“Además del reconocimiento de los derechos que tenemos hoy establecidos en todos los estamentos de los estados, por sobre todo, el hospital intercultural nos viene a dar una fortaleza para retomar los conocimientos ancestrales", dijo el lonko de la comunidad de Ruca Choroi, Hugo Lican, a propósito de la inauguración en esa localidad de Raguiñ Kien, el primer hospital intercultural que funcionará en el país a partir de hoy.

Este Centro de Salud con forma de medialuna, combinará la medicina occidental con la mapuche y los pacientes podrán elegir qué tipo de abordaje de la salud desean recibir.

"Hay que ser muy cautos con todo porque mientras se va haciendo la atención hay que ir viendo cómo ir ampliando, qué ir sumando, cómo ir monitoreando la salud, quiénes hacen uso de las prestaciones para que todo sea efectivo. Hay muchos desafíos en el medio. Pero los asumimos y tenemos la convicción clara de que esto va a funcionar", dijo Lican a , un día antes de la apertura.

El lonko expresó que los conocimientos ancestrales del pueblo mapuche se están perdiendo y que la construcción del hospital, de alguna manera, es una reivindicación a ese saber, que está desapareciendo producto de la estigmatización y de la imposición de la cultura occidental por sobre la indígena.

"Hace un par de años atrás la gente se escondía para preparar su té de remedio. No lo podía contar porque si lo contaba más de uno le decía que se iba a envenenar o que no se podía hacer porque no estaba reconocido. Tomar un té de remedio era como hacer algo ilegal", remarcó Lican y agregó que "eso hoy queda sin efecto. Por eso esto nos viene a fortalecer como pueblo. Cada cultura tiene su manera de tratarse, de curarse; su cosmovisión".

Lican es lonko de una de las comunidades más grandes del departamento de Aluminé donde, señala, hubo mucha complicaciones durante la pandemia. Esto aceleró el proceso para la inauguración del hospital en el que vienen trabajando desde hace trece años.

Ahora que llegó el día, "siento un poco de temor porque se cruzan diferentes sensaciones. Más allá de que hay que avanzar y ponerlo en marcha, es un desafío enorme. Es la primera vez que en Argentina y en un lof (comunidad), se pone en marcha un hospital de estas características, donde no hay nada escrito, no hay una receta", expresó.

Con la inauguración, "no hemos terminado nada. Empieza otra etapa con mucho más trabajo, mucha más atención, porque es la etapa en la que no vamos a estar hablando de un proyecto, vamos a estar trabajando sobre las prestaciones o sobre los trabajos que deben hacerse".

Pese a la presión que significa el compromiso asumido, agregó que "es un sueño que viene a cumplirse".

"El verdadero trabajo es ahora"

Según el decreto 2021/1634 de creación del Centro de Salud Intercultural Raguiñ Kien (quiere decir medialuna), tendrá nivel de Complejidad II y dependerá de la Jefatura Zona Sanitaria II.

Durante el último año, el meli purrufe, un grupo de cuatro personas de la comunidad, dio el envión final para que el centro de salud se concretara. Se fueron sumando lonkos de la comunidades, el equipo de salud de la cuenca de Ruca Choroi, entre otras personas dispuestas a aportar.

Se definió la forma de administración y de gestión "teniendo en cuenta que había que combinar una forma de trabajar distinta: desde los nombres de las prestaciones hasta los lawenes (remedios)", cuenta Lican, y apunta como ejemplo que se construyó una ruca, que "es una casa en forma redonda techada con junco, que no es tanto una sala de atención, sino un espacio donde poder conversar", teniendo en cuenta que la sanación para la cultura mapuche comprende tanto el bienestar físico como el espiritual.

El trabajo final incluyó la realización de talleres y viajes a Chile para conocer las experiencias de los hospitales interculturales que funcionan allí. Finalmente, se definió que el hospital no tendrá un organigrama como el resto de los hospitales públicos. La dirección será reemplazada por el nor feleal, que quiere decir "norma de vida". Se trata de un organismo integrado por autoridades filosóficas de la comunidad y los lawentuchefes, o personas curadoras, que tienen el saber ancestral para hacer sanación, que les ha sido transmitido de generación en generación. También habrá personas formadas en la medicina occidental.

"Una vez inaugurado se empezará a trabajar en la suma de personal de todo lo que se requiere, desde limpieza, recepción. El 90 por ciento son cargos en los que se va a emplear a gente de la comunidad", indicó Lican, y agregó que "todos los cargos que se sumen de aquí en más van a ser concursados, inclusive los que se van a sumar dentro de la ocupación acá en territorio". El nor feleal será el encargado de preparar los concursos que se vienen.

Otra característica del centro de salud es que "estará totalmente descentralizado de los gremios entonces va a haber una sola normativa, propia, autónoma, que va a regir a los trabajadores. Todos los cargos que se sumen de aquí en más van a ser concursados", indicó.

Las personas que decidan atenderse en el hospital podrán elegir qué tipo de asistencia reciben: la occidental o la mapuche. "Va a haber una cartelera donde van a estar todas las prestaciones y los pacientes verán dónde hacen la consulta o donde se hacen atender", afirmó.

Por último, aseguró que tras trece años de planificación, "el verdadero trabajo es ahora, porque no tenemos una receta".