El líder del MPN, Jorge Sapag, acaba de definir los límites dentro de los cuales deberá transitar su partido para elegir los candidatos de las elecciones legislativas de este año a las que, de paso, calificó de “muy importantes”.

Tras aclarar que desde Pablo Gutiérrez Colantuono a Rolando Figueroa pasando por quién sea “todos pueden ser candidatos”, Sapag reconoció la potestad del gobernador y presidente del partido para participar, en aparente paridad con él, de la convocatoria para tomar tan trascendente decisión, pero aclaró que el o los elegidos deberán “garantizar la unidad”.

Es un secreto a voces que los Gutiérrez tienen sus propios candidatos, tanto para las legislativas como para las municipales y se presume que con Sapag ocurre otro tanto, o al menos que los suyos no son los mismos que los de la familia gobernante, pero lo que ha hecho el ex gobernador es advertir que la solución debe ser potable para todos. Dicho sea de paso, se sobreentiende que para “El Caballo” Pereyra también.

Si se agrega que las elecciones legislativas de este año son de verdad muy importantes para el MPN, porque ese partido se juega su única banca en el Congreso y en general las elecciones de medio término son el precalentamiento para las provinciales, se concluye que el candidato deberá ser indiscutible. Algo que no abunda en ningún lado.

Apelando a una lógica tan elemental como implacable, Sapag también aludió a su ¿ex? compañero, el tres veces gobernador del MPN y actual precandidato de la Democracia Cristiana Jorge Sobisch. “No se puede ser y no ser del MPN al mismo tiempo”, deslizó y recordó que “el que se fue es él”.

El hecho de que las elecciones a mitad de mandato nunca han sido muy provechosas para el MPN, sumado a que Sobisch podría forzar las leyes de la lógica llevándose votos del MPN sin ser más del MPN, ambas cosas juntas, parecen haber determinado un cierto giro a la derecha, al menos en el discurso, de Sapag.

Ya dijimos desde acá que Sapag aparece tanto porque anda de campaña y ahora agregamos que ha elegido para confrontar al Frente de Todos, no por nada algunas de sus críticas coinciden con las de Juntos por el Cambio. Tal vez esto es así porque se siente más cómodo con un perfil conservador popular o acaso porque cree que hoy el MPN lo necesita para bloquear la fuga de votos hacia ese sector.

Sapag dice que él “no es K ni macrista, sino del MPN”. Pero en el partido provincial conviven expresiones opuestas a nivel nacional, que se manifiestan con mayor claridad en las elecciones nacionales y que quedan atemperadas en las provinciales. De hecho, Cristina, Scioli y Fernández ganaron en la provincia, pero cuando se habla de elegir gobernadores, intendentes o diputados provinciales el asunto puede ser bien diferente.

Es un dato concurrente con este cuadro de situación, la circunstancia de que Horacio Quiroga ya no esté en el panorama electoral y que nadie haya logrado llenar ese vacío, lo que convierte a ese espacio de centro derecha en un botín formidable que puede inclinar el resultado de las elecciones de este año.

Por lo pronto, la fecha límite para presentar precandidatos a las PASO es el 24 de julio próximo, corre la cuenta regresiva.