El jefe del departamento de Sismología del Inpres (Instituto Nacional de Prevención Sísmica), Gerardo Sánchez, dijo que "Neuquén tiene una sismicidad natural. Lo que resalta en la actualidad es que quizás la gente de la región no estaba con conocimiento porque no se daba con frecuencia la sismicidad. Pero no vamos a descartar que la frecuencia, no solo en las últimas semanas, sino en los últimos cinco años, es inusual".

En una entrevista con , el geofísico explicó que no es posible manejar una sola hipótesis sobre el origen de los sismos en Sauzal Bonito y sostuvo que la "sisimicidad disparada" por el fracking en una zona que ya cuenta con fallas naturales "podría ser una posibilidad, claramente".

Destacó que para saber fehacientemente lo que está ocurriendo en el lugar hay "urgencia" en concretar la instalación de los sismógrafos que prometió el gobernador en marzo pasado. Aseguró que el proyecto "está bastante avanzado" y afirmó: "no veo irreal que para este año estén instaladas esas 14 estaciones".

-Desde el 16 de julio pasado la Red Geocientífica Chile ha registrado en la zona de Sauzal Bonito una gran cantidad de sismos de baja intensidad, superiores a un grado, y a una profundidad de 3.500 metros aproximadamente. ¿Cuál es el registro que ustedes tienen sobre estos eventos y qué hipótesis manejan?

-Nosotros partimos de los protocolos y estándares con los que publica sismicidad el Inpres en toda la Argentina. Son sismos de magnitudes de 2.5 en adelante. En esa consideración, en el periodo que usted me consulta en realidad el primero es el 12 de julio en Neuquén. Sin embargo este sismo es más bien cordillerano y de profundidad intermedia, está alrededor de los 170 kilómetros de profundidad. Dentro de los superficiales, el primero que publica el Inpres en julio es el del 13 de julio, a las 8.52, con magnitud de 3.2, a 7 kilómetros de profundidad. Tenemos reportes de percepción de la población.

-¿En dónde se localizó?

-Cerca de Añelo. A partir del 13 de julio en adelante, hasta el 22 de julio, se han publicado 16 sismos en la página web (hasta fines de julio). Los cálculos dan magnitudes muy superficiales. Hay cálculos de error de 5 kilómetros, pero el error real es bastante mayor, por eso es que está la leyenda del Instituto que hasta que se instale un mayor número de estaciones, que es la principal necesidad a la hora de tener información certera, estamos manejando errores que pueden ser de hasta 15 kilómetros y eso hace que sea muy difícil identificar una fuente en particular, asociarlo a alguna actividad en particular. La principal necesidad es tener un monitoreo suficiente para tener una precisión cuyo error esté por debajo de los 5 kilómetros.

-La Red Geo Chile habla de más de 50 eventos y ustedes tienen registrados 16. ¿A qué se debe esa diferencia?

-Hay que diferenciar varios escalones. El primero es que Inpres en toda la Argentina reporta a partir de 2.5 porque es el umbral que se ha comprobado con el tiempo, a partir del cual generalmente percibe la población. Esto no quiere decir que no se haya registrado sismicidad de menor magnitud. San Juan está cubierto de estaciones y ahí se puede obtener hoy por hoy la misma precisión en un sismo de 1.5 que un sismo de 5, porque está rodeado de 12, 14 o 15 estaciones. En el caso de Neuquén, en este momento se cuenta con las estaciones de IRIS, hay una estación en Caviahue, que es más cercana que las del IRIS, y también hay dos estaciones que se lograron instalar a través de colaboración con el grupo de sismología del Conicet que trabaja en San Juan. Una está particularmente en Sauzal Bonito y la otra en Añelo, y nos permiten confirmar si se detectó un sismo y a partir de ahí mejorar mucho la certeza de la ubicación, sin todavía llegar a los estándares que queremos.

-La población sí percibe los movimientos por más que sean de magnitud menor a 2.5.

