Entre las provincias de Mendoza y La Pampa hay seis décadas de conflictos entre los que se cuentan el de las aguas de los ríos Atuel y Desaguadero, las regalías de los Nihuiles y desde los ‘70 el de la presa Portezuelo del Viento.

Acerca de este último conflicto interprovincial, hace pocos días el presidente Macri laudó a favor de la construcción de la presa en Mendoza, a pesar del rechazo de La Pampa.

El proyecto hidroeléctrico Portezuelo del Viento prevé construir, sobre el río Grande, una presa y una planta hidroeléctrica capaz de generar más de 200 megavatios de energía, además de 251 kilómetros de línea de alta tensión para integrarla al sistema interconectado nacional.

Proyectada para que incremente en 60.000 hectáreas la superficie cultivable de San Rafael, de General Alvear y de Malargüe, generará una energía equivalente al 25% de lo que hoy se consume en todo Mendoza.

Pensada desde principios del siglo XX, la presa se erigirá en una zona conocida como Cajón Grande - en la zona del paso El Pehuenche- y tendrá una capacidad que rondará los 3.000 hectómetros cúbicos en una superficie que abarcará a unas 5.000 hectáreas.

La obra prevé una inversión de más de 700 millones de dólares, lo que permitirá generar alrededor de diez mil empleos directos e indirectos.

Será esta, la mayor obra de infraestructura de las últimas décadas que Mendoza recibirá terminada y que apenas comience a generar energía representará mayores ingresos por regalías.

Será construida por la Nación y pasará a ser propiedad del Estado de Mendoza. 

La construcción de Portezuelo forma o formaba parte de otro mega proyecto que es el trasvase del río Grande al Atuel que sigue siendo motivo de ásperas discusiones entre provincias argentinas.

Antecedentes

En el transcurso de la década del ‘70 la firma Harza Argentina, a pedido del ministerio de Obras Públicas mendocino, elaboró un estudio de prefactibilidad de aprovechamiento de los ríos Colorado, Grande y Barrancas.

En 1992, se realizó un segundo paso que destacó el potencial como productor energético. A finales de esa década, en 1999, se evaluaron alternativas de centrales hidroeléctricas y de generación de energía sobre el río Grande, entre ellas, Portezuelo del Viento.

Vale la pena aclarar que en 2007 la provincia de Mendoza con aval de su Legislatura renunció a un juicio contra la Nación a cambio del avance de Portezuelo.

Sin embargo no hubo muchos avances a pesar de que los mendocinos siguieron trabajando técnicamente en el proyecto ejecutivo.

Ya en 2016 el proyecto llegó a manos del ministro de Energía de la Nación Juan José Aranguren, tras lo que se firmó un convenio marco entre Mendoza y el Estado nacional.

En noviembre de 2016 con la coordinación del ministro del Interior, Rogelio Frigerio, se reúne la cumbre de gobernadores en el marco del Comité Interjurisdiccional del Río Colorado (Coirco) del que forman parte las dos provincias involucradas en este conflicto Mendoza y La Pampa, además de Buenos Aires, Río Negro y Neuquén.

Los gobernadores Omar Gutiérrez, Alberto Weretilneck y María Eugenia Vidal votaron a favor del emprendimiento dejando solo en su reclamo al pampeano Carlos Verna, sin embargo se estableció que en el caso de Portezuelo del Viento los ejes principales pasan por la fijación de las normas de manejo de aguas y la evaluación de los impactos ambientales que se puedan generar en la cuenca a partir de la construcción de la obra.

El comité también había votado a fines del 2016 la realización de un estudio ambiental regional y aprobó las normas de manejo de aguas, donde queda explícitamente planteado que la autoridad de aplicación de dichas normas será el Coirco, similar a lo que ocurre desde el 2000 en el Embalse Casa de Piedra.

Consultado el mandatario rionegrino dijo que “todas las provincias estamos de acuerdo con Portezuelo, excepto La Pampa, para nosotros, esta obra es muy importante porque maneja las crecidas sobre el río Colorado”.

