Alberto Weretilneck, el gobernador rionegrino, habló de la contaminación de las aguas del río y tras reivindicar la seriedad y la transparencia en los análisis que en este sentido hace el Departamento Provincial de Aguas (DPA) en los laboratorios del CIATI y la Universidad del Comahue, confirmó la inexistencia de plantas de tratamiento en algunos lugares y el mal funcionamiento en otras y el consecuente vertido de aguas crudas al cauce del río.

Aseguró que no hay contaminación vinculada a la actividad hidrocarburífera y que se está trabajando junto a Neuquén y el gobierno nacional “para buscar el financiamiento para poder ejecutar las obras cloacales que están faltando para que no se vuelquen efluentes crudos al río y de ahí mejorar su estado”.

Confirmó que a mitad del año se hará la licitación para poder tratar el 50% de los líquidos cloacales de Cipolletti que hoy van crudos al río, ya que se están haciendo hoy con Nación los últimos ajustes al pliego de licitación.

Indicó que en el mismo paquete está una obra similar para General Roca y se está ejecutando la planta en Choele Choel que arrojaba el 100% de los líquidos al río.

Recordó que en febrero comienzan las obras en Bariloche para que no haya impacto sobre el lago Nahuel Huapi y en función de que la cuenca es una sola, espera que de la misma forma obre Neuquén.

Indicó que no tiene “reproches” contra quienes acuden a la justicia por este tema, porque es su derecho y es bueno que se preocupen por la salubridad del río, pero reiteró que se debe tener en claro que los puntos impactados de contaminación no lo son por petróleo o gas, sino por el volcado en crudo de los líquidos cloacales.