La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) realizó este jueves (04/07) un nuevo paro nacional el jueves y una olla popular frente a la Casa Rosada, contra las políticas de hambre y ajuste del Gobierno nacional en medio de la segunda ola de despidos.

Desde el inicio del gobierno de Javier Milei hasta mayo eran más de 25.000 los trabajadores que perdieron sus puestos en la administración pública. En esta última tanda de la primera semana de julio, ATE lleva contabilizados 2.300 contratos que no fueron renovados aunque creen que la cifra puede acercarse a los 5.000. Muchos de estos contratos tienen varios años de antigüedad. Algunos de ellos superan los 20 años, lo que da cuenta de la irregularidad de muchas situaciones en el Estado.

La mayoría de ministerios se han visto afectados, pero el recorte más drástico ha sido en la ex cartera de Mujeres, Géneros y Diversidad. “Del total de 1.100 empleados que encontramos el 10 de diciembre, el 85% ya fue eliminado”, confirmó el lunes en rueda de prensa el portavoz presidencial, Manuel Adorni. Agregó que “240 empleados fueron eliminados en la primera etapa [31 de marzo] y 685 en la segunda etapa. Bajo esta Administración no hay lugar para gastos superfluos con el dinero de los contribuyentes”.

La Línea 144, que depende del ex ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad (MGMyD) asiste de manera telefónica a mujeres y personas LGTB en situación de violencia, fue vaciada y quedan solo 71 personas para todas las guardias, las 24 horas de cada uno de los días del año y en todo el país.

Además, en la última semana tomaron notoriedad los despidos en el Hospital Posadas, un importante centro médico de referencia situado en el populoso Conurbano que rodea a la capital federal (en El Palomar, perteneciente al municipio de Morón, a pocos kilómetros de la ciudad de Buenos Aires), que tiene un área de influencia de unos seis millones de personas.

Entre los 86 trabajadores despedidos hay endocrinólogos, biólogos moleculares, encargados de detectar leucemia, nefrólogos y emergentólogos.

En el Instituto Nacional de Tecnología Industrial, INTI, un organismo clave en desarrollo y regulación tecnológica, fueron cesanteados 288 contratados.

Estos despidos son una evidencia del desprecio manifiesto por las políticas que apuntan a la construcción de un Estado presente, cuestión que fue manifestada claramente por el primer mandatario cuando declaró en una entrevista sus deseos de destruir al Estado.

Rodolfo Aguiar, secretario general de ATE, criticó la hipocresía del Gobierno, que avanza en despidos masivos en el Estado a la vez que realiza contrataciones inexplicables. "Hoy conocimos que (el vocero presidencial, Manuel) Adorni volvió a nombrar funcionarios. Ya hemos perdido la cuenta de cuántos empleados nuevos tiene la vocería presidencial, pero son más de 100", dijo el secretario general de ATE Nacional.

Denunció que “a los amigos del poder el Gobierno les inventa cargos que no existen para poder garantizarles sueldos millonarios", y consideró que "estas contradicciones empiezan a quedar a la luz, se le cae la careta al Gobierno y pierde apoyo popular, nosotros tenemos que seguir en la calle para seguir logrando legitimidad. Si no se da la reincorporación de los despedidos, si los salarios en el sector público se mantienen congelados, sin lugar a dudas la conflictividad se va a acelerar en toda la administración pública", remarcó el dirigente.

En Casa Rosada planean acentuar el vaciamiento de la administración pública nacional cada tres meses, a medida que concluyan los contratos laborales que deben ser renovados a fin de cada trimestre, por cual desde el gremio estiman que el Gobierno irá por otras 6.000 cesantías en el Estado.

El secretario general de ATE Nacional destacó el mensaje enviado a la administración libertaria con la contundencia del paro realizado el jueves. “Nos permitió demostrarle a un gobierno que nos declaró la guerra desde hace tiempo a los estatales, que vamos a guerrear”, sostuvo, para luego agregar: “Nuestras armas, la de los trabajadores, van a ser los derechos de la Constitución Nacional”, enfatizó Aguiar.

La misma tarde del jueves, las organizaciones de Derechos Humanos convocaron a la habitual ronda para alertar y repudiar el desguaceen la Secretaría de Derechos Humanos, ya que se corrió el rumor de la no renovación de contratos de especialistas que vienen trabajando desde hace más de 10 años. Todas las arqueólogas del ex centro clandestino Club Atlético fueron despedidas, y lo mismo ocurrió con los técnicos del Ministerio de Defensa que revisaban los archivos de las Fuerzas Armadas para investigar crímenes de la dictadura.

En este contexto, se activaron las alarmas frente a la posibilidad de que el Gobierno decida cerrar el organismo encargado en buscar a los niños y niñas apropiados por el terrorismo de Estado: la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (Conadi). A partir de allí se organizó el acto en Plaza de Mayo.

Estela de Carlotto y Adolfo Pérez Esquivel estuvieron en la Plaza junto a otras figuras del arco político advirtiendo de la gravedad del avance de las políticas del Gobierno de Milei.

"La embestida masiva del Poder Ejecutivo contra todas las políticas públicas construidas a lo largo de estos 40 años de institucionalidad, bajo gestiones de distinto signo político, representa un ataque contra la propia sociedad" dicen en un documentado redactado por los organismos de DDHH.

"No solo a la juventud, al pueblo hay que animarlo. Todos podemos hacer algo. La violencia no tiene que existir, la resistencia sí. Y el amor por el otro con más razón. Y hoy estamos acá para que nuestro querido país, que está siendo desestimado por quien tendría que cuidarnos, va a salir de esta sombra más temprano que tarde", dijo Estela al cierre del acto, manifestando una empecinada, persistente y admirable voluntad de lucha. (El autor de esta nota pide perdón por tanta adjetivación, pero resulta conmovedor ver a personas como Estela, Adolfo y tantos otros que a lo largo del tiempo siguen marcando un camino).