Aseguró Weretilneck que “como Catriel y Río Colorado, están casi sobre el lecho, tomamos el tema con mucha responsabilidad” y agregó que desde su punto de vista la cuestión es eminentemente política e histórica ya que “La Pampa tiene un problema de muchos años con Mendoza, y Macri lo que hizo es laudar a favor de las provincias y del Estado nacional”.

Autoridades dela Corporación de Fomento del Valle Bonaerense del Río Colorado (Corfo) -que administra el riego de 137 mil hectáreas en Villarino y Patagones con agua del Colorado- tomaron distancia de la postura del gobierno pampeano y dejaron en claro que no se hará ninguna obra que pueda afectar a uno de los principales ríos que surca la región.

“Esta obra, no solo beneficiará a Mendoza, sino que también es un beneficio para la cuenca en cuanto otorga mayor capacidad de embalse y regulación”, añadió.

Otras opiniones

Algunos especialistas consultados en cuanto a posibles consecuencias para las otras provincias como Río Negro y Neuquén dicen que esta obra, si bien es una solución al conflicto por el río Atuel, se deberá complementar con el trasvase del río Grande al Atuel, lo que le daría más caudal al río que hoy está cortado en territorio pampeano.

El problema que se genera es que el río Grande es afluente natural del río Colorado y el proyecto mendocino completo, según se afirma, es hacer un trasvase de 34 metros cúbicos por segundo del Grande al Atuel, que es un objetivo pretendido desde hace muchos años por las autoridades mendocinas, a fin de mejorar las posibilidades de aprovechamiento de zonas bajo riego en esa provincia.

Una medida de esa naturaleza impactará negativamente en la cantidad y calidad de las aguas transportadas por el río Colorado.

Sin embargo en Coirco dicen que teniendo en cuenta los criterios de llenado del Embalse de Portezuelo, que fija un valor de derrame anual de 3000 hm3, por debajo del cual no se podrá utilizar agua para el llenado del embalse, esto es imposible que suceda.

Si esta premisa se cumple con esas previsiones de derrame, el valor es mayor al que el Colorado está teniendo en el último año, por lo que la salinidad no será mayor a la que hoy está transportando.

“Está todo armado”

El investigador pampeano Edgar Morisoli, especialista sobre la temática hídrica, afirma sin embargo que “las más perjudicadas serán las áreas que riegan por toma libre, porque al no tener un dique derivador que obliga a las aguas a entrar, las zonas regadas por tomas libre dependen del nivel natural de las aguas del río”.

“Eso es en Neuquén, Río Negro y La Pampa, donde hay áreas en producción pioneras en la cuenca del Colorado como Rincón Colorado, Rincón de los Sauces, Valle Verde, Peñas Blancas, El Sauzal que tendrán que buscar otra solución”, agregó.

“Una cosa son los regantes y otra los gobiernos provinciales, los que no hacen los reclamos no son los regantes. Buenos Aires será la principal perjudicada porque es la última que riega con el Colorado y es raro que todavía no haya dicho nada” afirmó Morisoli

Incluso Morisoli en una nota que publica el diario pampeano La Arena, introdujo un nuevo dato al conflicto al afirmar que la obra despierta también el interés de la “poderosa” empresa metalúrgica Pescarmona, que “tiene preadjudicadas las turbinas de Portezuelo del Viento, imprescindibles para la central hidroeléctrica”. “Está todo armado”, agregó.

De esa forma, señaló que “la poderosa empresa Pescarmona es un protagonista oculto, que justamente no está a la vista” y advirtió que la firma presiona de alguna manera y también tiene intereses “con lo que implica en puestos de trabajo y demás cuestiones en la provincia de Mendoza”.