-He visto varios reportes de que sí pero hay una cuestión que estamos tratando de mejorar y es la comunicación con el Inpres. Hay varios reportes donde muchas veces las personas sugieren o aseguran percibir un movimiento y después cuando lo constatamos con los datos de estaciones cercanas no vemos razón alguna, ni en los registros se supera cierto umbral en los cuales empieza la percepción de las personas. No significa que no lo hayan percibido, significa que no hay una comunicación en donde nosotros lo podamos constatar. No se niega que puedan haber percibido sismos de menor magnitud, sobre todo en Sauzal Bonito, que está en pleno cauce de río, lo cual tiene un suelo que amplifica. Entonces lo que hace falta ahí, en este caso, para estar más acorde a la percepción de la población, es una mejor comunicación de la población con el Inpres. La página web del Inpres tiene varias herramientas donde las personas pueden reportar cada vez que perciben un sismo. No es complicado ingresar, en la parte superior hay una leyenda en verde que dice "Reportar un sismo percibido no publicado". Con un click ahí, las personas van a poder notificar al Inpres y a partir de ahí empieza un proceso de búsqueda y confirmación de la percepción.

Le digo de estos controles porque, sobre todo en Sauzal Bonito, el umbral de la percepción de ruido también se supera con autos o camionetas que puedan pasar por la ruta de tierra. Esto también lo he comprobado a través del instrumental. Es decir, hay veces que hay sismos reportados, y difundidos por la Red y por algunos medios, en ciertos horarios y cuando he revisado los datos se veía en ese momento algún vehículo justo pasando por el sismómetro. Después hubo otros casos, a mitad de la noche, donde se publicó un sismo de magnitud 3, a unos 20 kilómetros de Sauzal Bonito, sin una noticia de referencia en las últimas 24 horas, lo cual hace un poco confuso el tema de la confirmación de la percepción. Por eso es necesario todo este tipo de comunicación e interacción con toda la tecnología y los algoritmos que ya estamos aplicando y que Neuquén no es la primera provincia en donde se aplican, sino que se viene trabajando hace décadas para mejorar esta parte.

-¿Qué hipótesis tienen ustedes sobre el origen de los movimientos que se registran en esta región?

-No manejamos una sola hipótesis. Es un problema complejo y manejar una sola tendencia es complicado porque justamente las otras hipótesis tienen fundamento. Vamos a casos específicos. Una de las hipótesis, la más popular en este momento, es que la fracturación hidráulica estaría induciendo sismicidad. Partiendo de la definición de induciendo, estaríamos un poco sesgados porque inducir implica una generación propia de sismicidad en ausencia de fallas geológicas. Esa definición entonces no se podría aplicar porque es como que la actividad en sí genera sismicidad. Esa hipótesis no la estamos manejando. La posibilidad también está en que sea una sismicidad disparada, es decir, que existieran fallas geológicas en la región, y que quizás la actividad de fracturación hidráulica las estuvieran, no sé si decir, acelerando. Cuando uno habla de sismicidad disparada es que hay una sismicidad que era latente de ocurrir, que quizás no estaba con la misma frecuencia pero la actividad ha estado acelerando el proceso. Eso podría ser una posibilidad, claramente. Después está el hecho histórico, en 1963, a 20 kilómetros al Oeste de Añelo y al norte de Sauzal Bonito, hay registros de un sismo de 4.1 superficial. En 2009, al sur de Chos Malal, hay varios registros de sismos. En 2010, 2014, en lo que sería la cuenca neuquina, hay sismos de 3.3, 3.9, 4.6. Ya está en los mapas desde hace tiempo que Neuquén es una zona sísmica. La parte de centro- este es zona sísmica 2, y la parte centro - oeste es zona sísmica 1. Eso significa que ya se conocía que había una peligrosidad sísmica considerable. Volviendo a las hipótesis, sabemos que Neuquén tiene una sismicidad natural. Lo que resalta en la actualidad es que quizás la gente de la región no estaba con conocimiento porque no se daba con frecuencia la sismicidad. Pero no vamos a descartar que la frecuencia, no solo en las últimas semanas como me pregunta usted, sino en los últimos cinco años es inusual. Por eso no hay una hipótesis, como ser completamente natural, ser disparada, ser inducida, o si la actividad que la disparó fue particularmente la actividad hidráulica o fue la inducción en pozos sumideros, o fue la interacción en ambas, o qué tal si están ambas actividades pero no hay ninguna falla activa cercana entonces no existe sismicidad... Hay muchas preguntas que no estamos en condiciones de resolver. Por eso la urgencia y todo el trabajo que se ha estado haciendo entre el Inpres y el Ministerio de Energía y Recursos Naturales, en conjunto con otras instituciones, para tratar de llevar a cabo la instalación de estaciones. No simplemente es comprar e instalar, sino que como está abocado a ciertos objetivos muy puntuales, requirió un diseño específico, para que, una vez que esté instalada, poder cumplir con todos los requerimientos, desde una necesidad social, una publicación inmediata en menos de cinco minutos. Particularmente en Neuquén, como tratamos de encontrar la raíz del problema, buscamos que esos datos tengan precisiones con errores menores a los 5 kilómetros. Ese es un requerimiento adicional que se ha planteado en el diseño de esta red.

