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Vaca Muerta, el campo y energías renovables son los únicos sectores de la economía argentina que recibirán inversiones genuinas en los próximos meses, por su alta rentabilidad. La quita de retenciones y los fuertes subsidios, combinados con la suba de los precios del gas en boca de pozo y de las tarifas, sacan ventajas por sobre el resto de la economía argentina, signada por un consumo y actividad industrial que se caen a pedazos.
En los próximos meses se repetirán los anuncios de millonarios desembolsos por parte de las operadoras con presencia en la Cuenca Neuquina. El nuevo esquema del Plan Gas apunta a acelerar los planes de inversión de las empresas con proyectos en los yacimientos no convencionales. La zanahoria está en el precio. Si una compañía logra ingresar un proyecto durante este año y el próximo, percibirá 7.50 dólares el millón de BTU por el gas. A partir de 2019, el precio bajará 50 centavos de dólar por año.
Empresas como Tecpetrol, YPF, Wintershall, Pan American Energy ya hicieron anuncios en ese sentido. Y, durante el viaje que realizó el gobernador Omar Gutiérrez por Estados Unidos y Canadá para presentar la V Ronda Licitatoria de Gas y Petróleo del Neuquén, se trajo una fuerte promesa de ExxonMobil. Durante un encuentro en Houston, los ejecutivos de la petrolera más grande del mundo y de su subsidiaria XTO, Glenn Scott, Rod Henson, y Daniel De Nigris, adelantaron que a fines de mayo pedirán a la provincia el otorgamiento de la concesión no convencional por 35 años del bloque Los Toldos. Esperan sumar unos 5 millones de m3 de gas dentro de los próximos dos o tres años.
El respaldo político a las nuevas reglas del mercado del gas por parte del gigante estadounidense es toda una señal. No es para menos, hoy Argentina tiene los precios en boca de pozo más altos del mundo.
El gobernador neuquino destacó el martes, durante la inauguración de una planta de tratamiento temprano de petróleo de Shell en Sierras Blancas, que “ahora la palabra la tienen as empresas”, una vez acordada la flexibilización laboral y garantizados los altos precios de los hidrocarburos.
Si bien por la caída del barril de petróleo, hoy el mercado doméstico se concentra en el gas, la explotación de la ventana de shale oil de Vaca Muerta comienza a alcanzar los umbrales de rentabilidad.
“Vaca Muerta es el segundo activo de shale gas más grande de Shell en el mundo. El costo de los pozos se redujo 50% en tres años en Estados Unidos y queremos traer esa experiencia acá”, planteó Andrew Brown, vicepresidente ejecutivo y responsable de upstream de Shell a nivel global durante un acto al aire libre montado en pleno yacimiento.
Indicó que el break even (punto de equilibrio sobre el cual es rentable producir) es de US$ 40 por barril en la mayoría de los pozos en Estados Unidos. “Nuestra ambición es llegar acá a valores que compitan con esos. En los mejores pozos nos estamos acercando. Cada pozo es distinto, pero el potencial está”, aseguró.
Gran parte de la plana mayor de Shell llegó a Neuquén para celebrar un hito: por primera vez la empresa angloholandesa empieza a producir petróleo en el país, ya que históricamente se concentró en el segmento del dowstream. Participaron del evento el presidente de la filial argentina, Teófilo Lacroze; el vicepresidente de No Convencionales para América, Greg Guidry; el gerente general de Recursos No Convencionales para Argentina, Laurens Gaarenstroom; el venture manager de Vaca Muerta, Maximiliano Hardie, y el gerente de operaciones de Shell Argentina, Facundo Rucci.
Entre los invitados estelares ausentes en la árida estepa patagónica estuvieron el presidente Mauricio Macri, el ex CEO Juan José Aranguren, y el secretario de Recursos Hidrocarburíferos, José Luis Sureda, quien días antes había renunciado con una escandalosa carta dirigida al ministro de Energía.
La nueva planta de producción le permitirá a Shell conectar pozos de Sierras Blancas, Cruz de Lorena. Hoy procesa 2500 barriles diarios y llegará al tope de su capacidad de 10 mil barriles en 2018. El objetivo de la compañía es pasar de la fase piloto a una de desarrollo a gran escala antes de 2020.
Para ratificar el rumbo del nuevo status quo y despejar dudas en torno a la flexibilización laboral en Vaca Muerta Macri se reunirá el próximo miércoles con ejecutivos de las principales compañías petroleras en un almuerzo que se llevará a cabo en la ciudad de Houston organizado por el Instituto Argentino del Petróleo y el Gas (IAPG).
De la reunión participará Aranguren y el gremialista y senador Guillermo Pereyra, quienes se verán las caras con CEOs de petroleras que operan o evalúan comenzar a operar en la Argentina.
Allí buscarán convencer al mundo petrolero de que se abre nueva etapa en Vaca Muerta.
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