“Estaba cantado”

Otro especialista, el profesor Wálter Cazenave, dijo que “era cantado” el laudo a favor de la posición mendocina “desde hace tres meses por la relación política del presidente con Mendoza y sus imprudentes y equivocadas declaraciones sobre el río Colorado, aunque en realidad se usa el 97%”. (Macri señaló en Gaimán hace 20 días que el agua del Colorado no se utilizaba y se tiraba toda al mar).

Sobre el estudio de impacto ambiental, al que Nación dice supeditar la obra Portezuelo del Viento, aunque al mismo tiempo dio luz verde a la ejecución, Cazenave manifestó que “es una de las incongruencias que tiene el laudo” del presidente. “Por un lado lo apoya y por el otro condiciona la licitación con el estudio. Esto desarticula al Coirco, que había pedido un informe ambiental sobre toda la cuenca del Colorado”, siguió.

Finalmente al criticar la postura de los gobernadores de Río Negro y Neuquén, principalmente, y de Buenos Aires, el investigador explicó que los mandatarios “optaron por la caja nacional de dinero por la que se manejan muchas opiniones”.

La voz de La Pampa

"Vamos a ir a la Corte para pedir la nulidad del laudo arbitral", dijo el gobernador pampeano, Carlos Verna.

“Esto representa una grave violación de los más elementales principios republicanos, ya que se convierte en una acción del Poder Ejecutivo nacional que compromete la imparcialidad e independencia del Presidente”, dijo Verna al conocer la decisión de Macri.

“Lamentamos que no haya decidido apartarse del juzgamiento y resolución del diferendo y optar por violentar los principios más elementales del proceso en perjuicio de La Pampa y de cada pampeano”, añadió el mandatario.

Hace casi dos años el gobernador pampeano también había pedido al presidente Macri que el Coirco tuviera el manejo de la presa pero la respuesta fue el rechazo presidencial a través del laudo. 

Verna, además reclama una mega declaración de impacto ambiental que abarque la totalidad de la cuenca del Colorado. 

En este sentido el secretario de Recursos Hídricos de La Pampa Javier Schlegel manifestó que “el laudo del presidente no aclara si el estudio de impacto ambiental es el que quiere Mendoza, solo dentro de su provincia, o el que aprobó Coirco que es sobre toda la cuenca”.

Agregó que “tiene que quedar clara una cosa, y es que el estudio de impacto ambiental debe ser en toda la cuenca, nosotros queremos saber cuál va a ser el impacto de Portezuelo no solo en Mendoza, sino sobre todo en La Pampa y en el resto de las provincias que estamos río abajo”, subrayó.

También se alinearon al mandatario justicialista, hombres del radicalismo pampeano como el diputado nacional Daniel Kroneberger que afirmó que "esto no es parte del cambio” y agregó que “Macri no debió intervenir en esto, no puede ser juez y parte".

Lo mismo hizo Hipólito Altolaguirre, presidente de la UCR de la provincia y hermano del intendente de Santa Rosa, Leandro Altolaguirre, que dijo que “sólo se beneficia Mendoza”.

La voz de Mendoza

El gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo dijo que el actual gobernador de La Pampa, Carlos Verna en su primer mandato (2003-2007), cambió la posibilidad de hacer la obra complementaria del trasvase, que solucionaría la problemática de la escasez del agua en el río Atuel, por el dinero. También reclamó al Gobierno pampeano no haber hecho obras en 20 años para la zona que se está desertificando.

“En 2007 se negoció que la Nación nos resarciría los perjuicios de la Promoción Industrial. La Pampa también tenía la misma demanda, por lo que el presidente Néstor Kirchner propuso a los gobernadores Verna, quien gobernaba en ese entonces, y a el mendocino Julio Cobos un acuerdo que consistía en resolver incluso el problema del Atuel”, señaló Cornejo.

“El acuerdo consistía en que Portezuelo se construyera con el trasvase del río Grande al Atuel, para que tuviera más agua y así poder regar la zona que se ha desertificado, que no solo es el noroeste de La Pampa, sino el sureste de Mendoza”, explicó Cornejo.

