El avance en el escrutinio definitivo de la elección presidencial en Uruguay confirmó que el pacto entre los partidos de derecha resultó vencedor, aunque por un margen ínfimo, y el futuro presidente de la República será Luis Lacalle Pou, del Partido Nacional. 

Quedó así develada la incógnita planteada en la noche del domingo pasado, día de la elección, cuando el vencedor fue Lacalle Pou sobre el candidato del Frente Amplio, Daniel Martínez, pero por un margen menor a la cantidad de votos observados. A raíz de ello la Corte Electoral anunció que el resultado oficial se daría a conocer tres el conteo definitivo.

En verdad dicho escrutinio aún no concluyó, pero sí se informó oficialmente que la diferencia es indescontable. Martínez reconoció la derrota al expresar en Twitter que “la evolución del escrutinio de los votos observados no modifica la tendencia”, y “por lo tanto saludamos al presidente electo”. También anticipó que hoy mantendrán una reunión.

Lacalle Pou asumirá en marzo del año próximo, y en ese momento se cerrará un ciclo de 15 años donde el país fue gobernado por el Frente Amplio, que agrupa a partidos y agrupaciones de centroizquierda e izquierda. 

En un país donde los mandatos duran cinco años y la Constitución no permite la reelección -salvo que haya un periodo intermedio- dicho frente gobernó con primero con Tabaré Vázquez (2005-2010), luego con José “Pepe” Mujica (2010-2015), y después nuevamente Vázquez (2015-2020).

Alineado con Estados Unidos

El flamante presidente electo tiene un perfil neoliberal en lo económico y alineado con Estados Unidos en política exterior. Su ascenso al poder configura un grave problema para los sectores que defienden la no injerencia norteamericana en Venezuela y que repudian el golpe de Estado en Bolivia.  

Además, es conservador en cuanto a los derechos civiles. Como legislador votó en contra de las leyes de matrimonio igualitario, aunque durante la campaña dijo que se había “arrepentido” de hacerlo. También se opuso a una ley sancionada por el Frente Amplio que fue avanzada en el mundo: se trata de la que permite la producción de cannabis bajo estrictos controles de salud y otras regulaciones estatales.

El candidato que resultó finalmente ganador en la contienda presidencial, había sido derrotado en la primera vuelta. Martínez, del Frente Amplio, obtuvo esa vez el 39% de los votos, mientras que Lacalle Pou salió segundo con el 28%.

Para enfrentar el balotaje, el ahora vencedor hizo un acuerdo “anti-Frente Amplio” con el tradicional Partido Colorado, más otras dos formaciones políticas minoritarias (Partido Independiente y Partido de la Gente), y también con el militar ultraderechista Guido Manini Ríos. Este último fue votado en la primera ronda por el 11% de los ciudadanos.

Familia aristócrata

Tradicionalista, católico y miembro de una familia aristócrata, el flamante mandatario electo es actualmente senador nacional y antes fue diputado. También es hijo de un ex presidente. Su padre, Luis Alberto Lacalle, gobernó el país entre 1990 y 1995, pleno auge del neoliberalismo. 

Asimismo, es bisnieto de Luis Alberto de Herrera, quien hace poco menos de un siglo -entre 1927 y 1929- integró el Consejo de Administración Nacional, que era parte de un Poder Ejecutivo colegiado. Dicho dirigente es una de las figuras históricas que más influencia tuvo en el Partido Nacional durante décadas, al punto de que dio nombre al “herrerismo” como corriente interna que perduró casi toda la centuria.

A partir del 1 de marzo de 2020 Luis Lacalle Pou será presidente de Uruguay, y con la suma de legisladores de los distintos partidos con los cuales hizo un pacto para el balotaje, tendrá amplia mayoría en el Parlamento.