y las provincias. ¿Qué ejemplo tenemos para afirmar eso? La recuperación de YPF. Nación le dio acciones a la provincia, por eso hoy tenemos sentado en el directorio como premio mayor y cobrando una fortuna al ex gobernador Omar Gutiérrez. Es una sociedad entre la Nación y las provincias, y ahí se resuelve todo. Eso es lo que había que hacer. No se hizo. La ley no avanzó porque no tuvimos los votos suficientes. Luego vino este gobierno y avanzó con la ley Bases, que le da la delegación a Milei para privatizar. Esa ley Bases la votaron lo diputados del oficialismo neuquino, esos mismo que plantean que querían ser parte, pero le dieron la herramienta a Milei en la ley Bases y en el DNU (70/2023) para que tome esta decisión. ¿Qué hace el gobierno nacional con la delegación de facultades que le da la ley Bases, artículo 4 inciso d? Crear sociedades anónimas, poner las acciones en cabeza de ENARSA y ahora en el Boletín Oficial publica un llamado a licitación internacional para vender esas acciones. Pero, mientras, llama a los gobernadores para la foto y les dice que les va a mostrar los pliegos; en realidad lo que está haciendo es privatizando las represas, lo que los neuquinos veníamos sosteniendo que no había que hacer: no privatizar y armar la sociedad, para cobrar en especies, para quedarse con parte de las regalías. Eso era la mejor decisión para la región. Lamentablemente eso no pasó y hoy lo que tenemos es un presidente que las va a privatizar. Y ayer, insólitamente, en la Legislatura neuquina se saca una declaración felicitando al gobernador ¡por haber negociado mal! Le dio los votos para la ley Bases, le frenó la impugnación del DNU por ausencia de sus legisladores, y no le dieron nada. Es lamentable porque era un momento en que podíamos haber sido parte de esa decisión. Después, había mucho para hacer. Soy un convencido que cobrando en especies, podíamos promocionar regiones industriales y general valor agregado a nivel local. Ya quedamos afuera. Aunque el gobierno nacional tenga la mejor intención, ya no lo va a poder hacer porque una vez creada la sociedad anónima, después no puede regalar acciones.

-¿Esto impactará también en el tema tarifas?

-Lo que va a impactar en el tema tarifas es la política energética del gobierno nacional, que es pésima. Lo que ha establecido es dolarizar el costo de vida. Hoy el principio rector de la política energética es la máxima rentabilidad del sector, antes era el autoabastecimiento. Con lo cual van a cobrar lo que quieran, vamos a precios internacionales. Está dolarizado el costo de vida; la energía se paga en dólares pero los sueldos no están dolarizados. Y además, el poder adquisitivo se cae, porque de tus ingresos tenés que destinar un mayor presupuesto para pagar la energía, sea gas, electricidad o el combustible. Ese porcentaje adicional que se destina a eso, se deja de derivar a otros bienes y servicios, con lo cual se genera una recesión que se ve mes a mes. Este mes se cayó 11 por ciento la coparticipación nacional, en IVA y Ganancias. Hay menos actividad en Neuquén, o sea percibimos menos. Pero no es lo que percibe el Estado, sino cómo se deprime el mercado interno y eso genera una ola masiva de despidos en el sector privado, porque el panadero que debe decidir entre pagar el gas o el sueldo de un empleado, va a echar al trabajador para poder pagar el gas y seguir produciendo. La política energética del gobierno nacional es la figurita que dice lo que quieren los sectores económicos; Caputo es el gran gerente de ellos, y bajo el principio de máxima rentabilidad le va a ir muy mal a toda la gente. Y además, acaban de liberar el precio de la garrafa. La política energética de Milei es tan mala que en el verano vamos a tener grandes problemas. Queda disfrazada porque en esta depresión no hay demanda de energía, que cayó un 8 por ciento. Un país que va para adelante, demanda más energía. Recordemos que a Macri, aún con la industria deprimida por no hacer las obras de mantenimiento, hubo un enorme apagón en toda la región. Lo que habíamos crecido en planificación, desarrollo y obras de infraestructura, ahora con este absolutismo de eliminar la obra pública, que ya la estamos pagando por no haber puesto la planta compresora del gasoducto Néstor Kirchner, tuvimos que poner 500 millones de dólares adicionales por inoperantes, para importar gas más caro en vez de sacar gas de Vaca Muerta a 3,50 dólares. Lo mismo con la reversión del gasoducto Norte que por no invertir 300 millones de dólares, tuvimos que salir a comprar a Bolivia a 12 dólares el MBTU. La inoperancia de este gobierno que bajo la política de que el Estado se tiene que retirar, está haciendo muy mala gestión, y eso se está viendo en Neuquén.