“Los mendocinos nos quedamos con un acuerdo, con un papel, y los pampeanos, con la plata”, acusó. Según el mendocino, el resarcimiento que le tocaba a Mendoza solo alcanzaba para hacer Portezuelo, pero no la obra complementaria que permitiría solucionar el caudal del Atuel que llega a La Pampa.

De esta manera, el gobernador Cornejo salió al cruce de las repercusiones y de los enojos pampeanos.

“La Pampa pidió el laudo, el que salió favorable a la construcción de Portezuelo del Viento, pero no es en contra de La Pampa, que va a recibir la energía que se produzca. Esa provincia o el Gobierno de esa provincia no lo quiere. Nosotros esperamos ahora la licitación de Portezuelo y que se construya”, consideró el gobernador.

El ministro de Gobierno mendocino, Dalmiro Garay remarcó que el de Macri “no es un fallo en contra de La Pampa y a favor de Mendoza”, sino que “es un laudo que termina favoreciendo a los argentinos agregando una presa nueva, con todo lo que ella implica en cuanto a lo turístico, al manejo de agua y como aporte el sistema integrado de energía

La voz de Nación

El subsecretario de Recursos Hídricos de la Nación, Pablo Bereciartúa, brindó detalles de los pasos que se vienen de aquí en mas, para concretar a fin de año o principios de 2019 el inicio de la obra hidroeléctrica.

En primer lugar, para poder realizar el llamado a licitación resta que Mendoza presente la documentación técnica que le falta, vinculada a la prefactibilidad ambiental. Luego de eso el gobierno nacional estará en condiciones de realizar el llamado. Según manifestó el funcionario nacional, por la magnitud de la obra, “se realizará un llamado a licitación nacional e internacional”.

Frente al reclamo de La Pampa, el funcionario nacional consideró que en este ámbito también se “mezclaron las cuestiones políticas” y, en ese sentido, defendió la decisión del presidente Macri.

“Si La Pampa judicializa, lo evaluará la justicia. Mi visión es que se ha cumplido con el estatuto del Coirco. Nuestra prioridad es que funcionen las instituciones de acuerdo a las reglas”, sostuvo.

Por otra parte el funcionario resaltó que Portezuelo “representa un acuerdo con el gobierno nacional para saldar la deuda de la promoción industrial con Mendoza”. “El gobierno nacional dio prioridad a obras de infraestructura grandes en diversas zonas del país donde el agua es más valiosa. Argentina y Mendoza van a necesitar mayor capacidad de regulación por la adaptación al cambio climático que requiere un uso más inteligente del agua”, sentenció.

Paralelamente al llamado a la licitación se comenzará con los estudios de impacto ambiental, que estarán a cargo de la Universidad del Litoral de Santa Fe y de la Universidad Nacional de La Plata. Una vez que ese estudio esté finalizado recién ahí se puede adjudicar Portezuelo del Viento. El otro requisito es la aprobación el plan de llenado del embalse, que los mendocinos dicen que ya está listo.

De cumplirse lo proyectado y se cumple estrictamente con lo dispuesto por el Comité Ejecutivo del Coirco todo indicaría que el rol de la nueva presa contribuirá al manejo de los caudales de una de las principales cuencas hídricas de la Patagonia y además sumará aportes en materia energética al sistema interconectado nacional.

El rol regulador acompañará a Casa de Piedra, complejo ubicado sobre la cuenca media en uno de los puntos limítrofes entre Río Negro y La Pampa que se terminó a fines de la década del 80.

En el inicio de los años ‘90 fue cuando comenzaron a embalsarse los primeros caudales, formándose un lago de unas 35 mil hectáreas que pasó a ser el gran reservorio, regulando las crecientes y bajantes naturales que se producen en la cuenca, en función de las nevadas invernales en las nacientes, parece haber logrado su objetivo, incluso cuando se debió hacer frente en el 2010 a una de las crisis hídrica de mayor magnitud desde que se llevan registros en el Colorado.