…digamos que hoy te levantaste tan linda…Sí, sí. Estás preciosa… ¿No me lo crees…? ¡Mirate en este espejo…! ¡Son mis ojos…! ¡Mirá tan linda que estas…! y ese abrigo blanco que te queda tan bonito. Nos alegraste a todos… ¡Mirá a tu cielo…! Ninguna nube lo quería visitar ¡Y a tu río…! que ayer estaba planchado, aburrido… pasaba rapidito para no ver a nadie y que tampoco lo vea nadie… Es que le daba vergüenza ser tan flaquito ¡Y míralo ahora…! ¿Quién lo para…? Tan alegre que viene que se quiere quedar…Desborda, salpica su alegría para todos los lados. No hay quien lo contenga. Ni en su lecho entra de tan grande que los has dejado. ¡¿Y esas huellas y caminos…?! Es que todos te han venido a ver y te quieren. Y te quieren tanto… que tanto te pedimos todos, que te quedes, que no te vayas…

 ¿Dónde habrá más belleza que acá…?

 ¡Quedate…!