-¿Cómo vio la decisión del gobierno nacional de llevar la planta de GNL a Río Negro y no a Bahía Blanca, como lo establecía ese viejo proyecto?

-Es la lógica. Si se revisan mis declaraciones, siempre dije lo mismo. Son 120 kilómetros menos de caños, y no hay ninguna localidad en la traza de acá a Punta Colorada. Para quien tiene que tomar la decisión, era bastante lógica que sea esa. Después se disfrazó con toda una discusión política, pero quien tenía que tomar la decisión en función de los costos de hacer en un lugar u otro, era mucho más ventajoso hacerlo en Río Negro.

-Pero quedan dudas, a partir de la declaración de Milei de optar por Río Negro para no darle el proyecto a una provincia gobernada por un comunista…

-Milei es como “Rolo” acá, que después sale y aplaude que vamos a participar del manejo de las represas cuando lo dejaron afuera de todo. Milei aprovechó la ola para decir eso, pero la realidad es que instalarla en Río Negro era lo lógico. Lo iban a hacer YPF y Petronas porque es mucho más bajo el costo de la infraestructura que demanda.

Gentileza

-El gobierno nacional ha presentado como un gran logro la baja en el índice de inflación. ¿Es real, o es producto de la recesión y la caída del consumo?

-Lo vengo diciendo desde el 10 de diciembre: este ajuste brutal no es la salida para la Argentina. Hay una recesión pensada y diagramada para que así sea, que va a llevar a un nivel de desocupación muy alto para bajar el costo laboral, pero lamentablemente hay una actividad que ya, con la misma recesión, se empieza a morder la cola. En Neuquén, por el crecimiento de la producción hidrocarburífera, el incremento de recursos sigue estando por encima de la caída de la coparticipación nacional, pero este mes cayó un 11 por ciento. Eso significa que hay un 11 por ciento menos de actividad. Esta recesión está dejando mucha gente afuera. Se hizo mucha prensa con los despidos en el sector público por la presencia de ñoquis, pero los despidos a mansalva se dan en el sector privado. En un escenario donde no hay consumo, más la ausencia de obra pública, el cuento de Milei no tiene un final feliz para la mayoría de los argentinos. Hay un modelo económico que está desorganizando la vida de los argentinos, en el que les va bien a muy poquitos. Por haber logrado un precio internacional del combustible, las 4 o 5 petroleras están muy contentas. Pero la inversión en Vaca Muerta que se iba a hacer con o sin RIGI, hoy la está bancando todo aquel que va a cargar combustible a un surtidor. Por eso, a 4 o 5 les está yendo muy bien, pero a millones de argentinos, muy mal. Y esa definición de política económica, en Neuquén también impacta, porque más allá que a la industria petrolera le vaya muy bien y el Estado tenga mucho dinero pero mal administrado, la realidad es que la mayoría de los neuquinos no trabajan en el petróleo.

-El Congreso Nacional rechazó el pedido de Milei de asignación de 100 mil millones de pesos para gastos reservados de la SIDE. ¿Es una buena señal del Congreso?

-Creo que es una buena señal, depende de dónde se lo mire. Ahora va a ir al Senado. Si miramos Neuquén, sólo el diputado Pablo Todero rechazó se DNU, y está haciendo un gran laburo planteando lo que realmente es importante para Neuquén, así como fue el único que presentó un proyecto para crear la sociedad entre Nación y provincias para administrar las represas. Es una buena señal haber frenado eso que es muy malo, pero viendo cómo votaron los diputados de Neuquén, vemos que el único que votó en función de lo que creemos que es correcto, fue el diputado Pablo Todero. Rolo le ha dado los votos a Milei, y después viene acá y dice que no está de acuerdo con Ganancias, pero manda a votar allá, le pide a Lucila Crexell que vote para desempatar. Por suerte hay legisladores de otras provincias que no son tan obsecuentes con el gobierno nacional, y eso es una buena señal.

-La Legislatura ha quedado en medio del conflicto docente, con la sanción de la ley de presentismo y ahora está por declarar a la educación como servicio esencial. ¿Cuál es su posición y como piensa que va a terminar esto?