-Si la zona tiene fallas naturales, ¿no debería lanzarse una advertencia específica con respecto a realizar el fracking ya que podría activar esas fallas?

-Lo que pasa es que hay muchas consecuencias en todas las decisiones. Las fallas naturales se pueden clasificar de diferentes maneras. Hay fallas naturales que son pasivas, otras que son activas. La pasiva es como que no va a reaccionar y depende mucho de la distancia y la profundidad a la que esté. No todas las fallas reaccionan de la misma manera, no todas tienen una cuestión de fuerzas acumuladas al borde de la ruptura, entonces no porque exista una falla mapeada en sí, que puede haber tenido actividad hace 25 millones de años, significa que va a tener actividad en este momento. Partiendo de todo este tipo de posible actividad disparada, el tema de la fracturación hidráulica no sería el primer fenómeno del cual hubiera antecedentes. Los hay en otros países, como China o la India.

-El gobernador de Neuquén anunció en marzo de este año la instalación de 14 sismógrafos en la zona, en un trabajo conjunto con el Inpres y el Conicet. En lo que va del año no se instaló ninguno. ¿Tiene información si se avanzó al respecto?

-El proyecto que contempla a todo el monitoreo en la provincia incluye a más de 20 (estaciones) pero hay un núcleo que es el importante para microsismicidad. Para poder realizarlo lo más pronto posible se decidió realizarlo en dos etapas y la primera (contempla) de entre 14 y 16 estaciones. Yo trabajo mucho en la parte técnica y he trabajado anteriormente en el diseño de la red para el monitoreo y le puedo decir que eso está bastante avanzado. No sé en qué parte de la adquisición del instrumental, en particular. Pero sí le puedo decir que hay una continua comunicación con el Ministerio de Energía y Recursos Naturales de la provincia de Neuquén. Están gestionando todas las variables para tratar de adquirirlos .Yo no veo irreal que para este año estuvieran instaladas esas 14 estaciones.

-¿Es posible instalar 14 estaciones en seis meses?

-Claro que sí. En este caso lo que más podría demorar es el tema de que lleguen los instrumentos de afuera del país, pero lo que refiere al proceso de instalar... Hay que hacer el control de calidad una vez que lleguen los instrumentos, verificar todas la condiciones de garantía y de funcionamiento y la instalación sí se puede lograr de aquí a fin de año. Lo mío es la parte técnica pero sé que hubo varias reuniones, hay mucho trabajo al respecto y se está avanzando lo más rápido posible.