-Este conflicto lo generó la Legislatura, cuando no había tal conflicto. Lo dije el primer día, que tenían que sentarse todos los actores. Ofrecí a la comisión de Educación que venga la ministra y podamos discutir este tema. Sacamos una ley por la ventana, irresponsablemente. Lo dije ‘falta Yayo y es legislemos sin saber’. Sacamos una ley sin tener idea de cuáles eran los indicadores del porcentaje de ausentismo, cuál es el seguimiento que se les hace a los docentes que faltan. ¿Esa ley que generó? Que los chicos hoy estén sin clases. Y no van a ir los 30 diputados que aprobaron irresponsablemente esa ley para que se abran las escuelas y den clases cuando no estén los docentes, no lo van a resolver así. Y seguimos tirando leña al fuego. Ayer sacamos una declaración solo para irritar el conflicto, porque la ministra dijo a la mañana que van a descontar los días de paro y acá sacamos una resolución pidiendo que se descuenten los días. Sin diálogo el conflicto no se resuelve. Sucede que el diálogo debió haber ocurrido antes que se sancione la ley. Luego sacó un decreto el gobernador desarmando prácticamente la ley, lo que es una provocación innecesaria. Lamentablemente hoy tenemos a los chicos sin clases y un sistema educativo que sigue sin resolver para que haya clases. El otro gran problema es en qué formamos a los chicos en Neuquén. En febrero, Oldelval se va a conectar para tener 300 mil barriles más de petróleo, hoy estamos en 400 mil. Para producir esos 300 mil barriles más, hacen falta un montón de técnicos ¿los está formando el sistema educativo?, definitivamente no. La industria no espera, entonces los van a traer de afuera y entonces eso demandará una cama más en un hospital, un banco más en la escuela, una casa más, y ese sector termina desplazando a los neuquinos. ¿Por qué no nos sentamos y vemos cómo formar a los chicos de cuarto, quinto y sexto año de las escuelas técnicas en lo que demanda la industria? Eso no se discute porque no hay un ámbito, ni en la comisión de Educación, ni en el ministerio. Tampoco esperábamos mucho más, porque siguen gobernando los mismos. En la sesión decían que vinieron a hacer las cosas distintas, pero mandan al ministro Jorge Tobares a la mesa de negociación, siendo que Tobares fue ministro de Jorge Sobisch y también lo echaron. Es muy difícil que con las mismas ideas y las mismas personas los resultados sean mejores, y Neuquén está para mucho más. Uno lamenta porque estamos perdiendo una gran oportunidad para un Neuquén mejor para todos.

-Han aparecido algunas pintadas callejeras con su nombre enmarcado en un proyecto para las próximas elecciones, de medio término o para las provinciales del 2027. ¿Hay algo de eso?

-No. Nosotros tenemos algunos vecinos que nos prestan los paredones y hablamos a través de ellos. Esos paredones dicen que no queremos más tarifazos, que queremos una política energética que tenga que ver con el ingreso no con la máxima rentabilidad del sector, queremos diversificar la producción. Y son compañeros que quieren que en sus casas expresemos las ideas desde el peronismo y tenemos que decirle eso al neuquino. Nosotros tenemos una gran falencia en llegar con nuestra propuesta de provincia a la cabeza del neuquino. Muchas veces nos han dicho que las propuestas son buenas, pero votan entre el que gana o el que puede llegar a ganar, pero siempre es lo mismo. Esa trampa de que cambie lo suficiente para que no cambie nada la tuvimos entre Felipe (Sapag) y (Jorge) Sobisch, y ahora entre los dos de Jorge, Omar (Gutiérrez) y Rolo, que son lo mismo. Por eso el sueldo más grande en el Estado, de todo el país, se lo dio el gobernador actual al anterior (en el directorio de YPF con un salario de 70 millones de pesos mensuales) para confirmar que es más de lo mismo, pero tienen esa virtud de que cambien lo suficiente como para que no cambie nada. Lo que estamos intentando a través de nuestro mensaje desde el peronismo es contarle a la gente que se pude administrar mejor.

-¿Y quién va a llevar adelante ese proyecto? Me refiero a ponerle nombre al candidato.

-El debate del formato de provincia lo queremos discutir en la Legislatura, pero esta Legislatura es una escribanía. Somos cinco los que tratamos de aportar ideas, nos dan la razón pero después nos matan con los votos. Así se está legislando, todas salen mal. Recordemos cuando aprobamos la emergencia carcelaria, votamos un endeudamiento por 50 millones de dólares, entonces le pregunté al ministro ¿por qué 50 millones y no 80 o 30? ¿porque a esa tasa de interés? Y la respuesta fue “no sé”. Entonces a los 15 días el ministro de Economía mandó una modificación diciendo que no eran 50 sino 80 millones de dólares. Así de irresponsable estamos legislando, lamentablemente. Ese debate debería darse acá y no se está dando. Bueno, seguramente lo deberemos dar en las unidades básicas del peronismo, pero seguramente del resto de las fuerzas políticas, los sellos los tiene comprados el Rolo. Creo que será el peronismo, la izquierda, o Libres del Sur, porque quedan muy pocos porque el resto están adentro de un gobierno que todo lo que siempre dijo que no había que hacer, ahora lo está haciendo.

-No me contestó si va a ser candidato a diputado nacional o senador.

-Para eso, todavía, faltan tres años.